La Ciencia De La Lectura En El Mundo Actual
La lectura, aunque es una necesidad vital para el mundo actual, se ha convertido en el aula de clase en una actividad de incomodidad y estrés, porque se manejan temas que un joven no encuentra en su realidad o entorno creando así espacios de desinterés. A lo anterior se suma otro factor que desmotiva la lectura y es la evaluación de la misma mediante un método que mide la capacidad de memoria, pero no el análisis crítico. La rutina en los espacios en que se desarrollan las actividades de lectura no favorece la imaginación, la creatividad e investigación, donde las lecturas no causan curiosidad al joven lector, sino que definen conceptos.
El cerebro del hombre se encuentra en constantes cambios que estimulan las conductas y comportamientos del mismo, es por esto la importancia de que se pueda analizar y evaluar la etapa de la adolescencia para poder entender los patrones emocionales y así dar nueva dirección a los métodos que se deben aplicar dentro de un salón de clase.
El joven actual está en búsqueda constante de recompensas, de soluciones inmediatas a sus necesidades, les gusta enfrentarse a situaciones de riesgo y se suma además factores fisiológicos como la segregación de hormonas, por ejemplo, la dopamina, que influye considerablemente en su comportamiento. Es por esto que la ciencia puede ayudar a los docentes ha entender estos cambios físicos y emocionales actuales en los estudiantes para poder motivar de acuerdo a sus necesidades el interés por la lectura.
La mayoría de autores están de acuerdo con esto: “Se espera generalmente de una persona culta que sepa algo de Historia, de temas de la actualidad y de Política, Literatura, Filosofía y Religión, y ahora se hace cada vez más necesario que tenga conocimientos en ciencias y métodos científicos, de Matemáticas y Estadística” (Maddox Harry. Cómo estudiar. Barcelona, Ediciones TAU, S.F). Con esto entendemos que la lectura es necesaria para todos los seres humanos que quieran superarse, pero aún es más necesario para los estudiantes, quienes han optado por una actividad intelectual permanente, por eso se hace necesario estimular la lectura en todas las asignaturas que permitan conocimientos aplicables a la vida cotidiana, de forma que se tenga en cuenta al estudiante y la identificación de sus realidades, experiencias y sentido vocacional. Es así que necesitamos docentes que nos ayuden a comprender la vida desde sus enseñanzas, por ejemplo, como aplicar los principios matemáticos a la cotidianidad y para ello es importante como hacemos la lectura de esos conocimientos.
La lectura tiene que ver con la capacidad de comprender, entender y asimilar contenidos, con un esfuerzo motivador que no cause sufrimiento ni sentido de obligación, sino que permita el desarrollo del pensamiento. Lo anterior lo podemos respaldar con la siguiente frase: “procuro no cargar mi memoria con datos que puedo encontrar en cualquier manual, ya que el gran valor de la educación no consiste en atiborrarse de datos, sino en preparar el cerebro para pensar por su propia cuenta y así llegar a conocer algo que no figure en los libros.” (Albert Einstein).
La siguiente frase dada por un docente: “Estoy convencido de que la excelencia de un alumno tiene que ver con su capacidad de analizar situaciones problemáticas y proponer soluciones creativas y personales aplicando aquello que ha aprendido en el aula.” (Fernando Rodrigo Sáenz). Con esta afirmación podemos pensar que no se puede calificar a un estudiante como inteligente por su capacidad de memorizar o grabar datos históricos, sino que se debe ir más allá donde se estimule la lectura crítica y constructiva.
La lectura en el aula de clase, se ha convertido en el tiempo actual en una actividad desafiante para los docentes y se debe acudir a la creatividad para desarrollar actividades en clase que llamen la atención de los estudiantes, como lograr lecturas en grupo que comprometan la atención y el interés, planteando retos lectores que permitan realizar preguntas después de cada lectura.
En nuestro siglo podemos encontrar diferentes plataformas que nos pueden ayudar a complementar y a animar a la comunidad joven y adulta a leer, no solo con fines académicos, sino que también con el fin de entretener y descansar la mente, también a fomentar la actividad cerebral con los datos curiosos de temas que nos generan el sentido de indagar por las cosas que nos rodean, y nos lleva a adentrarnos en más temas. Estas plataformas crean blogs los cuales llevan a debates sobre posiciones de personajes en novelas u obras contemporáneas donde nos llevan a analizar posiciones de diferentes tipos de pensamientos, y contemplan la posibilidad de crear una relación entre el personaje y el escritor. También se pueden encontrar personas que incentivan la lectura por medio de las redes sociales los cuales son conocidos como “booktubers” los cuales crean reseñas y expectativas sobre los libros más comerciales y concurridos de la comunidad. Para implementar esto en las instituciones educativas podrían crear espacios donde los estudiantes puedan tener acceso a materiales físicos y digitales, con comodidades diferentes a las del salón como cojines y áreas coloridas donde puedan dejar volar su imaginación, y con esto poder crear debates entre ellos para no solo implementar la lectura sino que también puedan abrir su mente y contemplar los
diferentes puntos de vista, poder alimentar y analizar las ideas planteadas, y esto ser beneficioso para el desarrollo de las clases y el entendimiento grupal de los temas.
Una forma de recrear lo expuesto en el párrafo anterior, es por ejemplo los proyectos innovadores que se están presentando en las páginas web, como el de Jeff Bezos, fundador de Amazon que tiene como meta ser una de las empresas virtuales más innovadoras y dedica gran cantidad de recursos para experimentar, al igual que son muchas las Editoriales virtuales que buscan contar de una manera diferente una historia, involucrando los sentidos del lector, rompiendo con la narración lineal y permitiendo animaciones, como audiolibros ilustrados, permitiendo gran creatividad tanto al editor como al lector. Esto es lo que se denomina lectores del futuro.
En el libro Métodos y Técnicas de Estudio en la Universidad, se plantea, algunos de los problemas que tienen los estudiantes en cuanto a la lectura, como el hecho negativo de una bajísima proporción de lectura en los centros docentes, pereza mental, tendencia a minimizar el esfuerzo intelectual o a veces a la imposibilidad de hacerlo, también se destaca la falta de interés en los temas que se leen o la falta de objetivos concretos y no en pocos casos a que algunas personas se crean autosuficientes y por lo tanto creen saber de antemano todos los contenidos existentes en los libros, concluyendo que el problema de la lectura consiste en que las personas no saben leer , no porque sean analfabetas sino porque no disponen de medios efectivos para hacerla comprensible y se plantea como solución en realizar un entrenamiento que con lleve a una buena abstracción de la lectura.
Ante este análisis se puede determinar que se debe actualizar estos métodos de estudios para una población estudiantil que se encuentra en una era tecnológica donde se le facilita la consulta de cualquier información sin tener que recurrir a una metodología, situación que agrava el hecho de captar la atención por la lectura, la percepción y la toma de conciencia de lo que se está leyendo.
Es importante crear en las aulas un ambiente en que el docente y los estudiantes disfruten de actividades de lectura, planteándose constantemente interrogantes como ¿To-dos leen de igual forma? ¿Qué utilidad tienen las lecturas que consultamos? ¿Cómo estamos enseñando? ¿Cómo estamos aprendiendo? ¿Qué nos dice el resultado de las evaluaciones de lectura?, esta constante evaluación permitirá identificar los problemas que se pueden presentar ante los nuevos lineamientos que se hagan para lograr el gusto a la lectura.
En conclusión, es urgente unir conocimientos científicos con estrategias literarias que se acondicionen a las necesidades que se están presentando dentro de las aulas de clase de crear nuevas alternativas que motiven y capten la atención de los jóvenes para que tomen hábitos de lectura que permitan el desarrollo de su pensamiento y colocándolos como constructores de nuevas ideas, dejando atrás que seamos repetidores de ideas y conceptos.
