Problemáticas Planteadas en la Película 'Los Miserables'
Redactaré un ensayo de los miserables, una película que pertenece al contexto propio de principios del siglo XIX. La primera parte narra hasta el año 1822, y se sitúa en el pequeño pueblo de Vigau, donde va a parar Jean Valjean, quien posee una fábrica, llegando a ser alcalde. La segunda parte ocurre en París, décadas después de la Revolución Francesa de 1789, cuando el protagonista se muda allí con Cosette. Debido a los períodos convulsos que se viven, numerosos jóvenes deciden rebelarse. Mario se presenta como revolucionario, como personaje principal de la gestación de la rebelión que tendría lugar en Julio de 1832, también llamada las Tres Gloriosas o Revolución liberal.
Los miserables se ambienta en una época en la que aún existen numerosas diferencias entre los diferentes estratos de la sociedad. Se observa, además, la vulnerabilidad de la mujer en la historia de Fantine, su cosificación y total dependencia a un hombre. Los disturbios en París ponen de manifiesto el descontento social ante el modelo político, económico y social establecido. Provocando el paso de la monarquía absolutista de Carlos X a la monarquía liberal de Luis Felipe I en Francia.
Esta jerarquía social está caracterizada por un pueblo llano, formado por la mayoría de la población, sumida en la pobreza. Y una clase noble y aristócrata, así como principales puestos del clero, que acumulaban las riquezas, privilegios y poder.
Frases más llamativas de la película
- Tiene a Dios, él es su padre, usted su creación
Esta frase me llamó especialmente la atención, se la dice el protagonista a Fantine, e intenta así luchar contra esa obsesión de cumplir lo que otros esperan, ser convencional. Me ha hecho recordar que nunca estamos solos, al final todos tenemos un mismo Padre con el que podemos contar en todo momento: Dios. El mismo que nos creó, y nos cuida. No necesitamos nada más que a él. Además, como obra suya, somos capaces de ayudarnos mutuamente a pesar de no existir lazos “de sangre” entre todos los habitantes del mundo.
- Sea cual sea la realidad, mucha gente morirá
Esta frase me pareció especialmente dura. Saber que no está en tu mano la vida de todo el mundo, que todas tus acciones tienen consecuencias, no hay partes buenas o malas en guerras, batallas o enfrentamientos, solo hay violencia y dolor.
Me parece, además, que, en nuestra actual realidad, tiene mucha relevancia, ya que, con la guerra en Siria, había una tendencia de apoyar a un bando, condenando a otro, sin darnos cuenta de que ambos han tomado un camino dañino, los refugiados son la prueba viviente de ello.
- Tienes amor. Es el único futuro que Dios nos da
Sin duda esta oración ha sido para mí la más “reveladora”. Me ha hecho pensar que no hay destino escrito, no hay un futuro esperado. Nuestra única meta debería ser la felicidad, y conseguirla es fácil gracias a ese amor que Dios nos ha dado, ese amor que tenemos que tratar de dar al prójimo cada día, un amor que crece al compartir y que es suficiente para saber que ese futuro, vivir, merece la pena.
- Me has vencido.
No intento vencerte, solo quiero vivir en paz.
Esta frase entre Jean Valjean y Javert en su último diálogo me pareció un claro resumen de toda la trama. Ese egocentrismo del capitán, que le hace pensar que todo gira en torno a él. Todo lo concibe como una competición, su vida solo tiene ese fin: ganar a toda costa. No cree que todo lo que otras personas quieran sea vivir felices. Me ha hecho reflexionar que tengo que intentar alejarme de ese competitivismo actual, ese “machacar al otro”, todo es mucho más sencillo.
- Contigo robé la felicidad, no me importa pagar por ello
Esta es la frase con la que Valjean se despide de su hija adoptiva, Cosette. De nuevo destaca la felicidad como fin de la vida. Algo que da sentido a todo, algo por lo que merece la pena sufrir e incluso morir. Eso me ha hecho pensar qué es para mí la felicidad, cómo puedo conseguirla, o si tal vez es algo que solo perseguiré.
Problemática que plantea la película y soluciones a la misma
En la película se desarrollan varias problemáticas, todas ellas consecuencia del pasado como convicto de Valjean. Al principio, y tras haber conseguido la célula de ex convicto, el protagonista, renovado tras su experiencia en casa del obispo, se instala en Vigau, un pequeño pueblo donde se hace propietario de una fábrica, del que se convierte en alcalde. Todo transcurre con normalidad, parece que ha rehecho su vida, hasta que llega a la ciudad Javert un policía que había sido guardia de Valjean en prisión. Tras varios encontronazos con él, se acuerda de su pasado y le delata en París. Frente a la sorpresa de Valjean, juzgan a otro hombre dándole su identidad y, por lo tanto, Javert cree haberse confundido.
No obstante, todo se complica cuando el protagonista se declara culpable para salvar al inocente que iba a cargar con sus errores. Valjean se ve obligado a huir, no sin antes despedirse de Fantine y prometerla cuidar de su hija Cosette. Cumpliendo su palabra rescata a la niña, terminando en París, donde consiguen estar a salvo de toda persecución.
Se da así un salto de 10 años. “Padre e hija” viven con normalidad hasta que, debido al desafortunado romance de Cossette con Mario, Valjean es descubierto de nuevo por Javert, que se encontraba en París durante dicha época, en un contexto de crisis política (revolución liberal). Esa ansia del capitán por detener al ex convicto le hace infiltrarse en las barricadas, estando a punto de morir a manos de Valjean, quien le deja que escapar.
Aun así, Javert no ceja en su obsesión. Finalmente, todo se resuelve con el suicidio por parte de Javert cuando ya había conseguido su propósito, permitiendo, esta vez, que Valjean viva en paz.
Valores humanos sobresalientes
Es indudable la carga moral de este film. Destacan como valores el perdón, compasión y solidaridad hacia los demás. Esto se observa en primer lugar con la buena acción del obispo, quien le brinda a Valjean una segunda oportunidad. A pesar de todas sus mentiras, cree en él, le apoya y le da todo lo que tiene.
Precisamente esta acción cumple su cometido. El protagonista se vuelve un hombre nuevo, intentando ser como el obispo que le salvó, mostrando esta actitud cuando saca de la cárcel y trata de curar a Fantine, cuidando e incluso dando su vida por Cosette y su felicidad, queriéndola como a su propia hija.
También está presente el valor, que se ve cuando Valjean salva a un simple trabajador que queda atrapado bajo un carro o incluso cuando cede su fábrica a los trabajadores.
Otra importante característica del personaje principal es la honestidad y generosidad. Trata siempre de hacer lo correcto, aunque no sea lo que más le beneficie. Como se ve cuando decide interceder y admitir su culpabilidad, liberando a un inocente que iba a cargar con su delito.
Y sin duda el amor, ese amor del que hablé con una de las frases, un amor que se materializa en su relación con Cosette, por la cual está dispuesta a arriesgar su vida, su libertad, su felicidad. Hasta tal punto que, a pesar de no tener por qué, salva la vida a Mario, el amor de su vida, para que puedan tener una vida juntos.
La utopía del hombre nuevo y sus raíces cristianas
Cuando hablamos de utopía hablamos de algo prácticamente imposible. En este caso, la posibilidad de la existencia del hombre nuevo. Esto es posible gracias, en esta película, a dos momentos en especial, en los que Valjean es dado la oportunidad de convertirse en alguien mejor.
La primera es la oportunidad que le brinda el obispo a Valjean. Aquel al que este llega a agredir y robar. Gracias a la misericordia, generosidad y esperanza del religioso, el ex convicto se da cuenta de que su pasado no tiene que condicionar su futuro, no tiene por qué ser un ladrón toda su vida. Puede empezar de nuevo, eligiendo ayudar a los demás, crecer como persona, demostrarse a sí mismo su valía. Esta experiencia le hace ver que no todas las personas son iguales, existe gente que es capaz de no juzgar, personas que podríamos llamar “buenas”.
Por otro lado, tenemos también la oportunidad que, en este caso, Valjean ofrece a Mario, le salva para que pueda olvidarse de su pasado revolucionario, impide su ejecución y permite que esté con Cosette. Así vemos que el protagonista está dispuesto a dar su vida por salvar al joven, cuando le pide a Javert que deje libre a Mario y permita que le vea un médico, a cambio de entregarse
Vemos que el origen de toda esta “cadena de favores” se encuentra en la buena acción del obispo que, creyendo en el mensaje de Jesús, en dar segundas oportunidades a todos aquellos que había sido tachados de “pecadores”, permite que Valjean se transforme, dándole la oportunidad de ser luz para otras personas. Algo que podría parecer imposible, porque según la mentalidad social “nadie puede cambiar, somos lo que somos”.
Paralelismos evangélicos
Como paralelismos evangélicos caben destacar, en la primera parte de la película, la oportunidad antes comentado que le brinda el obispo a Valjean. Es lo mismo que hizo Jesús, dar a todo el mundo la oportunidad de cambiar. Ese padre bueno que perdona todos los pecados con solo arrepentirte y aspirar a ser mejor. Vemos claramente cómo se cumple la parábola del “hijo pródigo”, en la que el padre perdona al hijo, dándole una nueva oportunidad a pesar de despilfarrar todo el dinero tras irse de casa
Prosiguiendo cronológicamente encontramos la actitud del protagonista, esa generosidad para con las prostitutas y las personas que más lo necesitan, como cuando saca de la cárcel a Fantine y la acoge en su casa. Así como el momento en el que libera al trabajador del carro o cede la empresa a sus trabajadores. Como Jesús, se acercó a aquellos más pobres y marginados, a pesar de ser algo que estaba mal visto, a pesar de saber que sería juzgado, que sus actos tendrían consecuencias.
En la segunda parte de la película, destaca el hecho de que Valjean estuviese dispuesto a entregarse para que Mario disfrute de una nueva vida al lado de Cosette. Él considera que ha vivido y disfrutado suficiente, que su vida a llegado a su fin, y que es el momento de que esa nueva generación viva feliz. Esto se puede asemejar a la entrega de Jesús por nosotros, nuestra salvación, y en resumen, nuestras vidas
Mensaje de la película
El mensaje que intenta transmitir la película es la imposibilidad de vivir una vida perfecta, sin errores ni arrepentimientos, y por ello la necesidad de las segundas oportunidades. Estas pueden marcan un antes y un después en nuestras vidas, ya que podemos decidir entre hacer el bien y llevar una vida dedicada a ayudar a los demás.
También critica esa actitud de persecución hacia los demás, esa que representa Javert, que llega a obsesionarse con capturar a Valjean, hasta tal punto que no vive su vida.
Hay que perseguir la felicidad, una felicidad que solo se consigue cuando comprendemos que los demás no son nuestros enemigos, solo una oportunidad de ser mejores personas al ayudarles y aprender los unos de los otros.
Valoración personal
Este film me ha resultado una muy buena adaptación de lo que es la vida. Te sitúa en un período histórico relevante, dando un mensaje necesario en una sociedad que está cada vez más centrada en la competitividad, que busca el ser mejor que otros, “fastidiar” al otro.
El argumento y la constante tensión que existe debido a la continua huida por parte del protagonista hace que no sea una película aburrida. Aunque debo admitir que hay ciertas partes que se pueden hacer largas. Tengo que destacar esa capacidad de mostrar la bondad y generosidad, valores tan necesarios para la solución de cualquier problema. Es más, podemos comprender lo que es la miseria, ver que es algo que existe y que actualmente se sigue viviendo, aunque nos empeñemos en olvidarlo.
Por otro lado, maneja muy bien los momentos relevantes y trepidantes, antes nombrados, con música de suspense y juegos de luces y sombras. Mi escena favorita es la final cuando Valjean va andando por la calle tras el suicidio de Javert y se van levantando las palomas, ese símbolo de la libertad, esa nueva oportunidad de alzar el vuelo, vivir como persona renovada, al haberse librado de esa cadena que le hacía vivir en el temor y la angustia.
Me parece una película que debido a su mensaje y a la utopía que defiende como panacea: el hombre nuevo. La enseñanza de la importancia de no seguir siempre todas las normas, la posibilidad de adaptarlas, ya que cada persona, cada situación es un mundo, y el concepto de justicia no es tan definitivo como pensamos. Sin duda alguna, me quedado con ganas del leer la obra de Victor Hugo, esperando que esos “personajes miserables” me enseñen un poco más.