Teoría del Conocimiento Como el Constante Deseo de Mejorarse
Según Augusto V. Ramírez: “El conocimiento es el acto consciente e intencional para aprehender las cualidades del objeto y primariamente es referido al sujeto, el Quién conoce, pero lo es también a la cosa que es su objeto, el Qué se conoce.” (Ramírez, 2009). Así, se puede decir que el conocimiento es la capacidad del ser humano para relacionar los objetos o acontecimientos de su alrededor y sacar sus conclusiones a partir de ellos. Sin embargo, este muchas veces se ha centrado en el mismo ser humano; es decir, el Quién conoce, y se ha apartado de la esencia y el objeto. De este modo, se ha formado una brecha del conocimiento en el que los estudios sobre el ser humano tienen un mayor peso en la abalanza que el conocimiento en otros campos.
El ser humano se ha puesto por encima de todas las cosas en cuanto al conocimiento y se ha promulgado el foco de atención en sus mismos estudios. Es así, que el antropocentrismo y el conocimiento humano son representadas en las Ciencias Naturales y en la Historia; con las formas, percepción sensorial e imaginación, respectivamente. Por lo cual, va a examinar: ¿Hasta qué punto podría ser problemático que el sesgo de nuestro conocimiento sea relacionado estrechamente a nosotros mismos (antropocentrismo) y no al entorno que nos rodea?
Obtener nuevos conocimientos es una habilidad que el ser humano ha concebido y desarrollado mucho más allá que otras especies. Desde el pasado, los conocimientos se han perfeccionado no solo en lo tangible, sino también en lo intangible; es decir, en los fenómenos que nos rodean. De esta manera, se origina lo que serían las Ciencias Naturales; pues, esta se encarga de estudiar todo aquello que no se relaciona con el ser humano, sino a la naturaleza. Sin embargo, las Ciencias Naturales en muchos casos se han visto opacadas por el conocimiento acerca del ser humano.
Las personas desde el inicio de la humanidad se han puesto por encima de todas las cosas, creyéndose a sí mismos “el centro del universo”. Un claro ejemplo de esto se remonta en el siglo VI a. C, cuando en la antigua Grecia situaban a la Tierra como el centro del universo pensando que todo lo demás giraba en torno al ser humano; y castigaban a todo aquel que pensaba diferente. De esta manera, se evidencia que antropocentrismo de las personas era un grave problema para la evolución y desarrollo del conocimiento ya que limitaba en gran manera el aumento de aprendizajes en otros campos que estaban fuera del alcance humano.
Por otro lado, en ocasiones el ego creado por las mismas personas se ha visto fuertemente afectado. Pues, algunas personas han decidido buscar algo más que no sea acerca del ser humano. Un ejemplo, en relación al caso anterior, se puede ver en el año 1632 cuando Galileo Galilei publicó un libro en el que destacaba que la teoría heliocéntrica estaba correcta. Este golpe al narcicismo de la humanidad sentenció a Galilei a la muerte ya que fue considerado como un hereje por la Iglesia Católica, quien apoyaba fuertemente a la teoría geocéntrica, pero marcó un gran paso en el conocimiento. De este modo, se demuestra que en contadas ocasiones una pequeña fracción de las personas optan por ver más allá de lo que le muestran sus sentidos y tratan de buscar otros tipos de respuestas.
El antropocentrismo ha sido un limitante para la obtención de conocimientos fuera de la percepción sensorial. Pues, desde la antigüedad, las personas han obtenido conocimientos simples por medio de los sentidos, y han dejado a un lado aquellos conocimientos complejos que no se pueden ver a simple vista. Sin embargo, el área de las Ciencias Naturales se ha aventurado por intentar obtener aprendizajes fuera del alcance de sus sentidos y esto ha permitido que se desarrollen nuevos tipos principios en campos no antes imaginados.
Este hecho ha permitido que nazcan nuevas ramas del conocimiento como la Física, Biología, Química, etc. Pues, si la humanidad no hubiera intentado ir más allá del limitado alcance de sus sentidos, el conocimiento se hubiera visto estancado en un punto en el que el centro de todo sería el mismo ser humano y no conociéramos nada más que eso. De esta manera, se puede afirmar que el deseo de la humanidad que dejó a un lado en antropocentrismo y buscó respuestas fuera de su trascendencia, ha marcado un gran paso en el desarrollo de la comprensión de nuestro entorno.
A lo largo de la historia, el ser humano se ha puesto en el máximo eslabón de todas las especies. Pensando que, por tener mejor desarrollado el sentido del razonamiento, las demás especies debían estar por debajo de él. De esta manera, el sentido de superioridad explicado anteriormente lo ha llevado a tener que superarse a sí mismo constantemente. Así, este deseo se ha visto reflejado en ir evolucionando tecnológicamente de una manera no solo progresiva sino también rápida.
La evolución tecnológica en la historia ha permitido grandes avances de conocimientos que no son relacionados al hombre. Pues, con aquellos avances se ha podido desarrollar nuevos estudios que iban más allá del alcance humano. Un ejemplo claro se puede ver con el desarrollo del telescopio, ya que antes la astronomía no era muy avanzada debido a que esta se veía limitada al alcance de los ojos. Sin embargo, en el año 1608, el holandés Hans Lippershey creó a lo que hoy se lo conoce como el primer telescopio. Este invento permitió que la astronomía tuviera un avance extremadamente grande debido a que ya no se veía limitada a la vista, sino que, gracias al progreso tecnológico, mediante el uso de una herramienta se podía ver mucho más lejos y de una mejor manera.
Sin embargo, el avance tecnológico no solo ha traído facilidad en el desarrollo de las ramas, sino también ha frenado en cierto punto la obtención del conocimiento. Hoy en día, el conocimiento se ha visto afectado en algunas áreas y ramas del conocimiento por la creación de instrumentos que, si bien es cierto, facilitan la obtención de resultados en los profesionales, deterioran la obtención del mismo en los estudiantes. Esto se ve reflejado en el uso de calculadoras en estudiantes; pues, esta facilita en gran medida la obtención de resultados, y hace que la juventud se vuelva cómoda y pierde el sentido de aprendizaje en matemáticas. Y esto a la larga creará una sociedad ignorante que basará sus conocimientos en instrumentos que fueron creados para facilitar la obtención de resultados, más no reemplazar la obtención de los mismos.
El afán del ser humano en alcanzar la superioridad por creerse el centro del universo lo ha llevado a evolucionar continuamente y esto se ve reflejado en la tecnología. Esta supuesta superioridad y los avances tecnológicos han hecho que se desarrolle la imaginación en las personas, y, cada vez, se vean obligados a inventar nuevas cosas. Así mismo, este hecho ha permitido que las personas puedan obtener nuevos conocimientos que antes no estaban en su alcance y en otros campos no relacionados al ser humano. Sin embargo, en algunos casos la tecnología ha traído consigo pequeños retrasos en la obtención del conocimiento. Pues, está hecha para facilitar la vida del ser humano y, en cierto punto, ha llegado a un extremo que tales avances tecnológicos pueden crear una sociedad ignorante que solo dependa de inventos cuyo propósito era abrir la puerta a la obtención de conocimiento, más no deteriorarlo.
En conclusión, el conocimiento es la capacidad del ser humano para obtener información a partir de situaciones o cosas que se encuentran en el exterior. Y este muchas veces se ha centrado solo en el conocimiento acerca del hombre y, de esta manera, se han creado vacíos en algunos otros ámbitos del conocimiento. En las Ciencias Naturales, el conocimiento se ha visto influido por el antropocentrismo; por lo que, cierto punto, el desarrollo en esta rama del conocimiento se vea retrasado. Pues, los conocimientos en la antigüedad se basaban en lo que se podía percibir sensorialmente. Y en la Historia, el conocimiento se vio influenciado por el constante deseo del hombre de ser mejor. Así, con la imaginación fue creando nuevos artilugios y herramientas que, posteriormente, le ayudo en la obtención de aprendizajes.
El conocimiento se ha visto influido fuertemente por el antropocentrismo y el deseo de superioridad por parte del ser humano. Por esta razón, el conocimiento en la antigüedad se vio estancado en ramas del conocimiento no relacionadas al hombre, por el estudio del mismo ser humano. Sin embargo, a lo largo de la historia, este deseo de ser los mejores, llevó al ser humano a crear nuevas cosas que de una u otra manera ayudaron a algunos campos a abrir nuevas posibilidades a la obtención del conocimiento.