Trastornos Formales del Pensamiento Humano
Para comenzar, es necesario conocer, primeramente, la definición de los trastornos formales del pensamiento y para ello tomo como referente al autor Belloch (2010) quien dice que: “en la práctica psiquiátrica típica es sinónimo de habla desorganizada” (pág. 220)
Seguidamente; las personas que padecen estos trastornos; sin importar su diagnóstico psicopatológico, suelen tener una transformación, tal vez no desapacible, pero aun así es un cambio en su estilo de vida y de las demás personas de su entorno. Entonces, en el presente escrito esclareceremos si los trastornos formales del pensamiento existentes son suficientes para diagnosticar y tratar un problema de lenguaje, siendo único referente para ello.
Para continuar, los trastornos formales del pensamiento se dividen en contenido y de la forma, con el fin de, saber de qué tipo son y así poder diagnosticar acorde a su necesidad; de igual forma, estos son más comunes en la esquizofrenia y psicosis. En consecuencia, estos trastornos del pensamiento han sido de gran base o soporte a la hora de observar en las personas un habla desorganizada, por tanto, son fundamentales al dar una valoración de este tipo en cualquier individuo, sin embargo, no son los suficientes eficaces o veraces para tomarlo como única referencia, ya que puede inferir diferentes variables como lo menciona y afirma los autores Barrera & Berrios (2001):
El TFP no contiene toda la información necesaria para ser identificado como tal en cualquier circunstancia. Por el contrario, cuando el clínico diagnostica el habla de un sujeto como ‘desorganizada’, lo hace influido por variados factores tales como el hecho que la persona en cuestión presenta psicopatología adicional, que las verbalizaciones fueron emitidas en una entrevista que ha tenido lugar. (párr. 34).
Por tal motivo, hay que tomar en cuenta, las diversas teorías y enfoques expuestas en relación al tema como lo son: el enfoque individual-estático, el enfoque individual-genético, el enfoque interaccional-estático y el enfoque interaccional genético; ya que estas nos especifican con más claridad de donde se puede derivar o provenir la alteración del pensamiento que se refleja en un habla desorganizada.
Luego, si ponemos en comparación los trastornos de pensamiento con la distorsión se evidencia, que la distorsión es parte de los trastornos, ya que son pensamientos irracionales, los cuales especifican más alteraciones, que ocultan, ignoran o disfrazan la realidad no dejando alcanzar la finalidad a la que nos proponemos de alguna tarea.
Finalmente, los trastornos formales del pensamiento son un pensamiento desorganizado que se refleja al momento de hablar; y, además está claro que son parte de una valoración del habla desorganizada, pero no como definitorios para dar la misma, de igual forma, depende también de la interpretación de cada clínico. En adición; se sugiere a cada profesional especializado en la materia a tener en cuenta, los enfoques o teorías dichas anteriormente, como punto o base de referencia para una mayor eficacia en la determinación de un diagnostico apropiado al paciente, evitando consecuencias graves en el proceso de valoración.
Referencias
- Belloch (2010) Manual de Psicopatología Vol. 1. McGrawHill. DSM.V
- Barrera, Á., & Berrios, G. E. (2001). Investigación del Trastorno Formal del Pensamiento en la esquizofrenia: una mirada crítica. Revista de la Asociación Española de Neuropsiquiatría, (79), 17-33.
