La Influencia De Jeremy Bentham En La Vida De John Stuart Mill
Introducción
Uno de los personajes más representativos en el estudio de la economía mundial John Stuart Mill, posee una serie de textos los cuales han transcienden a través de los años, esto debido al enfoque único e ideas innovadoras que este transmitió en su época (Cuevas, 2003). La influencia de dos personajes icónicos en los orígenes de pensamiento de J. S. Mill son James Mill su padre y Bentham amigo de la familia los cuales instauraron el método deductivo el cual establece que para poder establecer argumentos consistentes en relación a la política solo se necesita entender ciertas características que desarrollan los individuos en la sociedad. Y así fue posible la creación de la Teoría de Gobierno gracias James Mill. No obstante, la formación ideológica de J.S. Mill fue influencia por la ideología francesa del año 1700, diversos movimientos ingleses, y además la ideología de Henri de Saint-Simon y Auguste Comte. Ahora bien, para poder profundizar el origen del pensamiento de Mill, es necesario tomar en consideración tres características fundamentales: en primer lugar, la influencia que tuvo J.S. Mill por parte de Jeremy Bentham; en segundo lugar, su respecto al tema económico; y finalmente, su filosofía social.
Desarrollo
La influencia de Jeremy Bentham
Jeremy Bentham idealista de un sistema de gobierno en cual tenía como base la democracia representativa y la libertad como eje central donde se establece que “La sociedad consta de numerosos individuos (o familias), disfrutando cada uno de la seguridad de las personas y de las propiedades establecida y asegurada por el sistema legal y por el gobierno” (Rosen, 2011, p.25).
Aunque J.S. Mill en sus inicios compartió aquellos ideales y pensamientos de Bentham, con el paso del tiempo se replanteo los argumentos los cuales sustentaros los orígenes de la democracia representativa debido a que esta:
No necesariamente incrementaría la seguridad, porque el poder colocado en las manos de la mayoría la capacitaría para oprimir a las minorías. La idea de que un gobierno popular era simplemente una fuerza benigna en tanto que poder limitado de la nación sobre sí misma y, por consiguiente, no podría ser opresivo, ignoraba el hecho vital concerniente a la tendencia de las mayorías a oprimir a las minorías. (Rosen, 2011, p.26)
Ahora bien, los conceptos de obligación y sanción de J.S. Mill tienen influencia de las percepciones de Bentham. En donde es posible relacionar los conceptos estableciendo como eje central que las sanciones son necesarias para que los integrantes de la sociedad respeten los parámetros planteados por el gobierno (Corella, 2006).
Finalmente, J.S. Mill le brinda unas palabras a Bentham en las cuales hace a alusión a que “Inglaterra se encontraba en deuda no solamente por la mayor parte de las ideas importantes que generaron y que circularon entre los intelectuales de su tiempo, sino porque revolucionaron las formas de pensar e investigar” (Villarespe, 2002, p.107).
“Al igual que Bentham, Mill era hedonista e interpretaba la felicidad como el saldo entre placer y dolor” (de Ferrán, 2006, p.128). No obstante, se creía que J.S. Mill era partidario de la filosofía de Bentham relacionada al placer en el ser humano:
Los seres humanos sólo están motivados para actuar por deseos de placer. Por tanto, las acciones se llevan a cabo con la perspectiva de obtener ese resultado. La conducta del ser humano está gobernada tanto por el propio interés y las pasiones, como por las simpatías o antipatías hacia otras personas. (Torres, 2006, p.15)
Pero Mill interpreta que el placer que sienten los individuos es relativo y puedes verse reflejados en que en algún momento ciertos placeres son más gratificantes que otros (Torres, 2006). Es así que, es posible establecer que “las ideas idas de Bentham viven hoy en gran parte gracias a, y a traces de, la versión o interpretación de J.S. Mill” (Paniagua, 1982, p.7).
La filosofía social de J.S. Mill
El compromiso de la responsabilidad representa el eje central de la filosofía social de J.S. Mill en la cual debe estar representada con la participación activa individual de cada elemento de la sociedad. Para que así, sea posible alcanzar crecimiento social óptimo (Abaroa, 2011) (Sen, 2003). De esta manera, es posible identificar que cada persona tiene la capacidad y es el responsable de perfeccionar el aspecto social (Yaylali, 2019) (Bagú, 2018). En este sentido, la filosofía de J.S. Mill “representa una pieza fundamental para el desarrollo social (Lasalle, 2007).
La filosofía social en la que Mill dice incluir la suya impone unas leyes de funcionamiento y desarrollo que superan en ocasiones los trabajos de la política y de la razón humana, ya que determinan el alcance y las limitaciones de estas. La actitud de Mill va a ser general entre los intelectuales del siglo XIX, y supone una quiebra en el proyecto ilustrado de emancipación humana a través de la razón: el principio transformador no va a ser la razón del individuo que, dueño de su destino, decide y actúa, mediante la política, la moral o el derecho, realizando los cambios pertinentes que conduzcan a su emancipación, como individuo racional y libre. (Ruiz, 2005, p. 196-197)
Es así que, debido a su filosofía J.S. Mill obtuvo una gran cantidad de seguidores de la antigua Inglaterra, la cual promulgaba la erradicación de la miseria para que de esta manera en las sociedades puedan producirse un crecimiento exponencial de la inclusión de la política (Sanmartín, 2006). Con ello, reafirma pensamiento de justicia en la que los integrantes de la sociedad puedan ejercer su libertad política. En otras palabras, “la búsqueda del equilibrio significaba la erradicación de la pobreza, no la imposición de una sociedad geométricamente igualitarista, pues ello comportaría la destrucción de la misma democracia que Mill luchó por proteger primero, y expandir después” (Sanmartín, 2006, p.127).
Ahora bien, en relación a la libertad personal de cada ser humano J.S. Mill establece lo esencial que esta es en el bienestar de cada integrante de la sociedad (Pavón, 1969) (Pallas, 2007). La cual ayuda a un desarrollo paulatino de la misma, con el fin de se puedan alcanzar todas las metas propuestas a lo largo del crecimiento personal (Tasset, 2007). Además, es necesario comprender que “el papel de la educación es algo fundamental para Mill, algo de lo más importante que puede hacer un gobierno a favor de individuo” (Jiménez,2010, p.140). Sin embargo, saber llevar el control de nuestras emociones y sentimientos juegan un papel fundamental para que los integrantes de la sociedad puedan establecerse de una mejor forma y poder alcanzar su máximo progreso (Mill, 2017) (Pintos, 1997). Sin embargo, tratar temas relacionados al maltrato que han sufrido las mujeres a lo largo de la historia son un punto focal importante dentro de su filosofía social (Ruiz, 2006).
John Stuart Mill no se contentó con denunciar la situación de opresión de la mujer incidiendo en la falta de justificación de su exclusión del disfrute de los derechos políticos. Trató de cooperar activamente en la eliminación de ese mal social, asumiendo la reivindicación del voto femenino en su actividad pública, primero como candidato y después como parlamentario. (Martín, 2006, p.108)
Asimismo, “defendió las cooperativas de producción en competencia mutua como modo de implicar al pueblo en la gestión” (de Blas, 2006, p.79). Otro de los campos en lo que se vio involucrado, J.S. Mill va relacionado con:
El principio de libertad de Mill indica que el individuo tiene libertad de acción sobre todo aquello que no afecte a los demás. La única razón legítima por la que una comunidad puede imponer límites a cualquiera de sus integrantes es la de impedir que se perjudique a otros miembros. En lo que no importa a nadie más que a uno mismo, la libertad de acción es absoluta. Mill destaca que es imprescindible que los gobiernos protejan estas libertades. Una sociedad sólo se puede entender como una auténtica sociedad de personas libres si cualquiera de estas libertades, comprendidas dentro de la categoría general de libertad de acción, son respetadas y garantizadas de forma absoluta. (Torres, 2006, p. 108)
El enfoque económico de J.S. Mill
J.S. “Mill considerado como el último representante de la economía clásica” (Gaytán,2005, p.89), también otra de “sus labores más importantes dentro de la ciencia fue la de sistematizar los avances en el pensamiento económico sobre la producción y el comercio -que venía madurando desde el siglo XIII- y exponerlos de forma didáctica” (Márquez & Silva, 2008, P.62). Además, Mill fue parte de los creadores partidario de la economía socialista, en el cual se promulga la igualdad como precepto de las distintas sociedades, donde el gobierno fuera el principal partidario para una repartición justa en las sociedades (Ruiz, 2005). Sin embargo, “en un principio su posición con respecto al socialismo fue de duda sobre la innovación, los incentivos, la distribución y la evolución probable de la población bajo un sistema socialista” (Redón, 2001, p.95). Para lo cual era fundamental realizar grandes modificaciones en cada uno de los aspectos de la sociedad (Aznar, 2007). Además, las ideas de J.S. Mill se fundan en gran medida a sus diversas “teorías del crecimiento, de la distribución y del valor, en un contexto de escasez y con la existencia de rendimientos decrecientes” (COUYOUMDJIAN, 2015, p.55).
De manera que, los sistemas educativos aportan de manera significativa en torno a los diferentes ámbitos de la productividad. Sin embargo:
Mill se apartó de Smith al afirmar que los mecanismos del mercado no funcionan en el mundo de la educación; el hombre no es riqueza, estando al servicio del hombre, el concepto de capital no es aplicable al hombre, siendo el demandante de educación incapaz para juzgar su cualidad productiva. (del Campo & Salcines, 2008, p.48)
Del mismo modo, J.S. Mill “no acepta de su época la creencia de los fisiócratas y de algunos mercantilistas los cuales veían en las leyes de la producción como de la distribución hechos naturales sobre las cuales el hombre no puede incidir sino cumplir” (Cardona, 2008, p.99).
Es decir, Mill no acepta la creencia generalizada de los economistas de la época, donde lo único que importaba dentro del análisis económico era la deducción lógica que permitiera la formulación de leyes o principios en el uso racional de los factores sin importar lo social en el hombre o la moral. Si bien para Mill la técnica del análisis matemático es necesaria en la maximización de la riqueza y de la producción, también lo es el análisis de la filosofía social en la economía política, lo cual nunca deberá ser olvidado o pasado por alto. (Cardona, 2008, p.99)
Conclusión
En conclusión, los orígenes del pensamiento de John Stuart Mill se fundamente de diversas ideologías las cuales perfecciono con el paso del tiempo. Llegando a ser influenciado por dos grandes personajes de la época como fueron su padre James Mill y Jeremy Bentham. Sin embargo, de este último fue fundamental para que Mill alcance la cúspide de su ideología ya que, aunque en algún momento se presentaros discrepancias sobre algunos conceptos y teorías de Bentham este significo un gran aliado al momento de plantear sus teorías. Ahora bien, en relación a su filosofía social Mill fue muy claro porque promulgaba una ideología donde las bases fundamentales de esta, están dadas por la responsabilidad, justicia, libertad entre otros. Con el único fin de que cada individuo participe activo de la sociedad pueda lograr tener una mejor calidad de vida. Finalmente, con respecto al tema económico difiere con los intelectuales de la época ya que Mill tiene a la igualdad como el eje central por el cual cada gobierno deber ser responsable de una distribución justa de la riqueza.