Análisis De Administración Por Valores
Mientras las cosas iban progresando en las empresas no iban a funcionar los mismos métodos de los ochentas, se fue poniendo de manera imperativa el tomar en cuenta los valores de la empresa y coordinar estos con la misión y visión de la empresa para poder obtener resultados óptimos. Algo que se estaba ignorando, y que hoy es algo imperativo para la supervivencia empresarial es este mismo enfoque de APV. Poder saber para dónde se va, que se va a hacer, cuáles son los principios antes de operar y tener un comportamiento en la organización que se base en los valores de la empresa, antes esto podría ser una estrategia o elección filosófica pero ahora es imperativo para la supervivencia.
Al aplicar este enfoque de APV se puede ver un cambio en el éxito de la empresa, porque se basa en los valores operativos mediante los cuales se hace una declaración más precisa de la misión y los valores. Donde se toman esos valores, se hacen sus fundamentos y lo comunicas a cada parte de la empresa, resultante a esto se ve una mejoría en estas empresas
Esta más que comprobado que si la cabeza de la organización no está bien el resto de la organización no podrá funcionar de manera correcta. Tom fallaba en reconocer que el problema era interno, y mucho menos que podía radicar en él, tanto en su vida laboral como la personal. Es importante que si una estrategia corporativa no nos está funcionando deberíamos evaluar primero nuestras acciones y nuestros factores internos antes de culparlo en los externos y enfocarnos en crear estrategias para responder en base a ello. Si no estamos solucionando el verdadero problema las soluciones no servirán de nada, en varios casos los directivos se muestran renuentes a ser evaluados por un asesor y es precisamente por qué es difícil aceptar que quizás el problema sean nuestras habilidades directivas o la motivación que le damos a nuestros colaboradores y más fácil pensar que es por lo exterior.
No podemos obtener un resultado diferente al que estamos teniendo si no evaluamos la situación, identificamos el origen y cambiamos las estrategias para poder obtener los mejores resultados empresariales. Otro punto a destacar es como la diferencia en las cualidades de cada socio es precisamente la fórmula del éxito en su momento permitiendo que creen un balance.
En cuanto a los actos de la vida que el hablo en lo personal, sin embargo como el menciona se puede aplicar perfectamente al ámbito empresarial. Existen empresas que en lo externo está todo al cien, buenas oportunidades y posicionamiento sin embargo en lo interno carecen de muchas cualidades que permitirá a la empresa estar completa y obteniendo los mejores resultados.
El acto de realizar es clave en las empresas, poder planear con anticipación y establecernos metas más allá de simplemente cubrir los gastos de la empresa sino poder también agregar valor a nuestros productos o servicios para obtener mayores ventas, un mejor servicio al cliente para fidelizar los clientes o conquistar otro segmento del mercado. Sin embargo no debemos olvidarnos del acto de conectar y dar valor al individuo en la organización para poder ser una organización. Es necesario un equipo para poder llegar a nuestro fin, por tanto si nos enfocamos solamente en realizar descuidando las relaciones humanas no avanzaremos o evolucionaremos sino que nos quedaremos en el primer acto, donde los empleados se sentirán que sólo se necesita hacer sin importar sus esfuerzos o no sentirse valorado en la organización. Es entonces el acto de poder integrar ambas cosas y poder obtener un balance en la organización de las metas que queremos lograr y como debemos distribuir nuestros recursos humanos para lograrlo. Es siempre clave en una organización cuando se hace un cambio de enfoque comunicarlo a cada eslabón de la empresa para que todos sincronizados trabajen juntos hacia una misma meta, que quizá no se logre sin todos los esfuerzos unidos.
He visto muchas empresas que establecen una misión, visión y valores como parte de un requisito, para colgarlo en alguna parte de la empresa y no lo viven a diario. Por ello me llama muchísimo la atención donde Cunningham cuestiona si la empresa tiene claro cuáles son los valores de la misma y sus empleados, pero va más allá ¿Lo que hacemos día a día refleja dichos valores? Debemos preguntarnos ¿Nuestras operaciones diarias son regidas por nuestros valores? ¿Van enfocadas a nuestros objetivos y metas? ¿Van de la mano de nuestra visión y misión?
La administración por valores es la base de una organización que está extremadamente comprometida con sus clientes, dando un servicio superior que los convierta en principales embajadores y promotores de nuestros servicios; que motiva a sus empleados y brinda una dinámica laboral de colaboración y un clima laboral sano, accionistas que buscan el crecimiento constante y una relación sana con su ambiente. Todo esto basándose en los valores de integridad, equidad, honradez y cooperación, pues son precisamente los valores que logran que cada empleado se alinee con el otro logrando juntar sus esfuerzos para la consecuencia de una meta en común. Aclarando las prioridades y procurando que en cada acción tomada los valores estén presentes, que sean valores sanos y que estén verdaderamente presente. Todo eso se hace coordinando nuestros valores con nuestros objetivos y estrategias a utilizar día a día.
Un paso importante para hacer un cambio organizacional incluye un cambio personal, especialmente el hecho de que aquel que está a la cabeza esté redirigirse para así poder aportar y ser parte del cambio en la empresa es necesario para el proceso APV.
En otro ámbito, no sirve de mucho ante cualquier crisis la toma de medidas que permitan salir del paso y tomar decisiones que te den un camino rápido. Es necesario identificar el problema para trabajarlo de raíz y precisamente este proceso es algo que no se considera algo para salir del paso sino un método a largo plazo que permita obtener resultados que duren pero sobre todo que debemos estar practicando de manera constante.
La idea de esto es que los valores se conviertan en una especie de manual a consultar al momento de dudas o de toma cualquier tipo de indecisión, preguntándonos si va acorde con los valores establecidos nos afirmará si estamos yendo por el sendero correcto. Es por eso que es importante definir con paciencia y coordinación los valores con los que realmente queremos ser reconocidos y guiados, comprometer y dar participación a los de alrededor de forma que la guía en la que se convertirán los valores sea confiable.
Un ejemplo de porque los valores se convertirían en una guía organizacional, se refleja en resolución de problemas a través de las estrategias SPOT, SPOP y GAAP. Al presentarse un conflicto estratégico o sistemático se aplica el SPOT, si es algún problema en las relaciones se utiliza el SPOP y GAAP los superficiales. Estas estrategias tienen todas como centro los valores para poder llegar a una solución a cualquier tipo de conflicto que pueda haber. Como todo cambio organizacional es importante la integración del personal cuando queremos aplicar el enfoque APV, los cambios no son algo que se le imponen o hacen a las personas si no se la mano, así evitamos resistencia y también obtenemos otro punta de vista que no tenemos.
