Marxismo: Modalidad De Un Pensamiento Opuesto Al Capitalismo

Introducción

Las críticas marxistas a estos tres “instrumentos” que tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de la población en el sistema internacional, parten la idea que el sistema internacional está basado en relaciones de producción, es decir, relaciones de desigualdad. Desigualdad que se forma a través del sistema capitalista que, a su vez, genera una clasificación entre países: desarrollados y subdesarrollados. Partiendo con estas premisas, las críticas a la Ayuda Oficial Desarrollo (AOD) por parte de la corriente marxista están dirigidas a la modalidad en el cual esta ayuda es aplicada.

Desarrollo

A través de esta, se está generando una nueva forma de dominación con la cual las potencias mundiales son capaces de penetrar e influir en las estructuras internas de los Estados a los cuales vienen dada una ayuda. Para la teoría de la dependencia, las desigualdades se miden a través de las condiciones de intercambio comercial a nivel internacional. Por ejemplo, con multinacionales provenientes de economías fuertes, es decir, países desarrollados, que explotan a trabajadores de países subdesarrollados, creando una dependencia. Un ejemplo en el cual la dependencia está presente.

Es la elaboración de productos a un precio inferior en los países subdesarrollados  y vendidos en los países desarrollados a un precio estándar, que saturando el mercado serán vendidos en los países subdesarrollados con un precio más alto. Por otra parte, a la Agenda 2030 se le critica el hecho que no establezca otro mecanismo económico que no sea el del consumismo, es decir, que se plantean muchos objetivos a largo plazo, pero ¿A qué precio? Para poder alcanzar un desarrollo sostenible, por ejemplo, hay que utilizar una cantidad elevada de recursos que en gran medida provienen de los países.

Los cuales se pretende ayudar y esto genera una pérdida económica para tales países, además de un círculo vicioso de consumo y producción. Es oportuno recordar que la Agenda 2030 con respecto a los objetivos propuestos no obliga a que ningún Estado los cumpla, de hecho, todo está basado en la voluntariedad de estos, porque obviamente no hay una entidad superior que obligue a los Estados a realizar determinadas acciones, de lo contrario se violaría su soberanía. Por último, las críticas a la tasa Tobin son acerca del mal uso que se le está dando. La tasa Tobin no es un mecanismo obligatorio de aplicar.

Conclusión

En conclusión, al no ser aplicado por todos los Estados, el riesgo es que se vea afectada la economía de los países que sí la apliquen, con una fuga de inversiones. En países como España, que han introducido tal medida, se ha reducido la transparencia de las operaciones del mercado, es decir, se pueden operar ilegalmente transacciones financieras con el fin de evitar tal impuesto. Utilizar solo está medida contra la pobreza en los Estados no es suficiente. La tasa afectará a las pequeñas y medianas empresas que verán reducidos sus ingresos por el aumento de las transacciones financieras.