Cáncer En Los Ovarios Y Su Tratamiento
Introducción
Como hemos dejado claro en muchos artículos, el componente hormonal es muy importante tanto para la salud del deportista como para su vida en general. Uno de los síndromes que pueden tener una gran relevancia hormonal, y con ello afectar a nuestro ejercicio físico y a nuestra vida, es el síndrome de los ovarios poli quísticos. En este artículo vamos a explicar qué es este síndrome, sus síntomas y su tratamiento.
Desarrollo
Síndrome de ovarios poli quísticos
El síndrome de ovarios poli quísticos es un trastorno hormonal que pueden padecer mujeres en su período fértil. Su origen no está realmente claro, habiéndose involucrado en su origen tanto factores genéticos como ambientales. Se piensa que niveles altos de hormona anti-mahleriana (HAM) y andrógenos durante la gestación podría provocar la expresión de determinados genes que, una vez llegada la pubertad, manifestarán este síndrome.
Síntomas
Esta enfermedad tiene una gran variedad de síntomas. La mayoría de ellos están relacionados con los niveles elevados de andrógenos. El síndrome de ovarios poli quísticos toma su nombre de la gran cantidad de quistes líquidos que se forman en el ovario, sin embargo, la sintomatología va mucho más allá. Aquí exponemos alguno de los síntomas más frecuentes. Irregularidades en la menstruación. Especialmente frecuente es experimentar ciclos prolongados. También es habitual tener ciclos muy intensos, con sangrados abundantes y más dolorosos.
- Ovarios poli quísticos. Como ya hemos comentado antes, pueden aparecer numerosos quistes en el ovario llenos de líquido. Estos quistes son visibles en la exploración radiológica, como en la tomografía computarizada o la resonancia magnética. Estos quistes pueden ser tan numerosos y abundantes que pueden llegar a producir sobre otras vísceras abdominales, produciendo dolor.
- Hiperandrogenismo. El exceso de andrógenos que es causa del síndrome de ovarios poli quísticos también puede ser el origen de la mayor parte de sus síntomas. El exceso de andrógenos (hormonas masculinas) puede provocar la aparición de vello facial y corporal, lo que se conoce como hirsutismo. Otros síntomas pueden ser el acné y la alopecia androgénica que suele afectar a varones.
Complicaciones
Esta enfermedad cuenta con una serie de complicaciones que pueden poner en riesgo nuestra salud. Entre ellas encontramos la obesidad, pero especialmente frecuentes e importantes son la diabetes, la apnea del sueño, la hipertensión arterial o la esteatosis hepática no alcohólica. También son frecuentes los trastornos de la alimentación, la depresión o la ansiedad.
Tratamiento
El tratamiento del síndrome de ovarios poli quísticos es complejo. No hay un tratamiento específico para esta enfermedad, por lo que su tratamiento pasa por medidas dietéticas para evitar las complicaciones y reducir al máximo los síntomas.
Los principales objetivos del tratamiento de este síndrome son la reducción de la resistencia a la insulina, la pérdida de peso y la normalización de los períodos menstruales. Los principales pilares del tratamiento del síndrome del ovario poli quístico son las medidas dietéticas y de estilo de vida y la medicación.
Ejercicio físico y la alimentación
El ejercicio físico debe ser uno de los pilares de la vida de una paciente con síndrome de ovario poli quístico. Especialmente el ejercicio interválico se ha demostrado que es muy eficaz reduciendo la resistencia a la insulina. Además, ayudará en el control del peso corporal aumentando el metabolismo de las grasas. De forma añadida, esto también puede contribuir a regular los ciclos menstruales. Una correcta alimentación nos ayudará a conseguir estos objetivos si la acompañamos de ejercicio físico.
Conclusión
En la mayoría de los casos las medidas dietéticas no son suficientes para controlar la enfermedad. Es habitual el uso de anticonceptivos orales, ya que estos son capaces de unirse a las hormonas androgénicas como la testosterona e inactivarlas. De esta forma se consigue evitar toda la sintomatología androgenizante como el hirsutismo o el acné.
Además, la metformina también se suele utilizar para reducir la resistencia a la insulina. También es frecuente el uso de estáticas (como la atorvastatina) para reducir la sintomatología del síndrome metabólico y reducir el colesterol en sangre. De esta forma también se puede conseguir regularizar el peso corporal.