Marcel Duchamp: Maestro de Artes Visuales del Siglo XX
Marcel Duchamp es uno de los artistas más influyentes del siglo XX. Originario de Blainville, Francia en los años de 1880, y bajo la influencia de sus hermanos mayores, quienes dejaron sus carreras de derecho y medicina para convertirse en artistas, Marcel persiguió el arte como profesión. Sin embargo, lo que diferencia a Marcel de sus hermanos y de los otros artistas de esa época fue su sed por romper con paradigmas preestablecidos en el mundo del arte visual de inicios del siglo XX. Se sabe que retó dichos paradigmas y que por eso se considera uno de los artistas más controversiales en su momento, pero lo que no se sabe es el por qué lo hizo, o específicamente lo que lo inspiró a retar el arte de su época.
La pregunta de investigación de esta monografía es la siguiente: ¿Qué convierte a Marcel Duchamp en una figura de ruptura dentro de las artes visuales del siglo XX? Con esta pregunta se explorará específicamente lo que hizo Duchamp para romper con los esquemas, al igual que las diferentes fuentes de inspiración que tuvo a lo largo de su vida, las cuales lo llevaron a convertirse en el artista influyente que fue. Esto se logrará con el apoyo de diferentes libros sobre el tema, así como de ciertas páginas de internet que hablan de Marcel Duchamp y del impacto que tuvo en su momento. Se analizarán obras como la de ¿Por qué no estornudar? (1921), Desnudo bajando una escalera (1912), El gran vidrio (1915- 1923) y La fuente (1917).
La elección de centrar esta investigación en Marcel Duchamp y los paradigmas de su época, se debe a que él ha sido una figura clave para los movimientos artísticos del último siglo. Estos movimientos han dejado huella en el pasado, y continúan haciéndolo en el presente. Sin Duchamp no entenderíamos de dónde vino el arte contemporáneo de nuestra época ni el cómo se crean obras nuevas con esta tendencia. Hoy en día, los ready-mades de Duchamp siguen siendo temas a debatir sobre lo que es el arte y lo que no. Las obras previamente mencionadas merecen un análisis para entender su significado y el impacto que tuvieron al haber sido creadas.
Marcel Duchamp nació el 28 de julio de 1887 en Blainville, Normandía, Francia. Fue el tercero de seis hermanos y al igual que su hermanos mayores, al terminar sus estudios escolares decidió irse a París a estudiar arte. Empezó en el mundo de la pintura retratando a su familia y pintando paisajes de Francia. En sus inicios se ve la influencia del impresionista Monet. El impresionismo predominaba en esa época pero Duchamp se percató de que esto no era para él y decidió convertirse en caricaturista para el periódico Le Courrier français y Le Rire. Hacía dibujos divertidos pero burlones de la vida cotidiana de París. Estos estaban enfocados en juegos de palabras, ya sea visuales o verbales, y siempre sin color. Desde aquí podemos ver la personalidad de rebeldía de Marcel. Él no quiso seguir con la tendencia impresionista y pintar lo que le enseñaban en la escuela, lo cual lo llevó a renunciar y enfocarse en hacer comentarios que no necesariamente hacían una obra de arte ¨bonita¨, como se estaba acostumbrado.
De 1906 a 1913 fueron años cruciales para el futuro de la pintura en París. El fauvismo estaba originando en Francia, el cual se caracterizó por su empleo provocativo de los colores y porque cada pintor creaba sus obras como una experiencia personal cargada de espontaneidad y frescura. El fauvismo careció de manifiesto y se desarrolló únicamente entre 1904 y 1908. Era una tendencia artística que ponía fin al impresionismo.
El protagonista del fauvismo fue Henri Matisse, quien fue una de las primeras inspiraciones de Duchamp. Lo que le llamó la atención fue la manera de Matisse de emplear la pintura. La utilizaba como una herramienta y por lo general tenía prioridad sobre el sujeto que estaba siendo pintado. Simplemente sacaba la pintura de sus contenedores y la aplicaba sin más a su lienzo. El sujeto que pintaba era completamente independiente a los colores que utilizaba y esto le gustó a Duchamp, pues disfrutó la idea de utilizar la pintura como algo ya hecho, sin necesidad de mezclarse para encontrar el tono perfecto que coincidiera con el dibujo.
De aquí se puede decir que se inspiró Duchamp para su término de ready-made, ya que eso se refiere a tomar un objeto ordinario sin fines artísticos y emplearlo para crear una obra de arte. Aunque la pintura que utilizaba Matisse sí tenía fines artísticos, Duchamp se inspiró en esto por el hecho de que no se tenía que manipular antes de utilizarse, sino que se tomaba y se aplicaba directamente del tubo al lienzo. Ningún otro artista había hecho esto hasta este punto en la historia del arte.
El cubismo, desarrollado entre 1907 y 1914, reaccionó en contra de los colores brillantes del fauvismo y se concentraron en la estructura de los objetos. Trata las formas de la naturaleza por medio de figuras geométricas y líneas rectas, principalmente. Así como en el fauvismo, los cubistas enfatizaban la intervención del artista de la realidad: los artistas empezaron a recrear sus sujetos en lugar de simplemente copiarlos. Esto también inspiró a Duchamp, y lo llevó a hacer una de sus creaciones más importantes: Desnudo bajando una escalera en 1912. Esta fue la primera obra que cambió la vida de artista.
La figura del desnudo no parecía desnudo, ni siquiera parecía humano. Cuando Duchamp lo mandó al Salon des Indépendants, una asociación de artistas independientes, fue rechazado por el cubista Albert Gleizes, quien era parte del comité de la asociación. Él contactó a los hermanos mayores de Marcel y les pidió que lo convencieran de retirarlo voluntariamente, pues no era lo que el círculo Cubista quería en su exhibición, ya que era considerado muy ¨futurista¨ por contener movimiento. Los hermanos llevaron a cabo su misión y Marcel accedió sin armar un escándalo, pero no estaba feliz. Ese fue el momento en que se dió cuenta de que no podía pertenecer a un grupo, sino que la única persona en la que podía confiar era en sí mismo.
Algunos años después, esta misma pintura estaba convirtiendo, en Estados Unidos, a Duchamp en el artista moderno más famoso de Europa. La obra fue seleccionada para el Armory Show en Nueva York, el cual contenía más de 1500 obras de artistas americanos y europeos. Cuando se inauguró la exhibición, la sección más concurrida fue la de los artistas extranjeros. Los espectadores estaban sorprendidos y fascinados por los trabajos modernos que violaban las reglas del arte. Desnudo bajando una escalera fue la que causó más conmoción, ya que muchos espectadores no podían distinguir al desnudo; no encontraban la forma humana. Era algo completamente diferente a lo que se había visto previamente en el arte. Incluso lo compararon con una pila de palos de viejos palos de golf y con una explosión. Los críticos se burlaron de la exhibición y alentaban al público a atender y verlo como si fuera un circo. La parte de los artistas extranjeros fue tan controversial que la voz se corrió a otras ciudades, tales como Boston y Chicago. El público en general no entendió la obra, sin embargo, los artistas estadounidenses estaban muy interesados y hambrientos por este nuevo rompimiento del arte tradicional y académico.
En 1912, cuando Duchamp tenía apenas veinticinco años, su carrera como pintor estaba a punto de terminar. Fue alrededor de ese año que se interesó en temas diferentes a los que antes trataba, tales como las matemáticas y la física. Su interés despertó en parte porque se acababan de hacer nuevos descubrimientos que habían cambiado y cuestionado los cimientos del pensamiento científico hasta ese momento. Este era precisamente lo que necesitaba Duchamp después de su rechazo por parte de los Cubistas y de sus hermanos: tenía que empezar de cero y con enfoque diferente.
En octubre de 1911, Duchamp había conocido a Francis Picabia, quien lo introdujo a un tipo de vida fuera de los parámetros de los artistas convencionales. Formaron una buena amistad y en 1912, Picabia lo invitó a una obra de teatro, la cual fue una experiencia que iba a cambiar por completo el rumbo de su carrera como artista. La obra era una adaptación de una novela escrita por Raymond Roussel en 1910. Roussel fue una gran inspiración para Duchamp porque su obra presentó algo que no era común que presenciara en su vida: un trabajo completamente independiente. Un trabajo que no tuviera nada que ver con grandes nombres o influencias importantes. La obra de Roussel era como poesía para Duchamp. De él sacó la inspiración para hacer su Gran Vidrio. Este fue el momento en que Duchamp se dió cuenta de que era mejor para un artista ser influenciado por un escritor que por otro artista.
Roussel introdujo a la vida de Duchamp figuras de máquinas que tenían por lo menos algunas similitudes con figuras humanas, las cuales podían pintar y hacer otras actividades. Estas fueron las ideas de Roussel que más impacto causaron en las obras de Duchamp. Su maquinaria inventiva, sus experimentos científicos artificiales y la alteración de los sentidos para crear nuevos significados fue lo que invadió la imaginación de Duchamp y lo llevó a sus nuevas creaciones.
Otra gran inspiración para Marcel Duchamp fue Henri Poincaré, matemático y físico, quién publicó varios libros teóricos. Estos libros descubrían cambios conceptuales que ocurrieron después del invento de los rayos X y el fenómeno de la radioactividad, especialmente en el átomo y sus leyes. Con la ayuda de Poincaré, Duchamp insertó la física dentro de su arte para devaluar la ciencia racional. Hacia el final de 1912, la física había entrado a una etapa de desarrollo a la que Poincaré caracterizó como un ¨desglose de principios¨, un ¨periodo de duda¨ y ¨una crisis seria¨ en las ciencias. Todo lo que se creía era cuestionado. Se desintegraron los axiomas de la física y se cuestionaba la existencia de conocimiento científico objetivo. Poincaré explicó que ningún teorema se puede a considerar verdadero. ¨No hay una sola realidad que podamos tomar por sentado¨, lo cual inspiró a Duchamp, pues ninguna obra de arte que hizo a partir de ese momento iba por sí sola, sino que cada una de ellas pertenecía a un todo: se reflejaban y proyectaban las unas a las otras.
Ya que Duchamp tendía a buscar inspiración en obras literarias, la encontró en el poema de ¨Lifting Belly¨ de Gertrude Stein, escrito en 1915-17. Irónicamente, el poema tenía parámetros cubistas, ya que no era una línea continua sino una serie de imágenes y sentimientos. De este poema salió la inspiración para hacer ¿Por qué no estornudar?, la cual es una obra compuesta por muchos cubos de mármol que parecen cubos de azúcar, un termómetro y una jibia. Todo esto estaba contenido en una jaula para pájaros hecha de madera. Esta obra era para Dorothea Dreier, pero al ver cómo terminó, la rechazó. Se la regresó a su hermana, quien la mantuvo unos años en su colección de obras de Duchamp, pero posteriormente la regaló a otro coleccionista sin recibir nada a cambio. La obra no fue un éxito. Casi nadie la ha visto, pero los que sí la llegaron a ver no entendían su mensaje, pero al mismo tiempo sabían que estaba muy peculiar como para o tener significado alguno. El mismo Duchamp no ayudó a encontrarle significado ya que lo único que decía acerca de ella era una descripción general y explicaba cómo los cubos de mármol engañaban al espectador porque se ven frágiles y livianos pero en realidad son fuertes y pesados. Igual explicaba que el termómetro estaba ahí adentro para medir la temperatura. En otras palabras, Duchamp era muy ambiguo con su explicación y no decía mucho acerca del mensaje de la obra.
Esto lo vemos a lo largo de su vida y en todas las obras que crea. Duchamp era una persona de pocas palabras y no le gustaba decirle al público lo que tenían que entender de su arte. Él simplemente toleraba cada interpretación que le daban a su arte.