Seguridad Y Crisis Alimentaria Mundial

Introducción

Según la FAO, la migración es “el movimiento de personas dentro de su país o fuera de sus fronteras, independientemente de sus motivaciones, si el movimiento es voluntario o involuntario, sus causas y duración”. La migración segura y ordenada contribuye a un desarrollo sostenible y un crecimiento económico, pero a su vez este movimiento presenta desafíos complejos para las personas como lo es la seguridad alimentaria. 

La salud alimentaria abarca muchos aspectos más allá de lo físico, especialmente cuando un evento como la migración afecta los patrones de consumo de alimentos, horarios y actitudes frente a lo que se come, además, los aspectos sociales, emocionales, laborales y económicos influyen directamente en la forma que nos alimentamos.

Muchas de las migraciones son provocadas por situaciones de inseguridad, búsqueda de oportunidades, mejores condiciones socioeconómicas, fenómenos naturales, inestabilidad política, entre otras. Por otro lado, para disfrutar de una vida digna y poder desarrollar sus capacidades y alcanzar sus metas deben tener salud, un derecho declarado por la ONU en el artículo N.º 25 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el cual está vinculado con el derecho a la vida, bienestar, vivienda, alimentación, libertad y otros.

Desarrollo

La migración no es un fenómeno reciente, pero ha ido aumentando paulatinamente hasta tal punto de cautivar la atención mundial. El desplazamiento de personas, ya sea dentro de su país o a través de las fronteras, ha estado ocurriendo durante siglos y recientemente se ha convertido en una característica importante de la globalización.

La migración se considera un determinante social de la salud, asimismo, está condicionada principalmente por las circunstancias que se llevan a cabo, a lo largo de su ruta de migración. La salud de los migrantes puede variar según las características personales, los factores individuales y relacionales, las influencias sociales y comunitarias, las condiciones de vida, las condiciones socioeconómicas, culturales y fenómenos medioambientales.

Un caso en particular que se viene presentando esta situación es en Venezuela debido a una situación política la cual están afrontando, las personas en estado de vulnerabilidad están migrando hacia diferentes fronteras y una de ellas es Colombia, donde el estado ha tenido que brindar recursos y esfuerzos para afrontar esta realidad. La Organización de las Naciones Unidas a través de una encuesta realizada por el Programa Mundial de Alimentos, informó que al menos el 80% de los venezolanos que escapan de la crisis venezolana hasta el territorio colombiano padecen de inseguridad alimentaria.

La inseguridad alimentaria y nutricional tanto real como percibida desempeña un papel significativo en la decisión de migrar de los hogares. Del mismo modo están intrínsecamente vinculadas. La inestabilidad en la oferta de alimentos que experimenta Venezuela en los últimos años se ha profundizado llegando a niveles de crisis aguda durante el 2018 y el primer trimestre de este 2019.

Por un lado el hambre es uno de los factores que ocasionan que las personas tengan que migrar por situaciones de necesidad como en el caso de muchos venezolanos, además de que los millones de migrantes padecen de inseguridad alimentaria, que conllevan a consecuencias en su salud e incluso la muerte. Estos efectos se pueden determinar a partir de las dimensiones de la seguridad alimentaria, en cuanto a la disponibilidad, accesibilidad, adecuación y abastecimiento para el consumo de los alimentos, por lo cual si las personas migran.

 Hay variaciones de producción y productividad agrícola debido a la mano de obra y conocimientos que la tierra requiere y la venta de estas, así mismo, no habría acceso y consumo, puesto que si no hay producción, no hay consumo y al migrar también deben suplir muchas otras necesidades, principalmente para poder sobrevivir. 

Del mismo modo, las condiciones del sistema de salud y la salud pública también enfrentan un deterioro por la falta de medicamentos, vacunas e insumos, a causa de esto, migración de recurso humano en salud, determina que uno de los motivos para migrar sea la búsqueda de atención en salud y la alimentación. Colombia como país cercano, muestra una posibilidad de mejorar su condición de vida para los migrantes venezolanos, asimismo, actúa solidariamente a pesar de las tensiones y xenofobia que se evidencian.

Por eso, es importante plantear que la agricultura y el desarrollo rural sostenible son factores que pueden abordar esas causas profundas de la migración, la cual están inmersos muchos venezolanos, como lo son la pobreza, la inseguridad alimentaria y nutrición, el desempleo y el cambio climático los cuales afectan las condiciones de vida. Estos factores son los principales a los que se debe dar respuesta mundialmente ante este gran desafío migratorio. Debido a esto, el Secretario General de la ONU presentó su informe, ‘En seguridad y dignidad: acerca de abordar los grandes movimientos de refugiados y migrantes’.

Este informe se basa en garantizar los derechos humanos, la seguridad y la dignidad de los refugiados y migrantes. Principalmente hace énfasis en el desarrollo de diferentes políticas nacionales inclusivas para así atraer a los migrantes a la sociedad proporcionándoles acceso a servicios básicos para suplir sus necesidades fisiológicas diarias. 

Por consiguiente de este informe la Asamblea General de las Américas realizó una reunión donde se adoptó la Declaración de Nueva York para refugiados y migrantes la cual aprobó muchos compromisos relacionados con los refugiados incluyendo las mujeres en riesgo y lactantes, niños huérfanos, víctimas de violencia, discapacitados, discriminados y personas víctimas de abuso, además de tener en cuenta muchas enfermedades de transmisión sexual y otras necesidades de atención médica que pueden llegar a sufrir los migrantes.

Se debe implementar un plan respuesta para los migrantes venezolanos que llegan a Colombia, sin embargo, sabemos que existe y persiste la corrupción y xenofobia. Aun así, los gobiernos de alguna u otra manera deben empezar a trabajar en generar las condiciones necesarias para que estas personas consigan oportunidades y así llegar atender toda la población migrante, ya que están expuestas a diferentes factores importantes que los condicionan a no tener una vida plena.

 Implementar políticas nacionales de migrantes donde sea relevante la dimensión de salud, desde el acceso a los servicios de salud para muchas de estas personas que se encuentran en condiciones económicas precarias, esto debe abordarse desde la política, ya que es un factor fundamental el cual puede ayudar o que los sistemas de salud respondan mejor a las necesidades de los migrantes, asimismo, abarcar acciones que aborden la inclusión social y sus condiciones de empleo, educación y vivienda.

Conclusión

En conclusión, la migración seguirá siendo un componente importante en los procesos de transformación de las personas que migran dependiendo de los distintos desafíos a los que se enfrenten, pero independientemente a esto es necesario y urgente una acogida humanitaria para los migrantes, en el caso de los venezolanos, muchos se encuentran con un estado de salud inadecuado.

Donde se identifica la necesidad de acceder a la atención en salud primaria, sexual y reproductiva, medicinas, agua potable y asegurar una alimentación balanceada y por esto, para que todos tengan la posibilidad de alcanzar sus necesidades básicas es necesario que desde el desarrollo y fundamentalmente el compromiso de políticas y programas de salud se aborden estas inequidades, de tal forma que se mejore el acceso a los servicios que requieran para brindarles otra oportunidad de una buena calidad de vida.

Por último, los nutricionistas dietistas deben formarse constantemente de elementos suficientes y actuar interdisciplinariamente, de tal manera que puedan establecer decisiones y reconozcan la importancia y el compromiso que se requieren en estas situaciones para poder tomar acción, al mismo tiempo, articulando la teoría con la práctica profesional y el compromiso social para abordar los escenarios que se van presentando, además de poder contar con la participación en la política, sin dejar de lado el hecho de que la salud y la nutrición van de la mano.