Recuerdos Y La Memoria: Facultad Exclusivamente Humana
“La memoria es una experiencia sustituta, en la cual se da todo el valor emocional de la experiencia actual sin su tensión, sus vicisitudes y sus perturbaciones” John Dewey (1950)
Introducción
El presente ensayo tratará acerca de un tema imprescindible para el desarrollo humano; la memoria, es el camino en donde el pasado viene hasta el presente. Los hechos que fueron, gracias esta, siguen siendo. Y, en definitiva, es el mejor antídoto contra el olvido. La memoria como la atención son capacidades o facultades de la mente del ser humano y, a la vez cada una de estas facultades tienen su propia importancia, su funcionamiento, sus factores, fases y trastornos. Dentro de ello el gran problema que enfrentan los estudiantes de los países en desarrollo, tiene que ver directamente con la falta de memoria, cada vez que el estudiante atiende la clase y participa de ella; al término de ésta, poco o casi nada la recuerda, esto repercute directamente en la educación y, consecuentemente en el aprendizaje. Ninguno de los métodos de enseñanza podrán ser efectivos mientras exista alteraciones de la memoria en el estudiante e impida el normal desarrollo de sus capacidades intelectuales. A continuación, se mencionará la definición según cierto personaje celebre para luego compararlo con lo que se piensa en la actualidad, así mismo, los tipos de memoria, sus factores y algunos trastornos relacionados a esta.
Desarrollo
Baddeley (1997) menciona que “La memoria es una función cerebral que interviene en todos los procesos de aprendizaje del ser humano. Es vital para la supervivencia del individuo como lo ha sido para la supervivencia de la especie. Esto es un punto común con muchas de las especies animales, por no decir todas y cuando consideramos novedosos aspectos en estudio como la memoria de las células, también es un punto común con las plantas y los demás seres vivos”
La memoria es la capacidad de impresión (grabado), retención, reproducción de los acontecimientos y experiencias vividas con anterioridad. Es la persistencia del pasado, pero no es un simple ¨almacén¨ de recuerdos o una grabación fotográfica o magnetofónica, sino una función cognoscitiva que utiliza y organiza activamente las informaciones recibidas para hacer eficaz la interacción del organismo con el ambiente. La memoria influye en la vida psíquica y biográfica del individuo, la cual, influye en la memoria. El proceso de información detecta y selecciona (atención), reconoce y elabora (percepción), almacena y recupera (memoria – aprendizaje) y utiliza (conducta).
Por consiguiente, se tiene a los tipos de memoria donde prevalece la memoria a corto plazo, predominando en esta nuestra retentiva de trabajo; en donde los recuerdos a corto plazo son fugaces y duran apenas unos segundos. Sin embargo, es posible mantener la información por periodos más largos a través del repaso por repetición llamado también “repaso de mantenimiento”. (Albert, Maisti & Morris, 2010, p.190). Así mismo, tenemos a la memoria a largo plazo, denominada también el ultimo almacén del material que pasa desde la memoria a corto plazo, he ingresa a la de largo plazo, en un almacén de capacidad prácticamente ilimitada, de esa manera es más complicado que se llegue a olvidar.
En cuanto a los factores de la memoria, la elaboración de los estímulos y, en la fijación de los recuerdos o del material asimilado, se incluye, que cuando diversos temas con sentido están conectados entre sí en modelos o tipos lógicamente relacionados, la retención se mejora todavía más, esto supone aprender el material en forma lógica, es decir, comprenderlo antes de aprenderlo. La profundidad del material memorizado también depende del tiempo que se dedica a su memorización, a mayor tiempo, mayor profundidad. La calidad de la retención de un texto leído un mismo número de veces, es muy diferente cuando las lecturas son seguidas que, al ser espaciadas, en este segundo, la retención es mejor. El hecho de que cada día no se produzca olvido tras el aprendizaje hace pensar que la huella que éste deja se hace cada vez más intensa con cada reaprendizaje; el olvido es la imposibilidad de reproducir percepciones pasadas que fueron fijadas, a pesar del esfuerzo realizado por el sujeto para recordarlas, el olvido y la retención no son más que las caras opuestas de una misma moneda; lo que olvidamos es simplemente la diferencia entre lo aprendido y lo retenido.
A cerca de los registros sensoriales, tenemos a los visuales y auditivos; donde la información auditiva se desvanece con más lentitud que la información visual. El equivalente auditivo del ícono, el eco, suele durar varios segundos, lo cual, dada la naturaleza del habla, es sin duda afortunado para nosotros. La atención es el proceso de mirar, escuchar, percibir aromas, degustar y sentir de manera selectiva, al mismo tiempo dando significado a la información que llega.
En los sistemas de memoria; tenemos a la memoria sensorial, la cual se refiere al almacenamiento inicial y momentáneo de información que dura solo un instante. El término ”memoria sensorial” abarca varios tipos de recuerdos sensoriales, cada uno de los cuales se relaciona con una fuente distinta de información.
Una teoría explica el olvido con base a un proceso al que se denomina decaimiento o perdida de la información como consecuencia de su falta de uso. Esta explicación supone que cuando se aprende nuevo material se produce una huella mnémica o engrama, la cual es un cambio físico real ocurrido en el cerebro. En el decaimiento, la huella sencillamente se desvanece sin dejar nada tras de sí, como resultado del simple transcurso del tiempo. También se propuso un mecanismo adicional, la Interferencia. Cuando esta sobreviene, cierta información de la memoria desplaza o bloquea a otra información e impide que se le recuerde.
La única manera de mejorar la memoria es desarrollando técnicas para un aprendizaje efectivo, dentro de ellas tenemos: El sobre aprendizaje; donde se aumenta la retención, sobre todo en intervalos largos. No obstante, estos beneficios, probablemente siguen una “ley de dividendos decrecientes”.
Un cincuenta por ciento del tema referido al aprendizaje contribuye en la gran mayoría a la retención, pero un sobre aprendizaje no mejora el recuerdo en la misma proporción.
Por otro lado, se tiene a la organización subjetiva; donde la mejora de la retención con el sobreaprendizaje se da por la organización las personas para poder memorizar un estudio y lo complementan través de una práctica, eso les ayuda a retener más lo que se está estudiando. Sin embargo, esto no significa que no ocurra ningún aprendizaje adicional con una práctica complementaria.
Se encuentran las observaciones generales; generándose otro tipo de organización que tiene un valor reconocido para el aprendizaje. La mayor parte de los tratados de como estudiar, le dicen a uno para comenzar a estudiar cualquier conjunto grande de materiales obteniendo una impresión general. Para poder empezar a estudiar, en primer lugar, tenemos que familiarizarnos con la información y para empezar a leer un libro lo que se recomienda es comenzar a ojear todo el libro y luego leer el resumen antes de estudiarlo.
De igual manera tenemos los recursos mnemotécnicos; donde se suele utilizar informaciones comunes que una persona ya conoce apoyándose de esta manera para poder aprender otros nuevos materiales. Y las muletillas numéricas; que se producen cuando una persona recuerda en relación de la formación de una imagen con la cual relaciona otros objetos que le correspondan a esa información.
Por último, dentro de los trastornos de la memoria tenemos a la amnesia; que es la pérdida parcial o total de las funciones de la memoria. La amnesia retrógrada o de evocación es una pérdida de memoria que abarca el periodo previo a la aparición del trastorno que dio lugar a esta. En la amnesia anterógrada, los recuerdos de los acontecimientos se borran a medida que se van produciendo, en realidad, lo que falla es la fijación de las imágenes de los nuevos recuerdos; por este motivo también recibe el nombre de amnesia de fijación. La amnesia lacunar o localizada hace referencia a una pérdida parcial de la memoria que abarca un periodo concreto de los recuerdos. Este tipo de amnesia se observa en los estados de confusión mental, obnubilación o estado de coma, también tenemos a las hipermnesias definen como un anormal incremento total o parcial de la capacidad de memorizar (registrar, retener, evocar) es decir, una exagerada facilidad para recordar, y las paramnesias que consisten en falsos reconocimientos, inclusión de detalles, significados o emociones falsas, o bien de relaciones espacio-temporales erróneas. Unos fenómenos que aparecen también en estados normales son los del ¨ya visto¨ (deja vu), el cual corresponde a una falsa certeza de que ya ha sido vista una persona, un objeto o situación que, en realidad, son nuevos
Conclusión
En conclusión, la memoria constituye la capacidad básica y primordial para nuestra vida y fundamentalmente para todo nuestro aprendizaje es un proceso complejo utilizado para la adaptación, la evolución, la supervivencia, los cambios en nuestro comportamiento, la adquisición de experiencia para la obtención de nueva información. Se caracteriza por ser una constante sucesión de almacenamiento y recuperación de información, es allí donde cobran radical importancia los mecanismos de atención y memoria. Llegado a este punto del trabajo aún nos quedan varias dudas, por supuesto, se sabe que no está todo dicho. Pero partiendo de la antigüedad hasta nuestros días, destaco que se han perdido por el camino algunas cosas y se han ganado otras. Por ejemplo, perdimos el hábito de estimular nuestra memoria en varias formas; ya que poseemos una tecnología que nos recuerda nuestras citas o el número de teléfono de un amigo. Nuestra memoria a veces no es buena porque nuestro lugar para recordar queda encuadrado en un aparato tecnológico. A lo cual muchas veces echamos la culpa de nuestra ‘poca memoria’ y al estrés diario. Con este ensayo quiero rescatar y brindar información para el buen funcionamiento de la memoria, tomando de cada uno el que más nos convenga a nuestro modo de ser. Para aprender, memorizar, inferir, explicar y llegar a tener un buen aprendizaje.
Bibliografía
- Baddeley, A. D. (1997). Memoria Humana. Teoría y Práctica. Madrid: McGraw-Hill, 1999.
- Taylor, Ann. (2003). Introducción a la psicología: una visión científico humanista. Pearson Educación.
- Soprano, Ana María. (2007). La memoria del niño: desarrollo normal y trastornos. Elsevier España.
- Albert A. Maisto-Charles G. Morris. (2010). PSICOLOGIA.Décima edición; editorial Pearson.
- Feldman, Robert. (2003). Introducción a la psicología. Cuarta edición; Editorial Mc Graw Hill.
- Kimble, Gregory.,Garmezy Norman & Zigler Edward.(1992). Fundamentos de Psicología General. Editorial Grupo Noriega.
