La Importancia del Desarrollo del Lenguaje En Niños
El lenguaje es un sistema que permite expresar intenciones y contenidos relacionando significados y sonidos. El uso del lenguaje implica compartir conocimientos, por lo que los hablantes cuando se comunican deben expresar de forma cooperativa sus intenciones y contenido, ello significa situarse y mantenerse en contextos compartidos y seguir normas tácitas de uso.
Es preciso mencionar algunas nociones básicas del desarrollo del lenguaje, como es el caso de la pragmática la cual hace referencia a que es necesario un contexto cultural y un contexto cognitivo para el uso del lenguaje, porque además de compartir conocimientos los hablantes cuando se comunican deben expresar de forma cooperativa sus intenciones y contenidos. Por otro lado, la semántica se refiere a cómo se realiza la significación mediante el lenguaje; mientras que la morfología de una lengua recoge el modo como se construyen las palabras y qué combinaciones de morfemas son posibles y cuáles no. La sintaxis es el sistema de reglas que gobiernan la estructura de las oraciones, es decir que se ocupa de la combinación de palabras.
Cuando se presentan dificultades en la adquisición del lenguaje o en el desarrollo de los conceptos mencionados anteriormente, en niños que no evidencian problemas neurológicos, cognitivos, sensoriales, motores ni socio-afectivos, teniendo en cuenta los medios actuales de diagnóstico en las diferentes disciplinas, se hace referencia al trastorno especifico del lenguaje (TEL).
Este concepto tiene una evolución significativa la cual se ve influenciada por el contexto, las características del mismo y los parámetros de evaluación en conjunto con los manuales de clasificación. Es posible que en primera instancia se presente un retraso simple del lenguaje, el cual puede llegar a desembocar en un retraso específico del lenguaje y terminar en un trastorno específico del lenguaje. Sin embargo, con la intervención oportuna y un contexto estimulante, las dificultades pueden disminuir o desaparecer.
El retraso simple del lenguaje se trata de una inmadurez de 6 meses de retraso respecto al desarrollo típico, es decir que las primeras palabras aparecerán entre los 18 y 24 meses, pero el tiempo de retraso no suele exceder entre 6-8 meses. Cuando logran las 100 palabras, la mitad son sustantivos, una cuarta parte estereotipos y el resto léxico funcional; sin embargo, esta inmadurez suele corregirse cuando entran en el sistema educativo. En el retraso simple del lenguaje, la expresión aparece más alterada que la compresión, que incluso es calificada como normal por algunos autores. “En la expresión es característico el trastorno fonológico. Las emisiones lingüísticas aparecen como poco inteligibles porque se altera la estructura silábica de las palabras y se sustituyen, omiten o agregan fonemas.” Por ejemplo, en una conversación con un niño de 3-5 años se le plantea ¿Dime qué animal es este? El responde “a perro”, continúa con la siguiente pregunta ¿Dónde vive el perro?, el niño responde “a casa.
Por otro lado, el retraso específico del lenguaje aparece a los 3- 4 años, donde pueden haber dificultades de acceso al léxico, realizan oraciones incomprensibles, producen omisiones nominales y verbales. Estas dificultades crecen cuando aumenta la complejidad del contexto, lo que produce que en la comprensión se pueda presentar rupturas comunicativas frecuentes por motivos léxicos, sintácticos y/o pragmáticos. En síntesis, se encuentran muy retrasadas o estancadas las primeras combinaciones de palabras, inician con frases muy simples, por lo que la evolución es lenta hacia la oración compleja.
El siguiente ejemplo de conversación hace referencia a un niño con retraso específico del lenguaje. Se le pregunta al niño ¿Cómo es el perro de papá?, responde “negro”, continúa con la siguiente pregunta ¿Y el gato de mamá?, responde “blanco y también un gato negro, es papá y mamá”, ¿Los dos son de color negro?, niño responde “negro yyyy la mamá blanco, un gato blanco”. Si estas dificultades no lograron ser superadas evolucionan hacia el trastorno específico del lenguaje.
El trastorno específico del lenguaje (TEL), es una alteración significativa en la adquisición y desarrollo del lenguaje, que no está justificada por ninguna causa física, neurológica, intelectual ni sensorial, en unas condiciones sociales adecuadas. Se caracteriza por limitaciones en la capacidad para aislar, identificar y memorizar los sonidos del habla y el orden en el que son emitidos, por lo que tiene consecuencias en la adquisición de las primeras palabras. Sobrepasa los 6 meses con respecto al desarrollo típico entre los 5 y 6 años.
Por ejemplo, cuando se le pide al niño relatar una historia, un cuento o los sucesos del día, debido a estas dificultades en el lenguaje lo hará de la siguiente manera: “la niña se come helado ayer” “saber que la manzana es una fruta” “el perro mirió con unas abejas y un montones. Y salieron volando alto”
Finalmente es importante mencionar que las causas de los trastornos del lenguaje no están completamente definidas, aunque se considera como factor influyente la carga genética familiar y el ambiente social. Sin embargo, en todos los casos se debe constatar que el niño no tenga daños neurológicos, discapacidad intelectual, que no presenta sordera y que no se le ha privado de estímulos. El pronóstico es variable y pueden darse casos que se recuperan por completo, otros que lo hacen más adelante y que afectan de manera significativa al aprendizaje; pero cuanto más temprano sea identificado menor probabilidad de persistencia tendrá.
En el sistema escolar actual y en la inclusión del alumnado con TEL, en la mayoría de las veces no se sabe cómo abordar esta situación, ya que los profesores no tienen la suficiente información y/o formación para poder ayudar a estos niños a obtener un aprendizaje óptimo. Hoy en día existe una gran necesidad de mejorar la calidad y la inclusión de estos niños en la escuela, lo cual será abordado en el siguiente apartado
