Otoya Yamaguchi, El Joven Japonés Que Saltó A La Fama
Introducción
Otoya Yamaguchi, fue un joven japonés que saltó a la fama por matar al político Inejiro Asanuma durante un debate que estaba siendo transmitido por televisión. Yamaguchi era miembro de un grupo que simpatizaba con las ideologías de la derecha más radical en Japón.
Las razones por la que Yamaguchi atacó al líder político nunca se conocieron. Con solo 17 años logró ingresar con un sable corto típico de la cultura japonesa al recinto donde se estaba llevando el debate por las elecciones parlamentarias. Se cree que Yamaguchi, por su simpatía con el ultra nacionalismo, quería que Japón regresara a la línea de ideas más tradicionales. Mientras que Inejiro era el máximo responsable del partido socialista de Japón.
Desarrollo
Todo ocurrió en el salón Tokio Hibiya el 12 de octubre de 1960, donde estuvieron presentes más de mil personas con el objetivo de escuchar los planteamientos políticos del momento. El ataque quedó grabado gracias a las cámaras de la compañía de televisión NHK, cuyo nombre puede ser traducido como Sociedad de Radiodifusión Japonesa.
Yamaguchi se suicidó solo unos días después del ataque, mientras se encontraba detenido. Según la información que dio la policía el joven nunca explicó que lo motivó a asesinar al político. El asesinato provocó un gran número de manifestaciones después en contra de la policía por no haber garantizado la seguridad del político del partido socialista. La noticia fue rápidamente replicada en los medios de todo el mundo.
Asesinato
El 12 de octubre de 1960 Inejiro Asanuma era uno de los protagonistas del debate político que se estaba realizando ante más de mil personas en Tokio. Asanuma era el líder del Partido socialista de Japón. Además, la empresa NHK se estaba encargando de transmitir en vivo las palabras del político en el salón Hibiya.
De un momento a otro reinó la confusión en el lugar y se pudo ver a Otoya Yamaguchi, que había asistido al evento como parte de la Sociedad Patriótica del Gran Japón. El joven de solo 17 años apareció por la izquierda de Asanuma con una espada de samurái de unos 30 centímetros de largo. Yamaguchi en el primer intento clavó su espada en el estómago del líder político. En ese momento algunas fuerzas de seguridad detuvieron a Yamaguchi, mientras otros asistentes se preocupaban por la salud de Asanuma.
Yamaguchi fue evacuado del lugar por el lado derecho del escenario y Asanuma fue llevado al hospital. Ambos abandonaron el recinto por lugares diferentes según las notas de prensa de la época. La respuesta de los asistentes, a pesar de haber sido lo más rápida posible, no fue suficiente para evitar la muerte de Asanuma una hora después de que ocurriera el ataque.
Precedentes
La información sobre Yamaguchi es nula previa al asesinato. No se conocen sus motivaciones ultranacionalistas. Solo se supo que Yamaguchi formaba parte del grupo Uyoku dantai, una asociación radical de partidarios de derecha, totalmente contrarios a las ideas de Asanuma. Entre las ideas que planteaba Asanuma normalmente estaba que Estados Unidos era enemigo en conjunto de China y de Japón. Era uno de los candidatos para ocupar un puesto en lo que sería el parlamento de Japón.
Yamaguchi era miembro de la Sociedad Patriótica del gran Japón que quería el regreso de las ideas y los gobiernos tradicionales, que tenía más de 10 años perdiendo fuerza. Rechazaban el estilo de vida de naciones extranjeras, en especial de los países occidentales. Uno de los asistentes al evento era el Primer Ministro de Japón, Hayato Ikeda, quien estaba sentado cerca de donde ocurrió la escena.
Víctima
El político Inejiro Asanuma fue la víctima de Otoya Yamaguchi. Murió dos meses antes de cumplir los 62 años. Tuvo un rol muy importante al hablar sobre las bondades del socialismo a nivel cultural y económico.
No fue bien visto por los conservadores por sus críticas a los Estados unidos. Después de su muerte el partido socialista de Japón se dividió entre políticos de izquierda y de derecha. Tras su muerte ocurrió muchas protestas en las calles del país. Entre ellas, 15 mil personas marcharon hasta la estación de policía de Tokio para exigir la dimisión del director del organismo por su ineficiencia para garantizar la seguridad del político.
El embajador de Estados Unidos en Japón en seguida manifestó sus condolencias por la noticia del asesinato y calificó el acto como un suceso deplorable. A pesar de la mala relación entre Asanuma y los políticos estadounidenses, el gobierno americano mostró sus respetos por la muerte del japonés y mostró su oposición el acto cometido. Rusia y China también se manifestaron. Los primeros culparon a los fascistas por el acto de horror, mientras que en los medios asiáticos se habló de un asesinado contratado.
Muerte de Yamaguchi
Otoya Yamaguchi, con solo 17 años, fue enviado a una prisión juvenil. Luego de tres semanas en el recinto el asesino preparó una combinación de pasta de dientes y agua con la que pudo escribir en una de las paredes: “Siete vidas por mi país. Larga vida para su majestad el emperador”. Con la sabana de su cama logró formar varias tiras que le sirvieron para hacer una especia de cuerda con la que se colgó desde la lámpara de la celda. Fue considerado un héroe por algunos grupos de la extrema derecha. Durante el entierro le rindieron honores y sus padres recibieron múltiples regalos en honor a su hijo.
Héroe
Cuando la noticia se dio a conocer en Estados Unidos medios como The Guardian informaron mal su nombre y lo identificaron como Futaya. 50 años de que Otoya Yamaguchi cometiera el crimen fue recordado por un pequeño grupo en el salón Hibiya donde ocurrió el asesinato. Uno de los miembros del grupo Dai Nippo Aikoku-to reconoció que le rendían honores a Yamaguchi por haber logrado la justicia.
Conclusión
La foto en la que quedó retratado el asesinato, obra de Yasushi Nagao, recibió que el fotógrafo ganara el premio Pulitzer un año más tarde de lo ocurrido. En ella se ve el momento en el que Yamaguchi ataca con el sable de samurái a Asanuma. Nagao también fue premiado con la World Press Photo.