El Ku Klux Klan: El Fénix De La Ideología Racista
Vayas donde vayas, en cualquier lugar, hay gente discriminando a otros. Hay quien los juzga por su orientación sexual, por la forma de vestir, por cómo se comportan, por su color de piel. Es este último punto el que nos ocupa en este escrito. Este tipo de discriminación tiene nombre. Se llama racismo.
El racismo no es un tema nuevo. Desde que el hombre comenzó a evolucionar, se han creado jerarquías. En lo más alto nos encontramos al hombre blanco, europeo, con dinero y poder. Por debajo están el resto de personas. Utilizando la metáfora de Zygmunt Bauman, podemos decir que el mundo es un jardín. Y un jardín necesita alguien que lo cuide1. Nuestro jardín hace tiempo que tiene jardinero, que se encarga de mantener las malas hierbas a raya y que todo crezca según sus condiciones. Porque las de los demás no son válidas.
Esto es lo que llamamos colonialismo. El material que hemos elegido para desarrollar este tema es la película The Birth of a Nation, escrita y producida por D.W. Griffith en 1915, que a su vez se basó en el libro escrito por Thomas Dixon, The Clansman.
La película se enmarca en la época de la Guerra de Secesión americana, de 1860 a 1865, y la posterior época de la Reconstrucción. En este contexto se presentan las dos familias protagonistas de la película, los Cameron, del sur de Estados Unidos y los Stoneman, del norte. Ambas familias se ven enfrentadas en la guerra civil que tuvo lugar en estos años.
Durante estos años, América del norte y otros países europeos utilizaban a las personas negras como esclavos para servir en las casas de patrones adinerados o en sus plantaciones de algodón o tabaco. Tras la guerra y posterior asesinato del presidente Abraham Lincoln, se propone desde los estados norteños otorgar derechos a los negros. Más adelante hablaremos acerca de los derechos que tenían, o no, las personas negras en ese momento.
Lo interesante de todo esto es cómo nos muestra Griffith este proceso. Los negros, que eran tratados como objetos, pasan a tener los mismos derechos que los blancos. Pero esto no sucede así de cualquier manera. Lo importante de este hecho es que son los mismos hombres blancos, es decir, los jardineros, los que deciden darles esos derechos. Son ellos los que se apiadan de los pobres negros y en un momento de debilidad deciden que deben tener las mismas oportunidades que ellos. Según transcurre la película, se dan cuenta de lo equivocados que estaban. En la obra representan a los negros como personas vengativas y agresivas que, ahora que han conseguido poderes y derechos, quieren arrebatar a los blancos sus casas, sus tierras y sus mujeres. Pero es gracias a todo esto que surgen los héroes que devuelven al negro al lugar que le corresponde. Hablamos, por supuesto, del Ku Klux Klan. Y es que Griffith nos muestra la creación de este grupo paramilitar como algo necesario para cesar los conflictos existentes entre hombres blancos y negros. Llegan para traer de nuevo la paz a la nación. Lo más curioso de la película, es que la intención del director no era establecer diferencias entre blancos o negros. Lo que hace realmente es una crítica de la guerra y la violencia que tuvo lugar en aquel periodo2. Sin embargo, como se ha dicho anteriormente, está basado en libro The Clansman, por lo que también toma una actitud racista donde culpa al negro de ser el causante de la guerra. De hecho, esto se puede observar en uno de los interludios finales:
“Osemos soñar con un día dorado en el que la bestia de la Guerra [el hombre negro] no gobierne nunca más. Lo hará, en cambio, el gentil Príncipe [el hombre blanco] en el Palacio del Amor Fraternal, en la Ciudad de la Paz.”
Si el mensaje que quería transmitir Griffith era de paz ¿por qué nosotros lo identificamos con el racismo y la supremacía blanca? Con el tiempo las personas cambian, así como su forma de ver las cosas. No somos los mismos que los que vivieron a principios del siglo XX, lo cual significa que no podemos ver las cosas de la misma manera que ellos.
Al producir la película, el director se inspiró en el libro de Dixon, pero también en sus propias ideas y en lo que había vivido.
En el libro, Dixon emplea marcadores visuales tales como la descripción, generalmente macabra, de los negros y exalta la supremacía blanca, donde se emplea el término Whiteness, y la muestra como una acción, una purificación para que el lector “entienda” sin decirlo directamente que los negros son los malos y los blancos son los buenos3
Sin embargo, como bien expone Miguel Ángel Cabrera en su libro Historia, lenguaje y teoría de la sociedad, las palabras no tienen un significado predeterminado que diga, por ejemplo, que un baúl es una caja donde se almacenan cosas, sino que dicho significado puede cambiar y con ello la forma de visualizar dicha palabra, es decir, que las palabras son construcciones gramaticales que las personas le han dado un significado. El caso de la palabra Whiteness no es distinto. Es una palabra construida a partir de la necesidad de los americanos blancos de mostrar su superioridad frente a los negros (que no podían ser considerados americanos porque eran inferiores)4.
En 1915, la esclavitud era un tema que aún estaba muy reciente en Estados Unidos, y que ha formado parte de su historia durante muchos años. Son las ideas que se tenían entonces de los negros las que se reflejan en la película.
Para explicar mejor el contexto, debemos remontarnos varios siglos atrás, cuando la esclavitud llegó a América. Y como no podía ser de otra manera, vino de la mano del hombre blanco, cuando Cristóbal Colón llegó por primera vez.
Los ingleses, cuando llegaron años después, pusieron en práctica los métodos de Colón, pero en lugar de hacerlos con los nativos, trajeron esclavos del continente africano5.
Entre los siglos XVI y XIX llegaron a América esclavos negros venidos especialmente de Inglaterra, ya que esta tenía en Norteamérica gran parte de sus colonias. La esclavitud fue legalizada en 1696, cuando el estado de Carolina del Sur puso en vigor el primer Código de Esclavitud. Alrededor de 1700, todas las colonias sureñas amparaban legalmente la esclavitud. Estos códigos de esclavitud prohibían el matrimonio interracial, el derecho a voto, ocupar cargos públicos y portar armas, y restringían la libertad de movimiento y reunión6.
A partir de 1830, el país quedó dividido entre los estados sureños, que estaban a favor de la esclavitud, y los norteños, que pedían su abolición. Tras la Guerra de Secesión, con la victoria de los estados de la unión, se puso fin a la esclavitud. Pero lo cierto es que no se puede poner fin a algo que lleva vertebrando el país durante tantos años. La imagen que se tenía del negro era la de un ser inferior, sin derechos, sin ser persona. Es entonces, tras la Guerra Civil, en 1866, cuando se crea el Ku Klux Klan. Este nace en Pulanski, Tennesse. Originariamente, el KKK no tenía ideas violentas, más bien al contrario. Se trataba de un grupo que realizaba actuaciones musicales y representaciones teatrales del folclore tradicional para entretener al pueblo. Sin embargo, en la era de la Reconstrucción, las movilizaciones de los miembros del clan seguido de los intentos de muchos de apropiarse de su imagen afectaron tanto a la extensión del movimiento del clan como a la naturaleza y significado de sus acciones7.
A lo largo de los años, el Ku Klux Klan ha desaparecido para después volver a manisfestarse con algún acto racista. Hoy en día no tiene tanta influencia como en el pasado, pero no es necesario hablar del Ku Klux Klan para hablar de racismo. Está presente en nuestras vidas, aun sin darnos cuenta. Cada persona ve el mundo desde el lugar en el que le ha tocado vivir, dónde le inculcan unas ideas son muy difíciles de cambiar. Y no hay que olvidar que nosotros vivimos en el lado del jardinero. Somos parte del control del jardín, lo queramos o no. Son muchas las noticias que hablan de agresiones por motivos raciales, especialmente en Estados Unidos. Antes hemos mencionado que las ideas que tenían los americanos en el estreno de la película The Birth of a Nation no son las mismas que tenemos actualmente. Quizá no sea del todo cierto.
Con todo lo mencionado anteriormente, creo que podríamos afirmar sin temor a equivocarnos que tanto el racismo como el grupo paramilitar del Ku Klux Klan, con el que está intrínsecamente relacionado, nunca llegarán a desaparecer por completo mientras siga existiendo dentro de las personas esa ideología del discurso colonialista de la supremacía blanca o, como lo denominaba Dixon, Whiteness, pues aunque hoy en día en la gran mayoría de los países todas las personas tienen derechos, ya sean hombres o mujeres; cristianos, judíos o musulmanes; blancos o negros; todavía no se ha desvanecido la idea de que la raza blanca es superior a las demás. Como si de un fénix se tratase, por mucho que muera, siempre renacerá de sus propias cenizas, es decir, de la ideología colonialista.
Bibliografía
- Zygmunt BAUMAN. “Guardabosques convertidos en jardineros”, en Z. Bauman, Legisladores e intérpretes. Sobre la modernidad, la posmodernidad y los intelectuales., Buenos Aires, Universidad Nacional de Quilmes. 1997, pp. 77-100.
- Robert LANG. The Birth of a Nation: History, Ideology, Narrative Form. Nueva Jersey, Rutgers University Press, 1994.
- Chris RUIZ-VELASCO. Order Out of Chaos: Whiteness, White Supremacy, and Thomas Dixon, Jr., College Literature Fullerton: Universidad del Estado de Carolina. (2007).
- Miguel Ángel CABRERA, “Discurso, experiencia y construcción significativa de la realidad”, en M.A CABRERA, Historia, lenguaje y teoría de la sociedad; Madrid, Cátedra, 2001, pp. 77-99
- Howard ZINNN, La otra historia de los Estados Unidos. Desde 1492 hasta el presente.
- Javier MAESTRO, “El dilemma norteamericano”. De la esclavitud a la institucionalización de la discriminación racial, Studia histórica, historia contemporánea, 26, 2008, pp. 54-78.
- Elaine FRANTZ PARSONS, Midnight Rangers: Costume and performance in the Reconstruction-Era Ku Klux Klan, Journal of American History, Volumen 92, Número 3, 2005, pp. 811-836.