Crimea y el Realismo Clásico: La Eterna Lucha Entre Rusia y Ucrania

Introducción

Antes de continuar con el estudio sobre la posible relación entre las premisas básicas del realismo clásico y la explicación sobre la actual relación de tensión entre Ucrania y Rusia, resultante importante realizado un repaso histórico de los acontecimientos que han permitido que se haya llegado a este momento.

Ucrania siempre ha estado vinculada históricamente a Rusia, pues comparten un claro origen étnico y cultural. El ideario ruso de hecho tiene su origen en Kiev territorio que pertenece actualmente a Ucrania. Al Ucrania y Rusia ser parte de la antigua Unión Soviética, sus gobiernos y formas de vida eran muy similares y se encontraban bajo un mismo sistema. No obstante, se puede distinguir dos hechos que sirvieron de origen para el distanciamiento entre ambas naciones.

Desarrollo

El primero se conoce como el Holodomor y hace referencia a la política que decidió implementar Stalin a comienzos de los años 30 que consistía en el pago por parte del campesino ucraniano a través de la producción del grano ucraniano- de los costos de los procesos de industrialización de la URSS. Esta medida afectó de forma drástica a los campesinos puesto que muchos quedaron privados hasta de su propia producción evitando que estos podrían abastecer sus propias necesidades alimenticias, lo que se tradujo en millones de muertes de 7 a 10 millones- por inanición, hecho que generó un profundo resentimiento de Ucrania hacia las autoridades y el liderazgo de Moscú.

El segundo suceso que minó aún más la relación fue el acontecimiento del 26 de abril de 1986, pues al estallar el reactor nuclear número ocho de la central de Chernóbil, se evidenció la incapacidad del gobierno ruso para llevar a cabo un control efectivo y el mantenimiento adecuado de la fuente de energía, lo que ocasionó la afectación de más de dos millones de ucranianos y la pérdida de 4,7 millones de hectáreas fértiles (López, 2014).

Además, la falta de acción por parte del gobierno para el esclarecimiento de los hechos y sus escasas medias para llevar a cabo la oportuna evacuación y protección de los ciudadanos generó en los ucranianos el sentimiento de rechazo hacia el gobierno central de Moscú, lo que finalmente desencadenó en el papel fundamental que jugaría Ucrania en el proceso de desintegración de la Unión Soviética, hecho que se evidenció en su proceso de independencia a través del referéndum que realizó y que fue aprobado con una favorabilidad de más del 90% y del Pacto de Belavezha dando fin a la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas para dar paso a una Comunidad de Estados Independientes. Acontecimiento que alcanzará el reconocimiento de Ucrania como una república autónoma y soberana. No obstante, a pesar de la separación,

Otro aspecto que comenzó a incidir en la relación de tensión entre Rusia y Ucrania sería el rumbo que habría de tomar la naciente república -Ucrania-y su conformación de aliados, puesto que tendería más hacia el lado europeo que al lado ruso, como se evidenció a través de la llamada “Revolución Naranja” con las medidas pro-occidentales que los mandatarios intentaban promulgar -avances democráticos, libertades individuales y acercamiento a las instituciones europeas-. Aspectos que comienzan a preocupar al Kremlin, por lo que se valió de sus recursos energéticos como herramienta política para ejercer presión sobre el actuar de Ucrania a su favor.

Conclusión

El último elemento que recientemente profundizó el conflicto fue la decisión del presidente de turno Víktor Yanukovich de abandonar la firma del Acuerdo de Asociación entre la Unión Europea y Ucrania, pues este, quien fue un mandatario prorruso, tuvo que enfrentarse a la movilización popular pro europea que se negaba a renunciar a la implementación de acuerdos que permitieran el desarrollo de su economía y la apropiación de valores que promovieran la modernización del Estado, por lo que la respuesta del gobierno -fuertes represiones institucionales- dejó millas de muertes y la destitución de Yanukovich que, escapando de la situación, encontró refugio en su aliada, Rusia.