Análisis del Soneto "Un Soneto me Manda Hacer Violante"
Introducción
En el poema Un soneto me manda hacer Violante Lope de Vega hace una composición habitual de un soneto con dos cuartetos, dos tercetos, rima consonante en todos los endecasílabos, etc. Sin embargo, pese a que en la construcción del soneto Lope de Vega mantiene una unidad formal, el lector puede ver que el texto carece de sentimientos. En lugar de mostrar emoción, en cada verso la voz poética va mostrando mediante falsa modestia la dificultad de un encargo que tiene, al igual que el logro que va consiguiendo tras intentar cumplir dicho encargo.
Desarrollo
El poema comienza: Un soneto me manda hacer Violante, que en mi vida me he visto en tanto aprieto. No obstante, el poeta escribió luego: Yo pensé que no hallara consonante, y estoy a la mitad de otro cuarteto. Estos versos enseñan una narración paralela de dificultades y resultados en la misión de la voz poética, la cual se revela que es escribir un soneto. Dentro del soneto la voz poética habla de un soneto (lo que se conoce como la metapoesía) y mientras se va narrando cómo escribir un soneto, el lector puede ver a la vez el desarrollo uno.
Tal como se menciona en el párrafo anterior, las observaciones del recorrido de la voz poética y sus avances van al ritmo en que el lector lee. Pero no solo se aprecia un soneto con formato estructural tradicional con tema innovador, sino que Lope de Vega rompe con esquemas y conceptos literarios establecidos anteriormente también. Esto es un reflejo de una de las ideas en el artículo de Aurora Egido, quien dice que los poetas barrocos:
Cada su modo, rechazaron o transformaron los preceptos heredados y fundamentaron sus hallazgos en el signo de una emulación que pretendía convertir en nuevas reglas los predicamentos del discurso poético.
Según la académica, escritores como Lope de Vega iban fijándose en las reglas de composición poética (en este caso la de un soneto) para criticarlas por completo e inventar nuevas reglas. En Un soneto me manda hacer Violante se realiza dicha crítica partiendo de la ironía del juego cortesano. Esto no es muy sorprendente, ya que la novedad en la creación de géneros y estilos venía apoyada por el invento barroca que iba quitando terreno a la teoría de la imitación renacentista. Es decir que de cierto modo la poesía barroca partía de la imitación a la poesía renacentista, o la utilizaba como punto de partida y referencia para buscar la mezcla y/o contraste de temas, géneros, estilos y en fin, la novedad.
Conclusión
Igualmente, los poetas barrocos utilizaban la teoría de la imitación renacentista como punto de partida para buscar una nueva forma de expresar la hermosura en poesía. Por tal motivo, el pensamiento de Lope de Vega está expresado de una manera cuidadosa y refinada en su poema, consiguiendo armonía entre la estructura de su texto y el tema. La exuberancia es el rasgo caracterizador del barroco, pero superar las expectativas de los lectores forman parte esencial en la creación literaria durante este período.