La Universidad Desafía A Franco En 1956
En 1956 la universidad de Madrid se revelan y le plantan cara al régimen de Franco, un grupo de universitarios que estudiaban derecho se reúnen y crean un manifiesto en el que hablan de libertades y de reconciliación nacional, temas que más tarde iban a crear grandes disturbios que acaban con heridos, detenidos y con el cierre de la universidad.
Después del 56 se inicia una nueva etapa en España porque la gente de arte que estaba estudiando en la universidad empiezan a ver a España desde otro punto de vista. Los sucesos de febrero sorprendieron al régimen y Franco clasificó como jaraneros a los estudiantes universitarios. Terminada la guerra civil el panorama de la universidad es desolador debido a que la muerte o la cárcel a expulsado a muchos profesores y los claustros son intelectualmente pobres y están poco valorados. Entre 1939 y 1944 se convocan oposiciones porque se necesitan más profesores debido a la falta de estos, en aquella epoca se decia que era una universidad sin maestros.
En 1943 se crea una nueva ley que establece que las universidades quedan bajo el cargo de la iglesia católica, el SEU nace con un propósito político no profesional y se introducen las armas en la universidad y esto crea conflictos. Entre los estudiantes el ambiente es anodino por la cantidad de uniformes, sotanas y monjas con mucha falta de lectura e iniciativa. En los años 50’s se incorpora una nueva a la universidad una nueva generación de estudiantes que llegan tras enseñarles en los colegios una formación religiosa basada en la disciplina y en los principios de la falange. Eran los hijos de los vencedores, rondaban los 20 años y no participaron en la guerra civil peor si habian parecido sus consecuencias. Dentro de la universidad de Madrid la facultad de derecho se convierte en el centro de todas las movilizaciones a las cuales iba gente de varias partes de España y aprovechaban las horas libres que tenían para ser licenciados en ciencias políticas. En los años 50 España sale del aislamiento internacional y en 1953 Franco firma los acuerdos con el Vaticanos y también con los Estados Unidos para el uso de las bases militares y 2 años más tarde España es admitida como miembro de las Naciones Unidas, esto causó cierta estabilidad en el régimen.
En 1951 Franco hace un cambio de gobierno y Joaquín Ruiz Giménez pasa a ocupar el ministerio de educación, con este nombramiento se inicia un periodo de tímida apertura en las universidades. Los cambios que propone Joaquín Ruiz generan desconfianza en el movimiento y en la iglesia lo cual generó cierta hostilidad contra su ministerio por parte de sectores conservadores e hicieron también una campaña muy dura contra el ministerio de educación y su política. En 1952 es coronada Isabel II, reina de Inglaterra y dos años después anunció su intención de visitar Gibraltar y los medios de comunicación españoles inician una campaña contra la presencia británica en Gibraltar. El SEU convoca una manifestación patriótica y unos 25.000 estudiantes acuden a esta y les incitan a ir a la embajada inglesa y al atravesar la Plaza de Colón hubo disparos de la policía los cuales algunos dijeron que fueron disparos de fogueo, acción por parte de la policía que fue totalmente innecesaria debido a que no entendían cómo podían estar alentando una manifestación y a la vez preparándose para reprimirla. Al día siguiente la prensa publica un artículo distorsionado de la actuación policial y los ánimos se exaltan aún más y miles de estudiantes deciden ir en manifestación al ministerio de educación en la calle Alcalá y cuando estaba allí vieron que era el momento adecuado para redirigir la manifestación hacia un punto más importante y se dirigieron a la Puerta del Sol e hicieron una sentada, los primeros brotes antifranquista empiezan a salir. La llegada de Enrique Mujica a la facultad de derecho junto a Ramón Tamames y Javier Praderas formarán un trío inseparable, estos jóvenes se dieron cuenta de que la cultura ofrece un rendija para empezar a agitar el régimen. Mujica propone la celebración de unos encuentros entre la poesía y la universidad y es consciente de que tiene que atraer a personas relevante del mundo de la cultura y obtiene el apoyo del rector de la universidad Pedro Laín y de un ex falangista. Durante 6 meses en 1954 desfilan por la facultad de derecho los mejores poetas de la España de entonces.
Tras el éxito de estos encuentros de poesía deciden convocar la celebración de un congreso de escritores jóvenes para finales de año pero el congreso al final no se celebra porque los sectores más ultraconservadores lo impiden porque empiezan a percibir que ahí hay algo que escapa a su control y esto es lo que hace que el ministerio de educación frene ese proyecto. El curso 55/56 se inicia con una mala noticia, el fallecimiento de José Ortega que era el último referente para los estudiantes y los comunistas organizan un homenaje laico, miles de personas se concentran en la universidad de San Bernardo y despues van en manifestación hasta el cementerio, por esas fechas el rector de la universidad de Madrid escribe un documento al gobierno en el que avisa de la inquietud que se vive en la universidad. Franco se va dando cuenta de que la sociedad y especialmente los jóvenes se están cada vez más alejando de su ideario y se da cuenta de que España estaba cambiando. A finales de enero de 1956, Mujica, Pradera y Tamames deciden convocar un congreso nacional de estudiantes para el desarrollo de la cultura y la formación de los estudiantes, también eran conscientes de que esto exigía la vuelta de los profesores exiliados de sus cátedras. Para que este congreso tenga una mayor resonancia deciden antes redactar un manifiesto, Tamames es el encargado de su elaboración.
Este manifiesto va dirigido directamente al gobierno de la nación e invitan a todos los estudiantes a que los suscriban y el 1 de febrero se lee en las facultades y en los colegios mayores. El primer desafió al franquismo ya estaba en marcha, el manifiesto crea la alarma entre los dirigentes del SEU, mientras la policía empieza a moverse y el 3 de febrero interrogan a algunos de los autores del escrito y al primero que llaman es a Tamames porque era el más conocido. Empiezan a correr críticas entre la gente acusando a las autoridades educativas a las que acusan de estar de estar creando un clima de corrupción moral y de desviación ideológica entre la juventud universitaria. El 6 de febrero el SEU hace un último esfuerzo por volver a tomar el control y convoca a todos los estudiantes y profesores de la universidad de derecho, la asamblea se convierte en un caos y los estudiantes abuchean a los representantes del SEU.
Para salvar esta situación el decano de derecho Manuel Torres propone convocar una asamblea más pequeña formada por representantes de todos los cursos elegidos previamente, esto que plantea el decano equivale a unas elecciones libres, esto irrita a los altos cargos del SEU que esa misma tarde deciden impedir las elecciones previstas para el día siguiente. Al impedir que estas elecciones no se celebraran se produce un enfrentamiento entre estudiantes y estudiantes falangistas, durante este enfrentamiento se rompen algunos símbolos falangistas y esto es interpretado como una provocación, por la tarde de ese 7 de febrero la secretaría general del movimiento da la orden de movilizar a sus centurias para vengar la profanación de sus símbolos. El miércoles 8 de febrero, grupos de asalto de la falange, miembros de la guardia de Franco y falangistas no universitarios irrumpen violentamente en el viejo caserón y los asaltantes obligan a los estudiantes a cantar el ‘cara al sol’.
Es la primera vez que la universidad es asaltada de esa forma y la noticia se corre hasta llegar a otros centros, el día 9 es fiesta y no hay clase pero los estudiantes acuden a la universidad para protestar por el asalto del día anterior, también acuden los falangistas que vuelven a rodear el edificio, mientras tanto en otro punto de la ciudad el SEU y la falange como cada año rinden homenaje a Matías Montero muerto durante la segunda república. Mientras tanto en el viejo caserón los universitarios siguen acorralados por los grupos de asalto y tras horas de tensión los universitarios logran romper el cerco falangista y cantando la canción ‘triste y sola’ logran salir a la calle y se deciden marchar en manifestación por el centro sin saber que en otro punto de la ciudad unas docenas de falangistas también estan reunidos y finalmente ambos grupos se encuentran, la policía cargó y se empezaron a escuchar varios disparos.
Los heridos son trasladados al hospital y los falangistas exigen un escarmiento rápido y contundente y empieza a correr el rumor de que habrá una noche de los cuchillos si uno de los heridos falangista muere y el propio ministro de educación se desplaza a la clínica para conocer el estado del joven. Por la ciudad empiezan a correr listas negras con nombres entre los cuales estaban los responsables de educación, esa misma noche la policía detiene a 7 promotores del manifiesto. El 10 de febrero se declara el estado de excepción y se suspenden varios artículos del fuero de los españoles y se vuelve a ordenar el cierre de la universidad.
La prensa del régimen empiezan a hablar de conjura comunista y los detenidos son encarcelados en Carabanchel, días después cae el resto de la célula universitaria. La represalias provocan una crisis de gobierno, Franco cesa al ministro de educación y con el también cae toda la cúpula educativa y el secretario general del movimiento. El 20 de febrero la universidad abre de nuevo sus puertas mientras que en el hospital Miguel Álvarez se recupera de sus heridas, los promotores del manifiesto van a pasar entre rejas tres meses, en la universidad y en el ámbito educativo se iba a producir un retroceso. Tras la tormenta llegó la calma pero la universidad no volvería a ser la misma que era. Los acontecimientos de febrero de 1956 no lograron el aperturismo deseado pero si movilizaron a sectores sociales y dejaron al descubierto la debilidad del régimen, en 1956 la universidad despierta y ya no se volverá a dormir hasta el final de la dictadura.
Todos estos acontecimientos claramente fueron un antes y un después en la historia de España. Los estudiantes hicieron lo que tenían que hacer contra el gobierno de Franco para defender sus derechos como personas. Fueron muy valientes y a pesar de saber que podrían perderlo todo se lanzaron a las calles y fueron poco a poco desmontando el régimen franquista.