Análisis del Artículo “Gitanos En La Escuela”

El artículo “Gitanos en la escuela” de Miquel A. (2003), nos presenta el contexto del grupo social de los gitanos en el ámbito de la educación.

Primeramente, debemos definir el concepto de “cultura identitaria”. Este término hace referencia al conjunto de comportamientos, valores, tradiciones, símbolos y creencias que juntas identifican a un grupo social, cuyos integrantes se identifican con dichos aspectos.

Sabiendo esta definición, podemos afirmar que desde hace más de 50 años las instituciones han relacionado directamente el fracaso y éxito escolar de los alumnos con la cultura identitaria.

Teniendo en cuenta que existen minorías aisladas, podemos ver cómo en el currículum educativo se dejan de lado a las minorías, pero estos grupos sociales tampoco se quedan atrás. Al no ser considerados por el ámbito educativo, estos se oponen con conductas que pueden llegar a interponerse en la práctica educativa.

No solo aisladas educativamente, sino también en el ámbito de la política, economía, trabajo, etc.

Llegamos al punto de que si un grupo social como los gitanos no están representados en el currículum habrá que idear diversas estrategias para incluirlos.

Las investigaciones han expuesto situaciones que se dan con alumnos gitanos. Estos suelen empezar a ir a la escuela mucho más tarde que el resto de los niños lo que se traduce en una baja tasa de titulación. Además, hay gran cantidad de absentismo en el caso de que estén escolarizados.

Esta marginación por parte del sistema educativo es debido a sus costumbres; a sus rutinas; a su modo de vivir sin pensar en el futuro, un “aquí y ahora”; a su periodización de la adolescencia como un transcurso de tiempo bien corto que hace que los niños crezcan de forma avanzada, especialmente las niñas; además su tradición oral es predominante en sus vidas y no se adaptan al estilo metodológico de las aulas.

Por todo esto los gitanos tienen una visión distorsionada de la escuela, no la aceptan porque ellos mismos no son integrados en ella. La escuela es una institución que amenaza toda su forma de vida, ya que esta transmite unos valores fundamentales para la sociedad. Al verse de lado y sin el reconocimiento de sus valores culturales únicamente tratan a la escuela como un lugar donde aprender a leer, escribir y hacer operaciones matemáticas. Sienten menosprecio hacia su identidad cultural, lo que conlleva en ocasiones a respuestas agresivas.

Por ello, como futuras maestras debemos ser conscientes de que hay que promover la inclusión en el aula de dicha comunidad y que, al incluirla, esta vaya adquiriendo su propio desarrollo ligado a la educación. Los cambios deben ser flexibles a la hora de acoger a los gitanos, a su forma de vida, a su comunicación.

Para abordar la integración tendremos en cuenta la concertación y la mediación. Por un lado, la concertación es la negociación que se establece para que los gitanos dejen de ver la escuela como algo ajeno. Además, es importante no achacar el fracaso escolar a los factores de vida de esta comunidad (absentismo, conflictos en la escuela). La concertación debe de mantener un plano comunicativo equilibrado en el que ambas partes colaboren y tomen decisiones. En todo momento debe predominar la negociación, porque de lo contrario perderíamos la concertación. Para que todo fluya debemos evitar que las diferencias culturales sean un muro durante este proceso de inclusión en la educación. Como maestras debemos superar todas y cada una de esas diferencias para que la comunidad gitana abrace la idea de escuela, y viceversa.

En ocasiones es necesaria la figura del mediador que ayude con las decisiones finales y a que la comunicación sea correcta. El mediador debe dar libertad de discurso a ambas partes negociadoras.

Cuando la concertación y la medicación se llevan a cabo idóneamente, los padres de los alumnos gitanos se implican en la vida educativa de sus hijos, lo que da como resultado el éxito académico.

Si conseguimos llevar una relación sana entre la familia y la escuela, podríamos conseguir que generaciones futuras se escolarizaran. Estaríamos ante un éxito que habría que perpetrar con esfuerzo, voluntad y con mucha comunicación y negociación.