Diario Pegagógico De La Interacción De Los Niños Del Jardin Infantil El Porvenir

Durante esta semana de estar en el proceso de interacción pedagógica con los niños del Jardín infantil El Porvenir Fundación Virgilio Barco, cumplí muchas expectativas planteadas conmigo misma y me enriquecí en mi quehacer como maestra en formación gracias a las sugerencias de mi maestra acompañante y la convivencia con los niños.

A lo largo de esta semana me guía mucho por Jhon Dewey, en donde realizaba actividades lúdico-pedagógicas, para que el niño afianzara muy bien los conocimientos por medio de la práctica y de esta manera contribuir y mejorar la enseñanza de cada uno de los niños, lo cual pude observar que el resultado fue muy bueno y esto llevaba a que los niños obtuvieran un aprendizaje más significativo como lo plantea Ausubel (1968) “El factor más importante que influye en el aprendizaje, es lo que el alumno ya sabe. Determinar esto y enseñarle en consecuencia”. Y en todo este proceso de aprendizaje y experiencias significativas pude notar el gusto que los niños de preescolar presentaban hacia la música y como su aprendizaje se veía influenciado de una mejor manera por medio de esta, pues los cantos y bailes siempre eran una buena estrategia para integrarlos y mantenerlos atentos.

La música además de ser una expresión artística, puede ser utilizada como recurso pedagógico que favorezca el desarrollo intelectual, motriz y de lenguaje en los niños y las niñas en edad preescolar, a través del fortalecimiento de procesos cognitivos como la memoria, la atención, la percepción y la motivación ¿De qué manera se ve influenciado el desarrollo y el aprendizaje del niño por medio de la música? ¿Cómo la música puede ser un medio para el desarrollo de habilidades en niños y niñas?

La música cumple una importante función en el desarrollo socio afectivo del niño, esta enseña a diferenciar errores y brinda la capacidad de mejorar la participación en el aula, la relación con los compañeros y con el maestro al compartir o interactuar con los niños y niñas a través del juego y actividades musicales dirigidas fundamentalmente para ejercitar sus destrezas.

Como se mencionaba anteriormente la música no solo es una expresión artística, sino un recurso pedagógico el cual puede ser empleado para promover el desarrollo de las personas, buscando comprender la sonoridad del mundo como parte de la esencia humana, siendo esta compresión como plantea Caprav (2003) la que “permite que se considere a la educación a través de la música como uno de los pilares del desarrollo integral del ser humano” (p.70) lo cual hace posible que si se relacionan procesos psicológicos y físicos a través de la práctica de la música se logren desarrollar distintas habilidades como la audición, la motricidad fina, la coordinación, la lateralidad, la memoria mecánica, la evocación auditiva, el ritmo, la concentración y la expresión de emociones entre otros (Reynoso, 2010). Y de esta manera favorecer el proceso de aprendizaje a través del sonido, la interpretación musical y el ritmo.

En este sentido, la educación artística se podría proyectar como la generación de espacios significativos de aprendizaje, pues mediante el sonido, el ritmo y la interpretación musical se pueden mejorar los procesos de aprendizaje de los individuos (Campbell, 2001) además de considerarse la música como un lenguaje que puede expresar sentimientos, estados de ánimo y configurar atmósferas a las que se les pueden atribuir cualidades que al encontrarse con la fascinante imaginación de los niños los provee de recursos con los cuales se inicia en la resolución de problemas y entretejer relaciones consigo mismo y con los demás (Maya, 2007).

El niño en la etapa infantil edifica sus primeras experiencias de aprendizaje por medio de la interacción de su cuerpo con el ambiente que lo rodea teniendo como herramientas de adaptación el juego y el movimiento, así entones basa sus aprendizajes en las experiencias agradables que de manera espontánea surgen en él, como sucede al cantar y de esta manera es como la música se hace para el niño la forma más sencilla de manifestarse, desarrollarse y formar su personalidad. En los primeros años del desarrollo humano la expresión musical se focaliza más en los elementos del ritmo que en los melódicos, podemos ejemplificar esto por medio del planteamiento de Lorete (1980) que nos dice:

“El niño de dos años edad prefiere el ritmo, pues su motricidad le ayuda a responder de diversas formas a los estímulos sonoros, hace palmas, golpea con los pies en el suelo, se balancea, mueve su cabeza, manipula elementos sonoros con gran interés y de formas variadas, acompaña a su manera diferentes melodías o piezas musicales en el ambiente, todo dentro de un conjunto de manifestaciones de bienestar”.

En definitiva, podemos darnos cuenta de que desde la guardería hasta a la adolescencia nuestro desarrollo se ve influenciado por el arte y en este sentido la música es un recurso pedagógico más que solo una expresión artística y puede ser empleada para favorecer el desarrollo de las personas desde su infancia, las bondades que proyecta la educación artística como recurso pedagógico en el fortalecimiento de procesos cognitivos y habilidades generales requeridas en el aprendizaje de niños y niñas en edad preescolar es evidente y la necesidad de crear en nuestro país político que promuevan la creación de programas de arte a nivel profesional es ineludible y esta no está relacionada con el aprendizaje de las artes en tanto ejercicio contemplativo únicamente sino como un instrumento que posibilite incrementar la imaginación, teniendo un enorme impacto no únicamente en el desarrollo cognitivo e intelectual de los estudiantes, sino en el desarrollo de la sociedad, en la formación de unos ciudadanos empáticos y creativos.

Referencias

• Ausubel. (1968). Psicología de la Educación: Un punto de vista cognoscitivo.
• Campbell. (2001). El efecto Mozart para niños. Barcelona: Urano.
• Caprav. (2003). Creciendo con música. Buenos Aires: Agedit.
• Lorete. (1980). Expresión musical en preescolar y ciclo. Madrid: Morata.
• Maya. (2007). La tierra es la casa de todos: cuentos y canciones. Medellin: Gobernación de Antioquia.
• Reynoso. (2010). La educación musical y su impacto en el desarrollo. Revista de Educación y Desarrollo, 12, 53-60.