Carrera Profesional Medica: Peculiaridades e Importancia de la Especialidad
La carrera de medicina es mundialmente conocida como una de las más demandadas, ya sea antes de ingresar al largo camino de preparación como médicos o al momento de querer continuar en otro nivel nuestros estudios, es decir, aplicarse para una especialidad.
Sin duda estudiar medicina es un reto debido a que existen factores que frenan de cierta manera estos planes, tales como la falta de tiempo, sustento económico, la ubicación de la institución, entre otras. Lo que aquí motiva es la ambición por destacar en áreas donde, como estudiantes de medicina, podemos desarrollar al máximo habilidades y conocimientos de interés.
La carrera de medicina prácticamente se basa en ir de lo General hacia lo particular, esto aplica perfectamente para el tema principal de este texto, ¿por qué estudiar una especialidad del área de la salud en México? y, sobre todo, ¿qué impacto hay actualmente en la población mexicana?
Cabe mencionar que estudiar una especialidad en medicina es, aparentemente, la mejor opción dado que se obtienen múltiples beneficios. Sin embargo, se debe de tener presente que el hacerlo representa cuatro años más de estudio en promedio y que el horario será más pesado y poco flexible.
Por esto, es elemental que, como estudiantes de la carrera de medicina, nos informemos sobre la importancia de estudiar una especialidad y el impacto que tiene actualmente en México.
El estudiar una especialidad en el área de medicina se considera un grado muy significativo como parte de la formación de los médicos Generales que son recién egresados. A pesar de ser un periodo corto de estudio, por así decirlo, es una enorme oportunidad de avanzar como profesionales en la salud, básicamente el primer paso hacia nuevas oportunidades en el ámbito laboral ya que, un título de esta medida, repercute en los años de estudio dedicados a la medicina.
Según el infobae (2019), en México para poder realizar una residencia médica en un curso universitario de especialidad, unos 47.000 médicos de México realizaron el Examen Nacional de Aspirantes a Residencias Médicas (ENARM).
Esta importante prueba consiste en medir conocimientos y es considerado como el método de excelencia para elegir a los médicos Generales que quieren cursar una especialidad en México.
Esto se realiza mediante un proceso que cumple con las normativas de transparencia, legalidad y profesionalidad, lo que permite mantener estándares de calidad en la práctica médica mediante las evaluaciones tecnológicas del conocimiento y a su vez, ser una prueba demasiado competitiva teniendo un alto impacto en los médicos que no son aceptados en las limitadas plazas para las diversas especialidades en las áreas de medicina.
Sin embargo, en México faltan médicos; el déficit de médicos en el sector salud es prácticamente de 200.000: 123.000 médicos Generales y 70.000 en especialidades. “Se rechazaron a tantos médicos, que ahora no tenemos los que necesita el país” (Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, 2019)
Considero que es un punto muy válido y se tiene que trabajar arduamente para lograr un equilibrio entre los aspirantes aceptados a través del ENARM para dar abasto de las plazas que se requieren actualmente en México.
No obstante, en México el Objetivo principal es siempre contar y formar especialistas muy bien capacitados para cubrir las áreas en donde actualmente son escasos. Como ejemplo tenemos a la innecesaria saturación de la especialidad de cirugía plástica cuando lo que se necesita es cubrir otras áreas de mayor importancia en la población mexicana.
A pesar de que cursar una especialidad es un paso muy importante, enorme y ciertamente complicado, debe verse como un camino en el que al final valdrá la pena haberlo recorrido ya que, siendo realistas, si nos vamos por el lado de la estabilidad económica, hoy día las posibilidades de emplearse y conseguir un salario decoroso dependen en buena medida de contar con algún tipo de especialidad o maestría.
Al final de cuentas, lo realmente importante del tema es que el médico ejerza su derecho a decidir el curso de su carrera profesional de manera libre y puramente acertada.