Loa Aspectos Básicos de la Personalidad Humana
A lo largo de los años, el ser humano se ha cuestionado quién es, por qué es de un modo y otra persona en de uno diferente; es por ello que ha generado distintas repuestas o hipótesis. Pero ¿Sabemos qué nos define?, ¿Qué es nuestra personalidad?, ¿Nuestras actitudes se pueden cambiar?, ¿Nacemos con una personalidad definida?
Así, estas inquietudes y cuestionamientos nos ayudarán a entendernos y comprender al resto, respetar las diferencias de conductas o pensamiento. Si nosotros nos conocemos, podremos entablar relaciones interpersonales más sanas. En las siguientes líneas, se dará a conocer los aspectos básicos de la personalidad que incluye la definición, el aspecto fisiológico de la personalidad y las causas de los cambios de esta.
La personalidad se refiere a la suma total de las formas de actuar o sentir típicas de un individuo. Para Nordegen (2016) “La personalidad es una combinación de cómo te percibes y cómo te perciben los demás.” (p. 45). También, precisa que el ambiente en el que una persona crece va a tener un papel uy importante en la construcción de su personalidad; por ejemplo, si un niño crece en un medio violento, es muy probable que tenga una personalidad violeta. Por ende, la parte biológica y el contexto social son ámbitos importantes para la personalidad. Además, según Davis y Palladino (2008) “La personalidad se refiere a un patrón estable de pensamiento, sentimiento y comportamiento que distingue a una persona de otra” (p. 47). Del mismo modo, sostienen que nuestra personalidad f tienen dos grandes características que son la distinción y la relatividad.
La personalidad está relacionada principalmente con dos partes importantes de nuestro cuerpo que son los lóbulos cerebrales y el cerebelo. Por un lado, los lóbulos cerebrales que juegan un papel indispensable en nuestra personalidad son el frontal, temporal y parietal. En primer lugar, el lóbulo frontal es el encargado de planear el futuro, ponerte límites y tener autocontrol en circunstancias, además, nos hace morales porque ayuda a evaluar las acciones y permite percibir lo que tras personas siente: En segundo lugar, el lóbulo temporal “Recibe y procesa información de los oídos, contribuye al balance y el equilibrio, y regula emociones y motivaciones como la ansiedad, el placer y la ira” (Morris y Maisto, 2011, p. 66). Entonces podemos decir que es el centro de sentimientos y memoria. Por último, los lóbulos parietales reciben toda la información de los sentidos; por eso, ayudad a reconocerte a ti mismo, incluyendo tu cuerpo y mente. Por otro lado, el cerebelo cumple un rol fundamental en ciertos patrones de personalidad; incluso, “Es responsable de nuestro sentido del equilibrio y de coordinación de las acciones del cuerpo para asegurar que los movimientos se produzcan en secuencias eficiente” (Morris y Maisto, 2011, p. 62). Es decir, te impide hacer cosas inapropiadas en determinados momentos.
Las dos principales causas para que se generen cambios en la personalidad de manera inmediata o progresiva son los daños cerebrales y el contexto familiar-social. En primer lugar, las lesiones o daños cerebrales pueden provocar cambios drásticos o radicales en la personalidad dependiendo el área afectada. Por ejemplo, el caso de Phineas Gage es una muestra clara de los cambios producidos por un accidente, puesto que una barra de metal atravesó toda su cabeza afectando principalmente el lóbulo frontal. Davis y Palladino (2009), refiriéndose a las consecuencias de tal accidente, afirman: Antes del accidente, Gage había sido un trabajador excelente que se llevaba bien con todos y realizaba sus planes. Tras el accidente, nunca los concretaba, utilizaba vulgaridades al hablar, se negaba a escuchar lo que los demás decían si interferían con lo que él quería y siempre estaba malhumorado. (p. 64)
Finalmente, el ámbito social y familiar en el que una persona crece y se desarrolla va a causar que la personalidad vaya cambiando. “No resulta sorprendente que los rasgos de la personalidad, desde Sigmund Freud en adelante, hayan destacado el ambiente familiar temprano en el desarrollo de la personalidad única de cada individuo” (Gray, 2008, p. 551). Es decir, los rasgos o patrones de personalidad de un niño pueden verse afectados de acuerdo al modelo que observan en su entorno social-familiar, generando que el niño moldee su personalidad de una manera diferente a la inicial.
En resumen, la personalidad se refiere a la suma total de las formas de actuar o sentí que so típicas en un individuo. Además, la personalidad está relacionada principalmente con dos partes importantes de nuestro cuerpo que son los lóbulos cerebrales y el cerebelo. Asimismo, las dos principales causas para que se generen cambios en la personalidad se manera inmediata o progresiva son los daños cerebrales y el contexto social-familiar.
Debemos tomar en cuenta que cada día vamos cambiando; por lo que conocernos, entendernos es de gran importancia para poder mejorar como personas y sociedad. Respecto a ello, el poeta y escritor alemán Hermann Hesse afirma que “No todo el mundo tiene la oportunidad de convertirse en una personalidad; la mayoría siguen siendo prototipos, y nunca experimental el rigor de convertirse en un individuo” (s.f.)