Relación entre el Arte y el Diseño Industrial
Introducción
Para ocuparnos de este tema, podemos decir que las relaciones entre arte e industria implican la consideración del grado de reproducción de un objeto y de la calidad del proyecto. El diseño no se refiere a la producción artesanal, sino que conceptos más amplios reconocen la utilización del arte como instrumento de expresión del diseño, destacando el potencial transformador de su intervención en entornos tradicionales.
Esta discusión teórica tiene divisiones importantes para la aplicación de políticas públicas y de metodologías de diseño en regiones menos industrializadas, una vez que acompaña las tendencias sociales emergentes y posibilita una búsqueda coherente del desarrollo sostenible, incluyendo no solo la cuestión ambiental, pero también la social y la económica, tal como exalta la Comisión Mundial sobre Medio Ambiente y Desarrollo.
Desarrollo
Algunas cuestiones fueron fundamentales para el acercamiento entre Arte y Diseño Industrial ocurrido a principios del siglo XX, la expansión del capitalismo y los consecuentes cambios en la sociedad industrial así como además de la Primera Guerra Mundial que llevó al mundo burgués a una profunda crisis espiritual y material. Como respuesta, algunos artistas se plantearon como objetivo superar el abismo existente en la cultura entre ‘arte y vida’ y varios movimientos artísticos de la vanguardia histórica de la vertiente constructiva se demandaron eliminar ese vacío volviéndose hacia la industria y la producción en masa.
Los llamados movimientos constructivos vieron en la máquina y en la tecnología la posibilidad de proporcionar bienes accesibles a las capas más pobres de la sociedad y la aproximación entre Arte y Diseño Industrial en este momento debe ser entendida a partir del concepto de cultura de masa y la evaluación positiva de la tecnología por parte de los movimientos artísticos.
Ambos guiaron la relación que entonces se estableció entre arte y la producción de espacios y objetos de uso cotidiano. El Arte no se convirtió en Diseño Industrial ni el Diseño Industrial se convirtió en Arte; pero ambos establecieron un fuerte diálogo que los retroalimentaba. Diversas vertientes del Movimiento Constructivo surgieron en Rusia el Suprematismo y el Constructivismo de Vladimir E. Tatlin y Aleksandr M. Rodchenko; sobre todo la Bauhaus inicialmente bajo el liderazgo de Walter Gropius.
Para entender la Bauhaus, es necesario remontarse más de diez años antes de su creación: la fundación de la Deutscher Werkbund en la ciudad de Munich en 1907. El Werkbund fue una asociación de diferentes profesionales – como artesanos, diseñadores y funcionarios – que estaban preocupados por los estándares de calidad del diseño alemán y que deseaban igualar la producción del país con las grandes naciones industrializadas: Inglaterra y Estados Unidos.
El Werkbund fue uno de los muchos intentos por artistas europeos para tratar de entender cómo podría el arte de las relaciones y de la industria en una sociedad que cada vez más ambicioso desarrollo tecnológico. Su trabajo histórico para la electrotécnica AEG, principal empresa alemana de la época, fue responsable de repensar diversos aspectos de la producción industrial de la compañía:
La estética de los productos, el logotipo y la publicidad de la empresa, el uniforme de los empleados e incluso los edificios. Las turbinas de la planta, obra principal del arquitecto y director artístico de esta empresa con AEG, Peter Behrens, fue el primer edificio de acero y vidrio del país, pero todo este movimiento tuvo que ser interrumpida debido al inicio de la Primera Guerra Mundial.
Él entre guerras en Alemania fue un período definitivo para la historia mundial. Las imposiciones severas del Tratado de Versalles, que responsabilizó al país por todos los daños de la Primera Guerra, fomentaron una sensación de humillación y de resentimiento que asolaba a la población. Por un lado, los ideales nazis hervían bajo la fachada del nacionalismo exagerado y, en pocos años, comenzarían un nuevo conflicto de proporciones aún mayores. De la otra, elites intelectuales nacían y se volvía en varias áreas de conocimiento, como la Escuela de Frankfurt y el Instituto de Psicoanálisis de Berlín.
“La Bauhaus sentó las bases normativas y patrones de lo que hoy conocemos como diseño industrial y gráfico; puede decirse que antes de la existencia de la Bauhaus estas dos profesiones no existían como tales y fueron concebidas dentro de esta escuela. Sin duda la escuela estableció los fundamentos académicos sobre los cuales se basaría en gran medida una de las tendencias más predominantes de la nueva Arquitectura Moderna, incorporando una nueva estética que abarcaría todos los ámbitos de la vida cotidiana: desde la silla en la que usted se sienta hasta la página que está leyendo”.
Aunque existen diferencias importantes entre las concepciones y propuestas de estos movimientos y escuelas, conecta la búsqueda por la integración del trabajo de arte a la ciencia ya la técnica en el proceso de transformación social. Sin embargo, el diseño industrial como disciplina se viene desarrollando y modificándose desde el siglo XIX.
Conclusión
El otro momento, que aquí nos interesa analizar está relacionado con el cambio de nomenclatura de Diseño Industrial para Diseño. Aunque pueden sonar como sinónimos apuntan a contextos y proyectos muy diferentes: Industrial Design traducida como Diseño Industrial está fuertemente relacionado con el ideario y prácticas de las cuales la Bauhaus fue pionera y está directamente asociada a la matriz racional-funcionalista.
Este cambio de nomenclatura está fuertemente vinculado a la crisis del Proyecto Constructivo Moderno. Podemos entender esta crisis, apuntando rápidamente a algunas de las críticas hechas en la década de 1960 al Diseño Industrial, que engloba el concepto de Funcionalismo y se extiende a la Arquitectura y al Urbanismo moderno. Las críticas hechas contra el racionalismo práctico del moderno diseño funcionalista están relacionadas con dos factores decisivos: el crecimiento económico y la ampliación de la sociedad de consumo de masa y la severa crítica al comportamiento de consumo en las sociedades capitalistas de bienestar.