El Estrés Y Como Saber Llevarlo
Sabemos que el termino estrés se remonta en la década de los años 30, cuando Hans Selye, estudiante de medicina, se percató de que todos los enfermos a quienes el observaba, independiente de la enfermedad que tuvieran, todos tenían síntomas muy comunes en generales como agotamiento, pérdida del apetito, baja de peso, astenia, entre otros síntomas inespecíficos. Selye llamo a este fenómeno Síndrome General de Adaptación. Desde de la publicación su libro en los años 60, el estrés se concretó como la suma de todos los efectos inespecíficos de factores que causan estrés como las actividades cotidianas del día a día, agentes productores de enfermedades, drogas, hábitos de vida no adecuados, cambios en los entornos laboral y familiar, que pueden actuar sobre la persona.
Hay estudios un poco menos conocidos pero que también fueron esenciales para estabilizar las bases fisiológicas y neurológicas relacionadas al estrés de Walter Bradford Cannon y de Walter Rudolf Hess sin olvidar a John W. Mason quien fue el que le dio el componente psicológico al estrés que actualmente se tiene. Además, la teoría de Selye y la de Cannon comunican a su manera, que el estrés requiere la presencia de un agente externo. Selye en el ’74 afirmó que cierto grado de estrés es necesario y también tiene consecuencias beneficiosas cuando este se trata del estrés positivo llamado Eustrés, siendo el saludable, mientras que niveles mayores este pasa a ser realmente dañino, el Distrés, siendo el estrés malo y negativo. Todos estos síntomas están relacionados con la conexión del sistema límbico ya que en una amenaza se activa la amígdala que es el centinela de emociones y el hipocampo, ya que este regula las emociones y la corteza cerebral en la elaboración cognitiva en respuesta al estrés.
“Según la OMS, a inicios del presente siglo, las enfermedades provocadas por el estrés habrán superado a las enfermedades infecciosas” y se evaluó que desde el año 2010 se tendría muchísimas personas presentando trastornos afectivos, gracias al estrés, puesto que los estresores diarios causan muchas situaciones incomodas emocionalmente por lo que también somatizan, aunque quizás otros intenten buscar la forma de responder a sus problemas.
Debemos aprender, conocer y aceptar que el estrés está presente todo el tiempo y toda la trayectoria de nuestras vidas en todos nosotros como seres humanos, ya que siempre estamos viviendo, sintiendo y aprendiendo de todos esos cambios que nos ocurren, y así conocer y poder buscar un equilibrio cuidando nuestra salud y nuestro organismo, tratando siempre de establecer una buena relación con el entorno, el medio ambiente, y con todo lo que nos enfrentamos día a día, afrontando siempre todas las formas de estrés posible para estar bien.
La respuesta del estrés es normal, pero esto también puede empeorar y ser perjudicial y afectarnos en la calidad de nuestra vida. El estrés activa los cuatro sistemas, alterándolos, siendo el sistema nervioso, sistema inmunológico, sistema hormonal y sistema cardiovascular. El ajuste corporal para mantener la homeostasis necesita mayor energía, la cual se obtiene de los mecanismos del estrés mediante la activación del sistema nervioso vegetativo y de la secreción de algunas hormonas. Los inmunógenos conductuales favorecen la neuro plasticidad y con ello la resiliencia.
Este fenómeno es producido por tres factores: los externos, que es el medio, los propios, los cuales nosotros internamente generamos y los moduladores. Los factores externos puedes ser naturales, como lo es el clima, en los llamados artifícieles entraría los condicionantes que nos proporciona el habitad, en los sociales, entraría la población, la convivencia de los mismos y en los factores que puede tener lo interpersonal puede ser, por ejemplo, la relación conyugal. Los internos son mecanismos neurovegetativos, neuroendocrinos e inmunológicos. Así como los mecanismos psicológicos de defensa, adaptación, afrontamiento, la reactividad, lo somático, lo emocional, cognitivo y conductual ante el estrés.
Actualmente el estrés es un factor desencadenante de diversas enfermedades, lo cual puede ser muy serio si no sabemos dar equilibrio y controlar sus efectos, para esto podemos conocer y emplear estrategias útiles para saber calmar y diferencial el estrés malo del estrés bueno. Puesto que la humanidad ha estereotipado el concepto, pero la realidad es que como ya lo había mencionado, el estrés controlado es saludable, solo debemos cuidar que este no sobrepase dicho nivel para que no se nos desarrollen enfermedades graves.
Esta fundamentado que todo este asunto del estrés, que producimos día a día, es en cierto modo algo muy normal y sobre todo necesaria en cierto punto para el desarrollo de nuestra personalidad, así como las habilidades y aptitudes, pero no debemos dejar a un lado ni permitir que esto sobrepase más allá de los niveles para no agotar nuestras energías y así deteriorar el desempeño que puede hasta llegar a afectar nuestra salud. Además, recordar que somos seres únicos que lo que le puede estresar a uno no le estresa a otro. Por lo que es recomendable adaptarnos y poner todas las estrategias de afrontamiento necesarias para superar las exigencias que la vida nos pueda demandar, buscando así la mejora de nuestro estado estresante.
Existen gran cantidad de eventos que nos pueden provocar estrés, como en lo social, un disgusto con la familia, amigos, malas relaciones interpersonales, conflictos en la religión, en la dinámica familiar como lo es un divorcio, exceso de exigencias entre los mismos; en lo económico, el poco y escaso salario para abastecer las necesidades básicas, y en lo personal podría ser la baja autoestima, cambio en el estilo de vida, y sobre todo el trabajo demandante de muy alto compromiso.
Se puede utilizar la escala de estrés de Holmes y Rahe siendo esto un instrumento muy sencillo y que funciona muy bien, creada por estos dos psicólogos Thomas Holmes y Richard Rahe, en 67’. Siendo una de las técnicas para medir el grado de estrés que la conforman 43 ítems, cada una respondiendo a un factor estresor. por lo que dicho nivel indica el grado en que dicho evento puede afectarnos de acuerdo con varios estudios llevados a cabo. “En tiempos de gran estrés o adversidad, siempre es mejor mantenerse ocupado, para canalizar su ira y su energía en algo positivo”
Un inventario o cuestionario conocido como COPE, es una herramienta para evaluar las diferentes formas de respuesta ante el estrés, en desde se utilizan los mismos ítems para ambos tipos solo cambiando las instrucciones de aplicación. Ya que este cuestionario tiene dos versiones. Además, obtienen 4 factores; afrontamiento, emoción, evitación y un afrontamiento más cognitivo.
En cuestión de la conducta humana, el estrés ha sido un tema de mucho interés y preocupación, pues sus efectos tienen mucho que ver con la salud física y mental, y de esa manera también afecta el rendimiento de la persona, llevándolos a una gran preocupación, angustia que nos puede llevarnos a trastornos y desordenes. Y en cuestión de que aparezcan todos estos problemas, es porque tiene mucho que ver las exigencias del ser humano de como llevan sus actividades hoy en día, en cuestiones modernas, y el cómo reaccionamos a estos factores la mayoría de las personas. Por lo que todo esto se concentra en obtener resultados precisos de sus consecuencias sobre la calidad de vida y las actividades cotidianas del día a día, así como también la importancia en la salud física y mental de las personas afectadas.
Por esta razón todos debemos aprender a prevenir y controlar el estrés, de lo contrario puedes poner en riesgo tu salud y tranquilidad, mientras quien tiene el conocimiento y aparte lo pone en práctica podrá prevenirlo y afrontarlo evitando diversos problemas por lo que disfrutará de un estilo de vida sano y sobre todo satisfactorio y con un rendimiento adecuado. Cannon influyó en Selye con su hipótesis de la homeostasis. Siendo está muy importante para mantenernos en equilibrio y poder prevenir el estrés de un tipo malo. Dejando al estrés como reacción de lucha-huida, siendo una respuesta automática en defensa de estímulos amenazantes externos o internos. Por lo que debemos de considerar las mejores formas para prevenir y hacer frente al estrés sabiendo distinguir cuando estos niveles de tensión aumentan ante que estímulos y situaciones.
Cuando el estrés es excesivo es porque el estímulo es muy grande, y este es el que nos lleva a la angustia, a este tipo de estrés se le llama distrés. Por lo que la armonía y el equilibrio entre cuerpo y mente se rompen y esto es lo que evita responder de una forma adecuada en las tareas cotidianas. Siendo este el estrés negativo o malo. Ya que un nivel crónico elevado de agitación, distrés que nos da como resultado tensión mental y corporal mayor al que la persona puede aguantar, según sus capacidades, las cuales le producen angustia, enfermedades o de lo contrario la capacidad para superar esas situaciones ya denominado Eustrés.
El mal estrés es todo aquello que disgusta, que enferma llegando a causar patologías, como lo puede ser la tristeza excesiva, el fracaso, las malas noticias, enfermedades, presiones, frustraciones, la falta de libertad, siendo fuentes de desequilibrio, de alteraciones psicosomáticas y de enfermedades de adaptación. Y las respuestas de estrés implican tanto a los factores fisiológicos y conductuales como a los cognitivos.
Por otra parte, está el estrés positivo, el que es saludable, llamado Eustrés, en este el bienestar físico y mental están en equilibrio y así la persona desarrolla y da todo en su máximo potencial. El estrés positivo y saludable que necesitamos y que nos mantiene en equilibrio es todo lo que causa placer, todo lo que la persona quiere o acepta tener en armonía, con su medio y con su propia capacidad de adaptación. Sin embargo, aunque sea increíble de creer el estrés positivo y saludable si existe, pudiéndolo encontrar en la alegría, el éxito, el afecto, el trabajo, tranquilidad, al compartir con otras personas, donde los aspectos resultan estimulantes, alentadores, fuentes de bienestar, de felicidad o de equilibrio. Haciendo hincapié que el tipo de estrés que generen depende de la persona de como tome las situaciones y de la interpretación de cada acontecimiento, el tipo de estrés suele ser en gran parte de cómo se reciba e interpreten los acontecimientos; por lo que una misma situación puede significar un mal estrés para una persona y un buen estrés para otra. Además, recordemos que cada persona es diferente pues reaccionan de diferente manera a un mismo estímulo.
Son tres fases en la respuesta al estrés: alarma, resistencia y agotamiento. La primera se produce cuando el cerebro percibe un factor estresor por lo que el cerebro envía de inmediato un mensaje a la glándula pituitaria que inicia la segregación de una hormona, la cual induce a que otras varias glándulas inicien la producción de adrenalina, este efecto consiste en poner a todo el organismo en un estado general de alerta. El agente estresor siempre nos dará una respuesta fisiológica, activando señales como; el pulso rápido, aumento de la sudoración, corazón palpitando rápidamente, contracción en el estómago, tensión en brazos y músculos de las piernas, respiración rápida y entrecortada, dientes firmemente apretados, mandíbulas cerradas, incapacidad para permanecer quieto y emociones intensas.
En general, están dos grandes fuentes muy fundamentales entorno al estrés. En primeo, corresponde a los agentes estresantes que provienen de circunstancias externas como del ambiente, la familia, el trabajo, el estudio, etc. Y el segundo, se refiere al estrés producido por la misma persona, donde tienen que ver sus propias características de personalidad y por la forma particular de enfrentar y solucionar los problemas. pues para prevenir y afrontar el estrés de manera óptima, la persona debe tener fortalezca física y psicológica, para que pueda hacer frente y resista las circunstancias de la vida. Asimismo, es muy importante que las personas aprendan a disminuir los niveles de estrés en las situaciones personales, de modo que no superen las propias resistencias, considerando algo muy importante como lo es la actitud y la forma de asumir y analizar las situaciones a enfrentar en el día a día.
El estrés es prácticamente esencial, puesto que, aunque no lo creas, y parezca difícil de creer nadie podría sobrevivir sin él. El estrés es un impulsor de energía que nos da potencia para realizar todas nuestras actividades cotidianas. Ya que ahora si el estrés que tu conoces es el dañino, que se comienza a generar cuando ignoras y no escuchas a tu cuerpo que prácticamente te está pidiendo que te detengas o modifiques tu forma de respuesta al manejar las situaciones que se te presentan. Además, conocer más sobre el tema y a si mismo puesto que no a todas las personas les estresa lo mismo, ni mucho menos se presenta de la misma forma. Si cambias tu percepción en las cosas que miras, todas esas cosas cambiaran.
El proceso de afrontar del sujeto es maneja las demandas de la relación individuo y ambiente evaluándolas como estresantes, así como las emociones que esto le genera . Existen otras estrategias de afrontamiento mucho más estables y consistentes, de acuerdo con la situación estresante, ya que el afrontamiento depende del contexto. Lazarus y Folkman en el 88, manifestaron 8 estrategias de afrontamiento: confrontación, distanciamiento, autocontrol, búsqueda de apoyo social, aceptación de la responsabilidad, escape-evitación, planificación de solución de problemas y reevaluación positiva. Las dos últimas se asocian con resultados positivos.
También debemos considerar el ejercicio físico, el descanso, la buena alimentación, meditación, contacto con la naturaleza, aprender a preocuparse constructivamente y la planificación personal también ayuda a prevenir el estrés. Se cuenta con varios concejos para alcanzar una vida más equilibrada donde se pueden eliminar los estresores o de alguna manera modificar su forma de presentarse ante ti, la manera de percibir los problemas, por lo que puedes tener el conocimiento y aprender algunas formas de tomar la respuesta del estrés, ya que esto no es más que adrenalina producida al activarse el sistema nervioso autónomo, simpático, siendo parte de la lucha- huida. Además, debes intentar ser claro y exacto a la hora de analizar el estresor que te esté generando problema, motívate, haz el esfuerzo y veras que si se puede.
Conforme lo vayas practicando y conociendo te será mucho más fácil. También otras de las cosas recomendadas es tomarse un descanso entre tus actividades diarias durante el día, para despejar la mente y te relajes un poco. Esto suele ser muy útil. Y por lo que otra de las formas para poder abordar de la mejor forma la respuesta del estrés, es realizando ejercicio físico, ya que esto consume adrenalina, así como practicar yoga o actividades relajantes, ya que después de esto nuestro cuerpo produce endorfinas que nos ayuda a sentirnos mucho mejor producido naturalmente. Aprende a respirar, invierte tiempo en hacer este tipo de actividades, ya que esto te será compensado y mejorará tu rendimiento como tu concentración, te sentirás menos tenso o menos angustiado, y terminaras por convertirte por fin, en el dueño de tus emociones y no la víctima.