Importancia De La Comunicación en Las Organizaciones
Mediante la revisión minuciosa de textos y autores especializados, se pueden localizar orientaciones epistemológicas que contextualizan la Comunicación como una acción de comunicarse entre dos o más individuos, a través del uso de un canal donde se intercambian mensajes entre un sujeto que emite y el otro que recibe.
De la misma forma se puede decir que la Comunicación es el principal instrumento responsable en permitir conocer al Talento Humano dentro de una Organización, ya que a través de ella evaluamos su desempeño y a su vez observamos su productividad, entre otros elementos que se presentan para el cumplimento de los objetivos. A través de este medio se puede acceder al progreso de sus integrantes y a su vez obtener los instrumentos necesarios para afrontar los retos y necesidades que se presentan con el día tras día. En ese orden de ideas los autores Claudin y Anabitarte, mencionados por Altman y Hodgetts, (1983 p. 29); al igual que Villasmil, (1998), Tena y Salinas, citados por Altman y Hodgetts (1983), pp.22-23), sustentan que la comunicación entre humanos es una herramienta compleja, que se compone según sus formas, mediante el cual los métodos del proceso de vida como de la humanidad son proporcionando por la adaptación del individuo a su propio ecosistema. Mientras Altman y Hodgetts (1983), pp13-15), quien es mencionado por el Sallanave (1996), fundamenta que el proceso comunicativo se convierte en un asunto que acontece a lo interno de los individuos.
No obstante, dentro de ese escenario comunicativo sus actores coinciden con elementos perturbadores que se originan dentro de las empresas, esto concuerda esencialmente con la falta fundamental del uso del canal de comunicación entre sus emisores y receptores (integrantes), que a pesar de la realidad que puedan vivir mantienen la defensa de su posición en muchos de los casos, hasta el punto de sacrificar excelentes niveles de entender de manera moderada, tolerable y traduciéndose en inevitables rupturas comunicativas que conllevan hacia el alcance de los logros, como la satisfacción los miembros que hacen vida en la organización como a la empresa en su conjunto.
En consecuencia, se puede decir que la falta de estrategias comunicacionales acertadas conducen a escenarios no deseables, que pueden afectar el clima de la organización, lo que exige a sus actores manifestarse cuando surge un aprieto de envergadura, promoviendo la necesidad de construir algún tipo de contacto que permita investigar lo que efectivamente desee encontrar entre los involucrados. En ese sentido Altman y Hodgetts (1983), pp.13-15) revelan que a partir del momento que el individuo inicia una discusión, comienza el primer movimiento donde se admite que se debe implantar la comunicación como sinónimo de resolución de conflictos. Si no se llegara a ese previo paso, la comunicación entre dos o más personas será compleja.
Por esta razón, el gerente dentro de una organización, es responsable de mantener el equilibrio entre el manejo de los recursos, el tiempo, la coordinación, planificación, administración de tareas, cargos y desempeños, además de articular como agente transmisor las ideas y proyectos de la empresa, obteniendo así, una comunicación formal para establecer lo que debe hacerse, cómo se tiene que hacer, cumpliendo con el objetivo de alcanzar las metas formuladas en un corto, mediano y largo plazo.
Para los fines argumentados por Ferrari (XXXX) quien es citado por Rincón, Restrepo, y Vanegas, (2018), “Se define la comunicación como un asunto del conocimiento que se maneja como un intermediario entre el pensamiento estratégico y la acción que transforma el mensaje con la intención de llegar de manera comprendida a sus públicos”. De allí que la fluidez de la comunicación dependerá de cada una de las partes en conflicto. Para propiciar el entendimiento, las partes en divergencia deben partir del principio de la confianza. Por lo cual la comunicación va a un paso de un conflicto y la solución de la misma llevará a los involucrados a desarrollar el arte de la negociación.
De esta manera la comunicación en las organizaciones debe ser visualizada y ejercitada como un recurso indispensable del management, pues frente a la incertidumbre que afrontan los escenarios futuros, la comunicación debe apropiarse del papel fundamental, con el objeto de impulsar un sentido de pertenencia organizacional. Habermas (2002), destaca en sus teorías que la acción comunicativa, estudia y analiza la comunicación y sus distintas dimensiones, planteando un conjunto valioso de principios que refirman su transcendencia y valor, así como una óptica de gran significado para asumir la comunicación dentro de un clima de profundidad y complejidad respecto al ser. Los principios y postulados en las teorías de Habermas, son relevantes como recursos para afrontar las comunicaciones organizacionales, donde ninguna organización esta ajena a éstos, lo que constituyen oportunidades valiosas para impulsar favorablemente a los grupos de trabajo.
En ese sentido, es preciso señalar que la comunicación es la base primordial de todo proceso sistemático de que se origine dentro de cualquier organización, a través de ella, se puede establecer equipos creadores de métodos que conformen el éxito de las organizaciones.