La Anorexia Canina No Es Un Transtorno Alimenticio
La anorexia canina es un estado durante el cual el perro rechaza la comida. A diferencia de la anorexia nerviosa en humanos, no es un trastorno alimenticio, simplemente una conducta durante la cual el perro deja de comer por razones concretas.
Sea cual sea la razón por la que un perro deja de comer, es importante encontrar una solución pronto. El can comenzará a perder una cantidad importante de peso y se producirá la destrucción de los tejidos de reserva del animal. Esto, puede acarrear consecuencias fatales si se dilata en el tiempo. Siempre, se debe buscar la causa por la que un perro deja de comer, antes de intentar forzarlo. Para ello, lo primero que debemos hacer es visitar al veterinario.
Enfermedades que provocan anorexia canina
Casi cualquier patología puede causar anorexia canina. De hecho, este síntoma es una de las principales causas por la que un tutor lleva a su mascota al veterinario. Cuando el can deja de comer o come menos, la persona responsable del animal no suele pasarlo por alto.
Según varios estudios llevados a cabo, los dos principales motivos por lo que un perro deja de comer se deben a cuestiones infecciosas o parasitarias. En la mayoría de los casos, tras un análisis de las heces y otro sanguíneo, suele aparecer el agente causante, parásitos o virus como el que provoca la parvovirosis. Otras enfermedades víricas comunes que conlleva a la anorexia canina son:
- Moquillo
- Hepatitis vírica
- Leptospirosis
- Tos de las perreras
Por otro lado, los problemas del tubo digestivo como la gastritis, hacen que el animal coma menos o rechace totalmente el alimento, incluso, si intenta comer, acabará vomitando el alimento. Asimismo, la enfermedad renal crónica o patologías cardíacas, pueden llevar al animal a un estado de apatía, durante el cual, no quiera comer. Por último, aunque no es una enfermedad en sí, las intoxicaciones por veneno, alimenticias o la ingestión de plantas tóxicas provocan anorexia canina.
Factores ambientales que promueven la anorexia canina
Los perros son animales sintientes y pensantes, caracterizados por desarrollar emociones complejas que, al igual que en el ser humano, están mediadas por estímulos ambientales, vivencias, aprendizajes y niveles hormonales.
Un can puede dejar de comer por tristeza, ansiedad o frustración. Por ejemplo, si su tutor se ausenta, si aparece un nuevo miembro en el grupo familiar, si le riñen o si es maltratado. Estas, y otras muchas situaciones, pueden provocar que un perro no quiera comer.
Por otra parte, la ausencia de estímulos y el aburrimiento, aunque normalmente causan otro tipos de problemas conductuales, también pueden causar anorexia canina. Además, debemos tener en cuanta con qué alimentamos a nuestra mascota. En muchos casos, la palatabilidad de la comida es nula y al perro no le gusta o bien, esta es de muy mala calidad.
¿Cómo hacer que un perro coma?
Antes que nada, si observamos que nuestra mascota comienza a comer menos o rechaza totalmente el alimento, debemos acudir al veterinario. Si se descartan problemas físicos y enfermedades, tendremos que informarnos si el alimento que suministramos a nuestra mascota es de buena calidad. En el mercado existen multitud de tipos distintos de piensos, alimento húmedo y fresco, intenta averiguar cuál prefiere tu mascota. Ante todo, evita dar comida dirigida a humanos, pues, a la larga, aparecerán carencias en el perro. Por ejemplo, no podemos alimentar a un can con arroz y pollo. Este necesita, además, tripas verdes, vísceras, grasas, etc.
Si todo lo anterior es correcto, deberemos analizar si han habido cambios en nuestro hogar que hayan podido afectar al perro y, si nada mejora, acudir a un etólogo canino que pueda determinar qué le está ocurriendo al perro.