La Experiencia Personal y el Panorama General de La Inserción Profesional Docente
Introducción
El presente documento muestra una investigación sobre la temática de la inserción profesional de los docentes, reflexionando sobre los principales retos que se enfrentan al egresar de la formación académica para insertarse al campo laboral educativo.
En relación a la inserción profesional docente, el siguiente texto abordará los siguientes temas: I. Conceptualización breve de la inserción profesional docente; II. Requisitos para la inserción profesional del docente en México, III. Principales retos o problemáticas para la inserción profesional docente y IV. Sugerencias para la inserción profesional de los docentes.
Respecto a este tema, se destaca que existen diversas limitantes para la inserción del docente, las pautas a seguir atienden a cuestiones meramente políticas, convirtiéndose en asuntos burocráticos que obstaculizan la pronta inserción laboral del docente, impidiendo que adquiera la experiencia para poder desarrollarse de acuerdo al perfil en el que se formó durante su recorrido académico.
Conviene subrayar que es verdad que los lineamientos políticos para la educación se han desarrollado con el fin de normar la actividad educativa del país, sin embargo, crean diversas problemáticas para los egresados que poseen las habilidades y actitudes requeridas para la docencia puesto que se enfrentan a requerimientos que hacen lejana la posibilidad de acceder a un trabajo remunerado y que a su vez puedan aportar significativamente a la educación en México.
En relación a ello y dentro de mi experiencia personal, los requisitos que exige el sistema mexicano para que los docentes podamos ingresar en el marco educativo, suelen perjudicar el desarrollo profesional, desmotivando al egresado debido a que el esfuerzo que se ha invertido durante cuatro años de carrera no rinde frutos por cuestiones que están fuera de alcance del estudiante, por ejemplo, las cuestiones de trámites (título, cédula profesional, certificados de calificaciones, etc.) y la falta de experiencia; dichas variantes producen una gran incógnita: ¿cómo se ha de adquirir la experiencia necesaria, si no se brindan las oportunidades de desenvolverse en la docencia y se interponen a ello distintas condiciones que no dependen en su totalidad del estudiante?
Planteamiento del problema
En el contexto de la inserción profesional docente, son diversos los desafíos que se presentan para los egresados; en este caso nos vamos a situar en lo correspondiente a los requisitos políticos y/o administrativos que son solicitados para adentrarse en la práctica docente. En este aspecto, las pautas establecidas para el ingreso del maestro, son cuestiones burocráticas que postergan el poder insertarse en el campo educativo y desarrollar lo aprendido en la licenciatura. Definitivamente significa para los docentes egresados una barrera laboral.
Cabe destacar que la documentación solicitada es una norma que da formalidad, seriedad y credibilidad a la práctica profesional docente, sin embargo, dicha normatividad no confabula a favor del egresado puesto que son trámites muy tardados sujetos a posibles pausas en los procesos que ejecuta la Secretaría de Educación Pública (SEP). En este sentido, resulta injusto que muchos otros profesores que no cuentan con la formación idónea estén frente a clase, desempeñando un mal papel profesional; además existen casos numerosos dónde las influencias o “palancas” hacen posible que personas sin título, cédula o algún documento que los ampare, laboren en la importante tarea de educar.
Se subraya que esta situación referente a la inserción profesional docente, impacta en el campo de la docencia debido a que hay muchos egresados con enorme potencial y ganas de trabajar que podrían dar un giro positivo a la sociedad contribuyendo en la formación educativa de sus individuos y se encuentran segregados o detenidos por cuestiones administrativas que deberían estar reguladas, supervisadas y en favor del apoyo al crecimiento profesional de los egresados.
Respecto a lo anterior, toda esta serie de normatividades para la iniciación del profesor, implica pensar que también el número de profesores disminuye para dar atención a la gran demanda estudiantil del país, es decir, ante la solicitud de estos documentos y la tardanza para que lleguen a manos de los egresados, el gremio va disminuyendo o bien el que está frente a grupo no siempre se puede Generalizar que realice con eficacia su trabajo. Es entonces, cuando se enfatiza en que no se otorgan las posibilidades necesarias para la labor de los profesores.
Para finalizar este apartado, se hace hincapié en la pregunta inicial, plasmada en la Introducción: ¿Cómo las nuevas generaciones de profesores pueden ir adquiriendo experiencia en el proceso de enseñanza-aprendizaje, si no se brindan los medios efectivos para el desenvolvimiento profesional y sólo se obstaculiza el camino con cuestiones que no deberían llevar tanto tiempo y que además no dependen del egresado en su totalidad?
Conceptualización de inserción profesional docente
Como punto de partida, es importante desglosar el concepto de la inserción profesional docente, ya que involucra una serie de aspectos que es necesario considerar a fin de expandir la información sobre el tema; para ello, García (2006) plantea que la inserción docente se entiende como una etapa donde el estudiante se convierte en el profesor; en este periodo se enfrenta a diversos retos tanto con su grupo de clase como en la metodología pertinente de enseñanza que ha de implementar en el aula a fin de dar cumplimiento al currículo formal.
El autor anteriormente señalado, indica también que la inserción profesional docente de los recién egresados, implica un proceso de la propia construcción profesional, misma que se desarrollará en la práctica educativa, permitiendo que las habilidades y actitudes para la docencia se fortalezcan e incrementen.
Asimismo, Solís María, Núñez Claudia, Contreras Inés, Vázquez Nelson y Ritterhaussen Sylvia (2016) determinan que el proceso de inserción profesional de los docentes involucra la adaptación al sistema educativo y sus normas desde lo General hasta lo particular, es decir, los egresados de docencia habrán de habituarse a todo lo relativo al centro educativo donde se desenvolverán laboralmente. La inserción profesional docente trae consigo una serie de desafíos entre la formación adquirida y la realidad educativa, impidiendo o limitando, por ejemplo, aspectos como la innovación en los métodos de enseñanza debido a las pautas que definen la actividad educativa de una institución o bien la actitud, el comportamiento o la disposición de los estudiantes. En palabras de los autores, la inserción profesional docente es un “choque” entre los aspectos teóricos y lo que realmente se ejecuta en la práctica educativa cotidiana.
Requisitos para la inserción profesional docente
Por lo que se refiere a los requisitos solicitados para los docentes egresados, es bien sabido que como elementos indispensables, el perfil debe cubrir las competencias propias para la docencia; en este tenor, Torres Alma (2014) describe que las competencias con las que el docente ha de contar se relacionan con la capacidad de medrar en los estudiantes los conocimientos, las habilidades y actitudes que han de desarrollar durante su proceso de vida tanto personal como social; además, el docente constituye un agente fundamental para la formación de ciudadanos que habrán de insertarse en las labores sociales, considerando y respetando la diversidad cultural que existe; aunado a ello, los profesores deben comprometerse con su labor orientada a la mejora educativa, mediante la constante actualización y capacitación para desempeñar su profesión.
Luego de revisar brevemente las competencias docentes, otros de los requisitos legalmente requeridos y que actualmente (2019) son imperativos para el desempeño de la profesión docente, son el título y cédula profesional, elementos que de ser faltantes, denegarán el acceso a la inserción profesional docente.
Respecto a los requisitos solicitados para el ingreso del personal docente en el ramo de la educación básica, se hizo un breve análisis del capítulo II de la actual Ley General del Sistema para la Carrera de Maestras y Maestros, el cual específica claramente en la sección 1 del artículo 39, fracción quinta:
“…Los elementos multifactoriales que se tomarán en cuenta, como parte de este proceso, comprenderán, entre otros:
- Un sistema que permita apreciar los conocimientos y aptitudes necesarios del aspirante para lograr el aprendizaje y desarrollo de los educandos, considerando el contexto local y regional de la prestación de los servicios educativos;
- La formación docente pedagógica;
- La acreditación de estudios mínimos de licenciatura;
- El promedio General de carrera;
- Los cursos extracurriculares con reconocimiento de validez oficial;
- Los programas de movilidad académica;
- Dominio de una lengua distinta a la propia, ó
- La experiencia docente”…
Ley General del Sistema para la Carrera de maestras y maestros (2019) pp. 15-16
En relación al apartado anterior, se puede observar que entre los elementos que se solicitan como parte del proceso a seguir para que los docentes adquieran un lugar dentro del sistema educativo, se mencionan: la acreditación de los estudios de licenciatura, mismos que se plasman en el título y cédula profesional y la experiencia docente; estos dos puntos son los que principalmente provocan obstaculizar el ingreso de los profesionistas de la educación a las aulas puesto que implican procesos administrativos que requieren tiempo y dinero.
Uno de los incisos determina al promedio General de carrera como un factor central, sin embargo, cómo se puede considerar a un docente egresado con calificaciones destacadas si finalmente los trámites del título y la cédula son los que al final de cuentas adquieren una mayor importancia al momento de seleccionar al personal docente idóneo; esto nos lleva a cuestionar por qué realmente no se le da una misma valoración a los elementos que se consideraron relevantes para la inserción de los profesores. Sin lugar a dudas se trata de un asunto burocrático, tal y como como estima García (2006).
A fin de concluir el tópico sobre los requisitos para la inserción del docente en el sistema educativo, conviene enfatizar que aunque los egresados cuenten con las facultades requeridas para impartir clases, la documentación sigue siendo un factor que detiene a muchos de los egresados hoy en día y dificulta notablemente la posibilidad de hacer valer el derecho de trabajar y aportar a la educación mexicana.
Problemáticas en la inserción profesional docente
Como resultado de lo expuesto en el punto anterior, la documentación incompleta y la falta de experiencia son probablemente las problemáticas más sobresalientes que se desprenden a partir de los requisitos que se solicitan para el ingreso de los docentes al marco laboral. A continuación, se ampliará esta visión mediante las fuentes de información consultadas con las que, a mi juicio personal, coincido totalmente.
Como punto inicial, Roldán Nayeli (2019) habla de una cuestión sumamente influyente en relación a obtener el título profesional. Menciona que al menos en el estado de Chiapas, la SEP no ha otorgado este documento vital para la contratación no sólo de los profesores sino también para los egresados del área de salud y derecho, debido a una carencia de una plataforma digital, lo que ha dejado sin título a los egresados desde hace ya un año. Este tipo de situaciones se encuentran fuera del manejo o de la intervención de los egresados, causando, desde luego, un grave problema para ejercer su derecho de acceso al trabajo.
Así mismo, Reyes Luis (2011) asevera que la inserción profesional de los docentes principiantes implica un cúmulo de sentimientos encontrados, ya que los recién egresados se encuentra Generalmente el interesados o muy motivados para su desenvolvimiento en el medio educativo, sin embargo, esta transición de la etapa de estudiante a profesor ocasiona tensión ante la gran responsabilidad de dirigir a un grupo de estudiantes y contribuir a su desarrollo. Además, los profesores novatos se enfrentan a la necesidad de aprender continuamente de tal manera que incrementen las facultades para la enseñanza, configurando así su identidad como profesores.
En continuación con la idea planteada por el autor anterior, la problemática para los nuevos docentes es notable, puesto que aunque han desarrollado las habilidades, capacidades y actitudes necesarias para la docencia, la práctica es la que realmente los conducirá hacia la búsqueda de sus propias metodologías de enseñanza, seleccionando los recursos y estrategias que sean más convenientes para su grupo. Definitivamente, implica una serie de retos sustanciales como el manejo y control del grupo y ser los facilitadores o las guías de aprendizaje para sus educandos.
Igualmente, Reyes Luis (2011) precisa que la inserción profesional de los docentes que debutan en el proceso de enseñanza-aprendizaje, entraña una cohorte de componentes ideológicos y contextuales, mismo que determinan de qué manera se llevará a cabo esta transición hacia la práctica docente. Dicho argumento y los anteriores del autor ya citado, permiten, entonces, vislumbrar el alto grado de influencia de las ideas políticas que confeccionan el ingreso de los profesores novatos, de esta forma, se retoma el contexto mexicano que si bien tiene un punto a su favor al condicionar la entrada de docentes sin experiencias previas, no han elaborado algún programa que permita apoyar a los egresados de la formación docente.
Propuestas para la solución de las problemáticas que incurren en la inserción profesional docente
De acuerdo a Reyes (2011) quién realizó un excelente trabajo de investigación para su tesis doctoral “Profesores, principiantes e inserción profesional a la docencia. Preocupaciones, problemas y desafíos”, propone que se elaboren políticas que apoyen a los profesores recién egresados de formación pedagógica o normalista, según sea el caso. Elaborar un programa que determine que pautas pueden auxiliar a los maestros que necesitan proliferar la experiencia en el trabajo áulico, sería una solución que otorga la oportunidad de mejorar como profesionales de la educación, iniciando la vida laboral con capacitaciones que potencialicen las habilidades, aptitudes y actitudes adquiridas durante la formación profesional.
Personalmente, estimo que una vía para dar solución a la problemática que confrontamos los estudiantes de pedagogía al culminar la licenciatura, es autorizar las clases muestras como un medio evaluativo, durante cierto periodo de tiempo, una semana, por ejemplo, podría ser un buen comienzo para valorar las capacidades que profesor debutante puede desempeñar en el aula, verificando las áreas en las que sea sujeto a capacitación. Además una opción, en mi opinión, forzosa, sería disminuir el tiempo de espera en los trámites administrativos de titulación, cédulas o certificados de calificaciones o bien, dar el mismo peso de importancia a las cartas de pasante o constancias de estudios para poder comenzar el recorrido profesional.
Conclusión
Con base en las aportaciones de los distintos autores que dieron sustento al tema principal y de acuerdo a mi experiencia personal, se destaca que la labor del docente, sobre todo de aquellos que acaban de egresar y se encuentran en trámites de titulación, genera una problemática latente en México; una de las condiciones más notables para cumplir con el ejercicio de la docencia, es la experiencia, misma que se limita o se sujeta a la normatividad oficial, que incluye contar con la documentación completa, aspecto que va impidiendo que los recién egresados puedan adquirir dicha experiencia.
En definitiva, se requiere una nueva configuración de las líneas que definen los requisitos que se solicitan para el ingreso profesional docente; no solamente lo establecido políticamente permite valorar la capacidad que se tiene al egresar, se pueden considerar otras alternativas a fin de brindar oportunidades laborales a los nuevos profesionales de la educación.
Dentro de mi experiencia personal, he encontrado este tipo de restricciones para mi ingreso al marco de la docencia; debo mencionar que la vocación para esta tarea tan seria e importante la identifiqué desde temprana edad y hacia ello dirigí mi camino profesional; me destaqué por ser una alumna muy constante y disciplinada, responsable y dedicada, muchos de mis profesores lo avalan; considero que son muchos los alumnos que se encuentran en la misma situación que yo, alumnos que se esforzaron muchísimo durante su formación académica y se desmotivan ante las políticas que delimitan la posibilidad del ingreso al área docente, que si bien son un factor administrativo, impactan fuertemente en la docencia.
Referencias
- García, Carlos “Inserción Profesional Docente: problemas y éxitos de los profesores principiantes”, Sevilla 2006. Recuperado de: http://www.ub.edu/obipd/docs/politicas_de_insercion_a_la_docencia_del_eslabon_perdido_al_puente_para_el_desarrollo_profesional_docente_garcia_c_m.pdf
- Ley General del Sistema para la Carrera de Maestras y maestros. (Septiembre 30 de 2019). Diario Oficial de la Federación, Nueva Ley DOF 30-09-19. Recuperado de: http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/LGSCMM_300919.pdf.
- Roldán, Nayeli (2019) “Egresados de Chiapas tienen un año sin cédula profesional porque la SEP no tiene plataforma digital”. Animal político. Recuperado de: https://www.animalpolitico.com/bbc/popocatepetl-vuelo-klm-cdmx-atlantico/
- Reyes, Luis (2011) “Profesores principiante e inserción profesional a la docencia. Preocupaciones problemas y desafíos”. (Tesis doctoral). Universidad de Sevilla, Sevilla.
- Solís, M., Núñez, Claudio, C., Contreras, Inés., Vázquez, Nelson y Ritterhaussen Sylvia (2016). Inserción profesional docente: problemas y éxitos de los profesores principiantes. Recuperado de: https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0718-07052016000200019
- Torres, Alma., Badillo, Manuela., Olinda, Nadina y Ramírez, Elia (2014) “Las competencias docentes: el desafío de la educación superior”, recuperado de: http://www.scielo.org.mx/pdf/ie/v14n66/v14n66a8.pdf