El Bullying Y Sus Daños Irreparables A Futuro
No resulta novedoso el hecho de que una persona ejerza su dominio o poder sobre otra, y menos cuando hablamos del acoso escolar o bullying, es increíble ver como personas a tan corta edad son causantes de la angustia y miedo en otros. La falta de educación y control tanto en casa como en el colegio, resultan ser uno de los factores esenciales para este maltrato, causando así consecuencias tanto físicas como psicológicas en los que resultan ser las víctimas.
La palabra bullying deriva del inglés y se puede traducir al español como ‘acoso escolar’ o ‘intimidación’.
El bullying o acoso escolar tiene efectos negativos en la salud física, el bienestar emocional y el rendimiento académico de los niños, especialmente si dicha violencia se repite en el tiempo o es severa, además de influir en el clima escolar del centro educativo. Este suele ser practicado contra niños o jóvenes los cuales se caracterizan por ser sumisos, tener dificultades para defenderse, presentar baja autoestima, ser inseguros o porque se diferencian de sus compañeros por diversos motivos.
El bullying continuado que recibe un niño por parte de otro u otros, que se comportan con él cruelmente con el objetivo de someterlo y asustarlo, mediante las constantes amenazas, insultos, y agresiones logrando así tener a la víctima presa de sus abusos a lo largo de meses e incluso años, esto puede provocar la exclusión social de la víctima.
Este problema se presenta en niños de todas las edades, aunque se da principalmente en niños de entre 11 y 13 años. Esto a causa, de lo que se vive en el hogar. Muchas veces las familias que tienen problemas de convivencia, son los más propensos a ser agresivos, estos problemas pueden ser originados por: Problemas económicos, problemas de adicciones, violencia intrafamiliar, poco tiempo de calidad y convivencia, corta edad de los padres y la irresponsabilidad de estos etc.
Aunque, al momento en el que los padres de familia empiezan a descuidar o incluso a atacar a sus hijos, les crean muchas inseguridades lo que los hace victimas muy probables del bullying por parte de sus compañeros o niños muy agresivos con problemas para socializar y victimarios de sus compañeros.
A menudo, este acoso en la vida real comienza detrás de una pantalla: es conocido como ciberacoso o ciberbulling.
Este problema presenta un futuro sombrío para la sociedad, debido a que los niños que lo padecen, serán los adultos del futuro, y ante una población creciente el problema parece aumentar. El pensar que muchos adultos tendrán problemas personales en sus trabajos y familias productos de traumas emocionales que no fueron atendidos y que el circulo vicioso parece no detenerse nos hace ver que el problema está lejos de resolverse.
En conclusión, ahora sabemos cuan dañino puede ser este fenómeno tanto para la víctima como para el agresor, si no es tratado debidamente, por esto se propone a los padres estar más al pendiente de sus hijos, tratar de no reflejarles sus problemas para así hacerlos niños sanos y seguros de sí mismos, observando y atendiendo posibles conductas anormales en un momento dado.
Además, las instituciones también pueden ayudar en este problema, dando charlas continuas a sus estudiantes, y hacerles conocer las consecuencias fatales que tendría este tipo de abuso en las personas.