Claves Del Liderazgo Profesional En La Actualidad
Introducción
¿Cuál es el motivo del éxito de unas empresas respecto de otras? ¿Por qué algunos proyectos prosperan y otros fracasan o se mantienen con dificultades? ¿Qué puede hacer un directivo para evitar la fuga de talentos? La respuesta a estas preguntas está en el liderazgo; es decir, en la capacidad del directivo o del emprendedor de dirigir su proyecto empresarial y a las personas con las que se relaciona, sean trabajadores y proveedores como clientes.
Actualmente la sociedad y, por ende, el mundo laboral, ha cambiado totalmente. La globalización, la automatización, la mayor competitividad, el auge de las nuevas tecnologías, la inmediatez que ha traído consigo internet, el cambio en las maneras de comunicarse, de vender y de relacionarse que están suponiendo las redes sociales. Y podríamos continuar porque la lista es interminable, hoy en día la información está al alcance de la mano con solo hacer un clic y nuestros productos o servicios ya no están necesariamente en una tienda física, sino que el escaparate es virtual: Instagram, Facebook y otras plataformas cobran protagonismo y forman parte de las decisiones empresariales.
Desarrollo.
Las empresas que hoy en día, no solo se mantienen, sino que incrementan su productividad y su facturación son aquellas que son flexibles, que saben adaptarse a los cambios constantes y a las nuevas demandas del mercado, que se reinventan y que conocen cuáles son los intereses de sus clientes. Los líderes del futuro son personas que tienen clara su misión y su visión y que saben inspirar y motivar a su equipo para que esté alineado con los valores de la organización y comprometido con el proyecto empresarial.
Atrás han quedado modelos de liderazgo vertical y autoritario en los que hay una clara diferenciación entre el jefe y sus trabajadores y en los que el liderazgo se sostiene sobre el poder y el premio-castigo. Términos como el salario emocional, el team building, la autonomía, la cooperación, la reinvención, la innovación, la flexibilidad, la formación constante, la motivación, el crecimiento personal, las habilidades comunicativas, la gestión emocional y la importancia de las relaciones personales han venido para quedarse. Las empresas demandan líderes que hayan invertido tiempo y trabajo no ya solo en su currículum académico, sino que se hayan trabajado como personas, que conozcan sus talentos y sepan reconocer los de las personas que integran su equipo.
Líderes que se hayan forjado una autoestima sólida, que sepan gestionar sus emociones, que sean buenos comunicadores, que entre sus valores personales estén la autenticidad y la honestidad para que puedan inspirar al equipo, convirtiéndose en un referente a seguir. Líderes que sepan definir, concretar y comunicar el por qué de la organización, que aporten valor y que sepan anticiparse a las necesidades del mercado. Líderes que fomenten el crecimiento personal de sus trabajadores, que les dé autonomía para que puedan prosperar y sentirse partícipes del proyecto empresarial.
Conclusión
El liderazgo efectivo es el que marca la diferencia entre el buen funcionamiento o no de un equipo y, por consiguiente, el que determinará el futuro de una organización. Una empresa es como un barco, para llegar a buen puerto, necesita un patrón y unos marineros que remen al unísono. Esto solo se consigue con un liderazgo efectivo. Como dice, Simón Sinek, “hay líderes y personas que lideran”. Todos podemos trabajar y potenciar nuestras habilidades de liderazgo y para hacerlo, tenemos que invertir en nuestro crecimiento personal, en trabajar nuestro autoconocimiento, nuestra autoestima y nuestra gestión emocional, porque todo liderazgo profesional, si queremos que sea efectivo, empieza por un liderazgo personal.