El Cuidado Del Medio Ambiente Y Las Amenazas A Las Que Se Enfretan

El medioambiente esta en estado crítico por diferentes amenazas que ponen en peligro diferentes aspectos del planeta. Conocer estos problemas es el primer paso para concienciarnos de su importancia. A continuación 9 problemas ambientales que deberían preocuparnos.

1. Cambio climático: el incremento de las emisiones de gases de efecto invernadero en la atmosfera por las actividades humanas está haciendo que ocurra un cambio climático. Este problema causa diferentes impactos tanto en la naturaleza como en los seres humanos. Este es uno de los problemas del medio ambiente más peligrosos, pues impide un desarrollo sostenible.
2. Contaminación: provoca impactos negativos en los ecosistemas, además de enfermedades y alteraciones en la esperanza de vida de la población. Los agentes contaminantes son muy dispares y cada vez ocasionan más problemas de salud. La contaminación tanto del mar como del aire se debe sobre todo al uso de sustancias tóxicas derivadas de la industria.
3. Deforestación: aunque ha disminuido en los últimos años continúa con un ritmo preocupante en muchos países. La agricultura insostenible o la explotación maderera. Intensiva son sus principales causas.
4. Degradación del suelo: las actividades humanas provocan fenómenos graves de degradación del sueño. Como por ejemplo la erosión, un problema que se está acelerando en los diferentes continentes y causa pérdidas muy elevadas de tierras cultivables (entre 5 y 7 millones de hectáreas).
5. Energía: el consumo es cada vez más elevado a nivel mundial, y la continuidad de los combustibles fósiles genera algunos impactos ambientales que resultan alarmantes para el desarrollo de la población en el futuro.
6. Escasez de agua: el acceso a ella con unas escasas condiciones de calidad y su escasez son cada vez más preocupantes. Las altas temperaturas han provocado la sequía de principales fuetes hídrica, y muchas otras están contaminadas.
7. Extinción de especies y pérdida de la biodiversidad: este problema es una de las consecuencias de otras problemáticas que hemos descrito. La pérdida de biodiversidad no solo causa daños en el medio ambiente.
8. Invasión y tráfico ilegal de especies: la introducción de animales desde fuera de su ecosistema natural, representa la segunda causa de amenaza a la biodiversidad. El número de especies introducidas ha aumentado de forma notable a nivel global en las últimas décadas. Además, el contrabando de especies pone en peligro. El mantenimiento de cientos de especies amenazadas en todo el mundo y los ecosistemas de donde son arrebatadas.
9. Residuos: la basura es el contaminante ambiental que más rápido se produce. Si los residuos no se tratan de forma adecuada, pueden provocar grandes daños.

Propuestas de solución a estos problemas:

Es difícil hablar de una única solución para frenar los problemas ambientales más importantes que actualmente aquejan la Tierra. Sin embargo, podemos hablar de un primer paso esencial para ello: la conciencia que como habitantes del mundo nos corresponde.

Por ejemplo, deberíamos llevar a cabo una agricultura sostenible que conserve los recursos naturales, un consumo responsable basado en necesidades reales, y el cuidado de los ecosistemas. Además, con el uso de transportes públicos y coches eléctricos o bicicletas hace que la contaminación disminuya de forma considerable.

También es importante evitar al máximo el uso de combustibles que generen gases de efecto invernadero, el uso de químicos o conservantes y por supuesto, reforzar la educación ambiental desde las primeras edades. Reducir la generación de sustancias contaminantes. y peligrosas para darles el uso, almacenamiento, tratamiento y disposición final adecuado.

El uso de energías renovables y el aumento de la eficiencia energética son algunas de las soluciones para combatir el problema del consumo elevado de energía. El reciclaje también es esencial, es una forma de reducir deshechos, permite evitar el uso de más materias primas y contribuye a reducir el efecto en el entorno natural.

Para la escasez de agua podemos implementar regímenes de gestión hídrica que abarquen a todos los involucrados para su uso y aprovechamiento para que se manejen las cuencas como sistemas vivos complejos con biodiversidad significativa bajo riesgo de extinción real.

Otras cosas que podemos hacer son: ahorro de energía, reciclaje de residuos y tener un cuidado del consumo de agua o luz de tu hogar.

Contribución del cristianismo a un desarrollo sostenible:

El mandato “Creed, multiplicaos y dominad la tierra” (Gn 1,28) no puede ser comprendido como una carta blanca para destruir y contaminar, sino, precisamente para cuidar de la tierra, trabajarla, hacerla fructificar y, de ese modo, continuar la obra creadora de Dios en ella.

El daño ambiental es también un daño social que afecta sobre todo a los más pobres, las mismas personas que la Biblia nos dice que debemos cuidar y por quienes debemos preocuparnos.

Uno de los mayores problemas al que nos enfrentamos a nivel mundial es el de alcanzar un desarrollo sostenible y no será posible sin la voz de la Iglesia. La Doctrina Social de la Iglesia y sus enseñanzas morales son imprescindibles. Hemos comenzado una era de la historia en la que se requieren nuevas soluciones y alternativas, y si estas nuevas perspectivas quieren de verdad provocar la movilización mundial que se requiere, deben estar basadas en una nueva ética global. Hasta ahora, nuestra sociedad ha sido incapaz de hacer frente a las amenazas del cambio climático y otros peligros graves. Y esto pone en peligro a la humanidad.

Para conseguir cambiarlo debemos conseguir un desarrollo sostenible, esto combina el desarrollo económico, la inclusión social, la sostenibilidad medioambiental y las buenas prácticas del gobierno. La Doctrina Social de la Iglesia ofrece un camino único y crucial hacia una ética global de desarrollo sostenible. La Iglesia habla de manera clara acerca de nuestras responsabilidades con la creación, con la caridad verdadera y con la subsidiariedad en las prácticas de gobierno.

Podemos avanzar hacia una nueva ética global, aprendiendo de las enseñanzas sociales de la iglesia y otras grandes tradiciones.