Boom Guanero En El Perú 1845 – 1866
¿En qué medida el Boom Guanero generó un impacto favorable en la economía peruana entre los años 1845-1866?
Durante los años 1845-1966 el comercio del guano comenzó a ser una de las máximas actividades económicas del estado peruano, periodo conocido como Boom Guanero, caracterizado por el auge económico que vivió el país. Por ello, la presente investigación histórica responde a la siguiente cuestión: ¿En qué medida el Boom Guanero generó un impacto favorable en la economía peruana entre los años 1845-1866? Las dos fuentes seleccionadas para el desarrollo objetivo de esta investigación son secundarias; la primera, ofrece información sobre el impacto del boom guanero en la economía republicana y la riqueza producto de la explotación del guano que disfrutó el estado peruano a mediados del siglo XIX, y la segunda, evalúa el proceso de comercialización, la importancia económica del guano para Perú y presenta un análisis de las considerables riquezas y cambios generados por la explotación del guano. En estas fuentes seleccionadas los autores realizan un análisis e interpretación profunda del boom guanero y su repercusión en la economía peruana, de la misma forma contrastan y comparan información y desarrollan el Boom como tema central basándose en memorias, archivos, informes y revistas de la época.
Fuente A: Tantaleán Arbulú, Javier. (2011). “La gobernabilidad y el leviatán guanero. Desarrollo, crisis y guerra con Chile.” Lima: BCRP–IEP, 1° Edición
El valor de esta fuente radica en su origen pues fue escrita por un reconocido historiador heterodoxo del mundo prehispánico, doctorado en Historia del Desarrollo económico, destacado por su haber realizado una serie de investigaciones referidas al Boom Guanero en el Perú. Asimismo, en el propósito pues el autor busca discutir hasta qué punto el Boom Guanero género un impacto favorable en la economía peruana y describe meticulosamente el trance económico del Perú tras las ventas guaneras a mediados del siglo XIX; de la misma manera en su contenido, ya que entrelaza corrientes y temas de investigación sobre el período del guano en torno a la noción de gobernabilidad y levitan guanero. Del mismo modo enfoca la investigación alrededor de la riqueza que disfruto el Estado peruano producto de la explotación guanera a mediados del siglo XIX que pareció la ocasión propicia para que el país pudiera cobrar una revancha histórica en el camino de la prosperidad y del desarrollo económico.
Sin embargo, una de las posibles limitaciones radica en el contenido, pues, en algunos párrafos hace notar un estilo narrativo-descriptivo con tendencia anecdótica sobre los acontecimientos sucedidos durante el Boom Guanero. No obstante, en esta investigación estos recursos son utilizados para el análisis y evaluación del papel que desempeño el guano en la economía peruana.
Fuente B: Guano y burguesía en el Perú, Heraclio Bonilla, 1984, 2°Edición
El valor de esta fuente secundaria radica en su origen, pues Bonilla es historiador peruano con doctorado en la especialidad de Historia Económica, destacado por realizar sus mejores trabajos en el enfoque económico, además ha sido considerado como un exponente del ‘turning point’ que alcanzó la historiografía peruana desde los inicios de la década de los 70. Por otro lado, el propósito también es valioso pues el historiador se enfoca en evaluar el impacto de la explotación del guano en la estructura económica y política del Perú en la segunda mitad del siglo XIX. Asimismo, en el contenido, pues busca desmontar el impacto del comercio guanero en el siglo XIX, y elabora una matriz explicativa de por qué el guano, un recurso que fue el sustento de la economía peruana entre 1840 -1880 y un bien del Estado peruano, pudo ser el eje de su desarrollo económico, basándose fundamentalmente en fuentes primarias como los archivos de Francia y de Inglaterra.
No obstante, una de las posibles limitaciones radica en el contenido, pues por el estilo minucioso de la fuente, incorpora abundante información innecesaria sobre sucesos acontecidos dos siglos antes. Sin embargo, en esta investigación estos son utilizados para inferencia y evaluación del Boom Guanero en la economía peruana.
Investigación:
La década de 1840 significó el inicio de cierta estabilidad económica y política para el estado peruano ya que, tras su independencia, sufrió una situación muy crítica respecto a su economía pues está definitivamente quedó devastada. Sin embargo, la oportunidad del Perú de superar esta decadencia provino del descubrimiento de una materia prima exquisita para la agricultura que nadie antes se lo había imaginado: El Guano. Este material producto de los excrementos de las aves marinas, llegaría a tener gran demanda a nivel global puesto que en países como Europa, Asia y Norteamérica buscaban potencializar su industria; por ello, requerían fertilizantes eficaces que aseguren su progreso en la agricultura. Como resultado, la comercialización repercutió de forma positiva en la economía peruana logrando que esta tenga una llamada prosperidad falaz. Todo ello dentro del período denominado, por el historiador Jorge Basadre, la Era del guano (1845-1866).
Demanda de fertilizantes por el proceso de industrialización que se vivía en Europa
El guano comienzo a emplearse de manera masiva convirtiéndose en una materia de gran valor económico y estratégico para Perú. Como plantea Tantaleán (2011), desde el año 1840, el estado peruano ha contado con un recurso que influyó en las finanzas públicas y de algunos espacios económicos. Logrando una gran transformación económica en el Perú, debido a las rentas producidas por este producto, el cual dio inicio a la “Era del Guano”, este producto conocido desde la época prehispánica. En 1841 el estado peruano era el dueño de los depósitos del guano en las islas y el más interesado en sacarle el mayor provecho, el mismo año Francisco Quiroz, un comerciante peruano firmo un contrato de arrendamiento por el derecho de explotación dándole a cambio 10 mil pesos anuales durante 6 años, desde allí fue que el Perú comenzó a beneficiarse ganando una fuerte cantidad de dinero cada mes.
En este transcurso fue donde más de once millones de toneladas de guano fueron vendidos en mercados Europeos y Estadounidenses por un estimado de setecientos cincuenta millones de dólares, historia conocida como de mendigo a millonario (La era del guano). Como se puede evidenciar el Perú fue viviendo un proceso de grandes exportaciones que poco a poco iban desarrollando la economía peruana. Según Tantaleán, uno de los efectos importantes generados por la bonanza guanera fue el pago a los acreedores nativos del Estado peruano, proceso que fue mencionado como el inicio de la reconstitución económica y política de la clase dominante peruana. La tesis de Alfonso Quiroz, sostiene que el 60% de los consolidados eran comerciantes y el 36% funcionarios públicos, entre civiles y militares. Es decir, que el proceso de consolidación de la deuda interna en lugar de iniciar más bien fortaleció un proceso de enriquecimiento, y cuyos orígenes tienen que ser buscados en otra parte.
Por otro lado, Bonilla (1984) asume una perspectiva distinta a la de Tantaleán este evalúa las condiciones en que se encontraba la economía peruana demostrando la deficiencia que poseía el gobierno para aprovechar este beneficioso recurso y señala que las casas comerciales británicas y francesas que disponían de capitales para enfrentar los gastos que la explotación del guano exigía resultaron favorecidas, porque supieron aprovechar la debilidad política peruana, que básicamente se debía a la carencia de personas preparadas en la administración de los recursos. Por tanto, aquí se configuran dos perspectivas sobre los factores que determinaron el posible fracaso de un salto progresista y que consecuentemente influyeron en la economía peruana. Primero, la habilidad de los compradores para obtener beneficios generados a través de ciertas oportunidades que tuvo en ese momento el estado; y segundo, la deficiente administración de los vendedores que daba como resultado la dependencia del Perú a cada compañía con quien ejercía contratos, disminuyendo de esta forma ingresos que resultarían favorables para el pueblo. Asimismo, hay autores que resaltan que:
La enfermedad holandesa, o la enfermedad guanera, es solo un elemento de una serie de aspectos negativos asociados con la exportación de productos primarios, todos agrupados en años recientes bajo la etiqueta de “maldición de los recursos naturales”. Otros elementos de la maldición están identificados con la inestabilidad política, la corrupción y el endeudamiento excesivo. Hunt, J (2011). Pg. 17.
El dato que Shane Hunt presenta reafirma que la situación económica peruana era crítica como mencionó Bonilla, y que necesariamente el gobierno debía recurrir a una solución pragmática, la cual se representa una caída en la estabilidad económica peruana.
En un primer momento, Heraclio Bonilla (1994) menciona, “Específicamente durante los gobiernos de Castilla los cambios fueron muy notorios, pues la economía peruana alcanzó su máximo apogeo siendo así una de las mejores en América Latina y así dándose el surgimiento del gran contrato Dreyfus”. Castilla alcanzó una fama duradera al abolir la contribución indígena, haciendo que en el plazo fuera peligrosamente dependiente del guano un recurso natural finito y cada vez más agotado. Pues este sirvió para el pago de la deuda interna y externa en 1850, bajo el régimen de Ramón Castilla. También en pleno auge del guano, se aprobó la ley de consolidación de la deuda, la cual consistió en el pago de las deudas acumuladas desde las guerras de independencia, dichas deudas estarían constituidas por los diferentes préstamos, reconociéndose como créditos contra el estado, tanto de autoridades como civiles y familias que estuvieron dispuestas a financiar, o apoyar, de alguna manera, la independencia del Perú desde 1820.
El guano ayudó mucho a la economía peruana por eso en 1841 el estado lo declarara como su monopolio principal trayendo así dos grandes cambios significativos a largo plazo. El primer cambio fue una nueva elite centrada en lima fue capitalizada con la transferencia de fondos de tesoros público siendo el primordial recurso el guano. El segundo cambio a largo plazo fue la creación de una base sociopolítica que permitió el triunfo del estado liberal. Aunque la consolidación de la economía peruana y de la deuda nacional abrió el camino al liberalismo, su surgimiento final dependió de otras medidas importantes tomadas por todo por el gobierno de Ramón Castilla. Por tanto, estas condiciones proporcionaban grandes expectativas al gobierno peruano encabezado por Ramón Castilla, quien procuró buscar el desarrollo con la explotación de riquezas guaneras. Tanto Heraclio y Tantaleán coinciden con la perspectiva que el impacto que generó inicialmente el boom guanero en la economía del Perú fue positivo, pues, con las ganancias se abolió definitivamente la esclavitud y la pena de muerte y estableció políticas de promoción de extracción y exportación de fertilizantes naturales (guano de islas) que inician una era de prosperidad en el país. Los primeros ferrocarriles y el alumbrado a gas llegan al Perú en este período, las cuales incrementaron las cifras de los ingresos del Perú. Entre ellas encontramos: disposición de vapores acorazados en el continente, disponibilidad de transporte para la organización de expediciones de exploración y colonización de la región amazónica, surgimiento de empresas de irrigación y construcción de una extensa red de ferrocarriles.
Sin embargo, este impacto fue cambiando de sentido por una mala administración, haciendo hincapié que el guano aun siendo una materia prima abundante, no era un recurso finito, por tanto, su fin estaba determinado por los continuos volúmenes que eran entregados a las casas comerciales. Basadre (1939) menciona que, la excesiva exportación del guano, trajo la disminución del precio del fertilizante, y el agotamiento de la materia conjunto a la aparición de características de mal estado, las cuales dificultaban la obtención de la confianza absoluta del consumidor europeo.
El impacto y la importancia que el guano generó en la economía peruana tiene diversos enfoques. Una interpretación, sugerida por Jonathan Levin (1960), es que éste produjo la clásica economía de «enclave», con pocos eslabonamientos hacia delante o hacia atrás que estimulasen la producción nacional. En consecuencia, hubo pocos —si es que hubo alguno— efectos de desarrollo duraderos en el país. En esta versión, la riqueza del guano quedó aislada del resto del país, financiada y explotada por extranjeros, y trabajada por una fuerza laboral relativamente pequeña y servil, sin ningún poder adquisitivo. Las utilidades fueron remitidas al extranjero, dilapidadas por la corrupción y los malos manejos estatales, y consumidas por una pequeña élite en una orgía de importaciones suntuarias. Hunt (1985, 1973) cuestionó la tesis del «enclave» argumentando que el guano produjo una típica economía «rentista», similar a la experiencia colonial con la plata. Una economía de este tipo era capaz de ganar una cantidad masiva de divisas extranjeras con la exportación de un recurso natural. Las ganancias del comercio guanero no se dispersaron en el extranjero, como sostenía el modelo de enclave de Lewin, sino que, más bien, se conservó en el país un setenta y uno por ciento neto de lo recibido por las ventas controladas por el Estado o por contratistas nacionales, quienes distribuyeron los beneficios en forma discutiblemente racional. Según esta interpretación, el verdadero problema fueron los grandiosos y mal diseñados proyectos de inversión estatal (por ejemplo, ferrocarriles), que no lograron diversificar la economía o crear una nueva clase de empresarios nacionales.
En conclusión, el boom guanero generó un impacto económico bidireccional, es decir, tras plantearse como una solución a la coyuntura agrícola europea, proporcionó un auge económico para el Perú en cuanto a su materia prima, ya que el dinero obtenido se dispuso al tratamiento de deudas y mejoras nacionales; pero, el mal manejo de este flujo financiero concluyó en desniveladas y desproporcionadas inversiones ferrocarrileras y escasamente en las actividades agropecuarias, generando un decrecimiento económico con resultados irregulares, críticos y desequilibrados para el Perú.
Reflexión:
Al finalizar esta investigación comprendí que el método historiográfico permite a los historiadores reconstruir un acontecimiento en base al análisis y evaluación de fuentes viables, si bien los argumentos se construyeron a partir de pruebas mostradas por los historiadores, así como extractos directos de los ensayos de Mariátegui. Por otro lado, tal técnica tiene sus limitaciones, por ejemplo, la primera fuente mostro una perspectiva parcializada en función al marxismo restringiendo el acceso al conocimiento de las diferentes directrices que tuvo el socialismo peruano. Asimismo, es claro que los enfoques nacionalistas de los ensayos en ocasiones exaltan aspectos subjetivos de la historia, consecuentemente la objetividad se ve desestimada a fin de persuadir al lector sobre la veracidad del contenido de los archivos. Definitivamente a diferencia de las matemáticas, los historiadores enfrentan el desafío de producir conocimiento en base a las diferentes perspectivas. En este trabajo al estudiar la segunda fuente y otras complementarias estas mostraban un enfoque distinto del socialismo desde un ámbito tanto filosófico como político y social, permitiendo establecer relaciones de contraste y similitud que hizo posible defender un punto de vista. Tal experiencia permitió entender la naturaleza del trabajo histórico considerando que en esta área no siempre existe una interpretación absoluta respecto a un determinado hecho como en el caso de las matemáticas donde se obtienen resultados definitivos y sin contradicciones. Por último, encontrar abundante información sobre la ideología de Mariátegui originó que la elección de las fuentes más importantes para mi investigación se convierta en un trabajo difícil más aún porque la mayoría de los historiadores pretendía disertar los puntos fuertes de esta doctrina socialista. Este ultimo punto es una limitación para la producción de conocimiento puesto que las intenciones de los autores y su nivel de objetividad pueden conducir a investigaciones que defiendan una sola posición del hecho. Por ello, analizar el valor y limitación de las fuentes en función al origen y el propósito permitió reconocer cual de ellas era la más fiable, esto aunado al reconocimiento de la veracidad de las pruebas que mostraban los investigadores para construir sus argumentos. En este sentido, es comprensible que la importancia de un hecho histórico esta determinada por los historiadores dado que ellos reconocen la transcendencia de un personaje y el hito que marco en una sociedad.
Referencias:
- Basadre, J. (1939). Historia de la república del Perú [1822-1933]. (t. 7 y cap. 6). Lima: Cantabria y El Comercio ( p. 12-13)
- Bonilla, H. (1984). Guano y Burguesía en el Perú. (2a ed.).Lima: IEP Ediciones pág. 19
- Dávalos, P. (2006). La primera centuria Perú. (t. 4 y cap. XV). p. 171
- Bonilla, H. p. 76
- Decreto de Ratificación, 17 de Agosto de 1869 escrito por Piérola en Lima.
- El negociado Dreyfus ante la Legislatura peruana de 1870 (ed. dedicada a los representantes de la nación Havre), 1870. p. 6
- Iperu.org. (2016). José Balta y Montero. [José Balta y Montero, Presidente constitucional del Perú]. Recuperado de https://www.iperu.org/jose-balta-y-montero