Calentamiento Global Vs Cambio Climático

Introducción

Mucha gente suele confundir los conceptos de cambio climático y calentamiento global. Estos conceptos están estrechamente relacionados, pero tienen una importante diferencia. El calentamiento global es la causa del cambio climático, es decir, el aumento de temperatura global del planeta provocado por culpa de la actividad humana, que da lugar a cambios bruscos en el clima que no se producirían de tal manera por causas naturales. No cabe duda de que no es la primera vez que se ha producido una fuerte variación de la temperatura terrestre, pues ha acontecido también de forma natural, sin embargo, estos ciclos habían sido mucho más paulatinos, mientras que ahora, como consecuencia de los seres humanos y su actividad, se están alcanzando niveles extremos.

Desarrollo

Causas del calientamiento global 

El cambio climático es un fenómeno que actualmente afecta a todo el planeta y en el que intervienen muchos factores, cuyas consecuencias pueden provocar cambios bruscos en cada uno de los ecosistemas del mundo. Su principal causa es el calentamiento global.

El calentamiento global se produce por el aumento de la temperatura media de los océanos y de la atmósfera terrestre, provocado por el incremento de la emisión de los gases del efecto invernadero a la atmósfera, derivados de las actividades del ser humano.

Además de las causas artificiales, es decir, las derivadas de la acción de los seres humanos, también se debe destacar que existen causas naturales, pero éstas son insuficientes para poder entender el calentamiento global actual, ya que el principal problema de su aparición viene derivado de las actividades de los humanos.

El aumento de gases del efecto invernadero es la causa principal del calentamiento global. El efecto invernadero es un proceso natural por el cual se produce la retención del calor que procede del Sol en la atmósfera gracias a la capa de Gases de Efecto Invernadero (GEI). Estos gases mantienen la temperatura del planeta a aproximadamente 33ºC más de la que tendría el planeta si estos no existieran, sin embargo, se trata de una capa esencial para el desarrollo de vida en el planeta pues sin su presencia este tendría temperaturas demasiado bajas. El principal problema se encuentra en el aumento en la emisión de estos gases debido a la contribución del ser humano en la contaminación.

El mayor gas responsable del calentamiento global es el dióxido de carbono (CO2), ya que es el más perjudicial para la salud de la población. Es provocado principalmente por la quema de combustibles fósiles para generar la electricidad, el transporte, la calefacción, la industria, etc. O también puede ser provocado por la producción de cemento y otros bienes, además de ser la consecuencia de la deforestación.

El metano, otro causante, es provocado por la agricultura, la ganadería, el tratamiento de aguas residuales etc. Mientras que los compuestos halogenados, que también causan el calentamiento global, son gases de origen antropogénico y aumentan el efecto invernadero. Además, también se incluyen como responsables el ozono troposférico, una reacción entre gases emitidos en el empleo de combustibles, y el óxido de nitrógeno provocado por el exceso en el uso de fertilizantes o el empleo de combustibles.

Por otro lado, está la deforestación. Los árboles desempeñan un papel muy importante en el equilibrio medioambiental, ya que son los encargados de convertir el dióxido de carbono en oxígeno para devolverlo a la atmósfera. Si el número de árboles desciende, como ocurre en el Amazonas, los niveles de CO2 en la atmósfera aumentan y favorecen el deterioro de la capa de ozono.

Además de estos dos, también es causa del calentamiento global la destrucción de los ecosistemas marinos, ya que los océanos absorben el 50% del CO2 generado. Además de la destrucción de éstos, el problema es que cuando llegan a su límite, se acidifican y se da lugar a un número muy elevado muertes de animales y plantas marinas.

Por último, el aumento de la población también es una causa, ya que a medida que ésta aumenta, se necesitan más recursos y por tanto se produce una aceleración de la emisión de gases de efecto invernadero.

Efectos en la salud del cambio en las temperaturas 

El cambio climático manifiesta efectos globales muy negativos en la salud de las personas. Las temperaturas extremas contribuyen a las defunciones por diferentes tipos de enfermedades, por ejemplo, cardiovasculares y respiratorias y, sobre todo, en personas de edad avanzada. Estas enfermedades vienen provocadas por el aumento de los niveles de ozono y otros contaminantes, así como la subida de temperaturas, que a su vez aumentan los niveles de polen y otros alérgenos que puede afectar de manera muy significativa a aquellas personas que padecen asma, es decir, alrededor de unos 300 millones de personas.

La población no presta la atención necesaria al fenómeno de las olas de calor, y sus consecuencias son devastadoras ya que, por ejemplo, en el verano de 2003, se produjo una ola de calor en Europa que dejó 70.000 muertos. Por lo tanto es necesario tener presente que se trata de un fenómeno verdaderamente peligroso pues sino a medida que avancen los años las consecuencias empeorarán.

Un dato cogido de la Organización Mundial de la Salud (OMS) dice que ‘Según se prevé, entre 2030 y 2050 el cambio climático causará unas 250.000 defunciones adicionales cada año, debido a la malnutrición, el paludismo, la diarrea y el estrés calórico.’

Efectos del coronavirus sobre el cambio climático 

Una pregunta que hoy en día se hace todo el mundo, es si la pandemia tiene algún efecto sobre el cambio climático. Debido a la situación de confinamiento que estamos viviendo, es verdad que se ha logrado un descenso en las emisiones, es decir, una reducción global de gases de efecto invernadero pero no se puede pensar que este virus reducirá significativamente los peligros del cambio climático, ya que las emisiones volverán a aumentar en cuánto la economía se recupere y vuelva a funcionar con total normalidad.

Cómo dijo Lars Peter Riishojgaard, del departamento de infraestructura de la OMM, una agencia de las Naciones Unidas con sede en Ginebra: ‘La pandemia terminará en algún momento y el mundo comenzará a volver a trabajar y con eso, las emisiones de CO2 volverán a aumentar, tal vez o tal vez no al mismo nivel’.

Consecuencias del cambio climático 

Como ya se dijo anteriormente, el cambio climático afecta a todos los países del mundo y trae consecuencias negativas en los sistemas físicos, biológicos y humanos, entre otros múltiples efectos. Dichas consecuencias son desastrosas para la fauna y la flora de la Tierra.

Entre los impactos del cambio climático destacan el deshielo y aumento del nivel del mar, es decir, a medida que aumenta la temperatura terrestre, el volumen de agua incrementa, y a su vez, el aumento de la temperatura causada por los diferentes factores del calentamiento global provocan el deshielo en los polos y los glaciares. Esta combinación es lo que provoca la erosión y las inundaciones.

Las condiciones meteorológicas extremas también son consecuencia de éste y provoca que los fenómenos climáticos sean cada vez más frecuentes y puedan provocar inundaciones, huracanes, ciclones, sequías, tifones e incluso en algunos lugares, una disminución de los recursos hídricos.

El cambio climático también puede provocar efectos en la salud, de lo que se hablará posteriormente. En muchos lugares ya ha habido un incremento en el número de muertes debido a las altas temperaturas.

Los costes para la sociedad y la economía, es decir, los sectores que dependen de la temperatura y del nivel de las precipitaciones, así como la agricultura o el turismo, se ven seriamente perjudicados. Además, los daños que causa el calentamiento global, bien sea a las infraestructuras o a la salud, suponen gastos demasiado elevados para la economía y la sociedad.

Además de todo esto, la naturaleza también peligra por culpa del cambio climático, ya que la variación de las condiciones de vida se está produciendo tan rápido que algunos animales no consiguen adaptarse a los diferentes cambios en los ecosistemas como a la desertificación, lo que lleva a que varias especies se hayan trasladado a otros hábitats o incluso la extinción de ciertos animales o plantas si las temperaturas medias globales siguen subiendo de manera tan precipitada. La cifra de muertes de diferentes especies, debido al aumento de las temperaturas se encuentra entre 10.000 y 50.000 cada año.

A su vez, la absorción de demasiada cantidad de CO2, por ejemplo, provoca la acidificación en los océanos, que conlleva la muerte y enfermedad de peces, algas, corales, y otros muchos organismos.

Por último, cabe destacar que en el centro y sur del panorama europeo se sufren cada vez más a menudo altas olas de calor, provocando numerosos incendios y sequías. A su vez, la zona mediterránea está pasando a ser cada vez una zona más seca, lo que provoca varios incendios. Por el contrario, el norte se caracteriza por estar transformándose en una zona más húmeda, por lo que serían más frecuentes las crecidas en invierno. Además, las zonas urbanas, habitadas por la gran mayoría de la población, están sometidas a olas de calor, incendios o subidas del nivel del mar.

Refugiados climáticos 

A pesar de que el término utilizado no está contemplado en el derecho internacional, se habla de refugiados climáticos para referirse a todas aquellas personas que se han visto obligadas a desplazarse de lugar debido al cambio climático o desastres naturales que éste ha causado,

Un número muy alto de los desplazamientos que tienen lugar actualmente en el mundo tienen que ver con el cambio climático y con los desastres naturales. Somalia, Sudán del Sur y Yemen son ejemplos de países que sufren todos los días estos desplazamientos de personas, por culpa de las consecuencias derivadas del cambio climático, ya sea la subida de las temperaturas, el aumento del nivel del mar, las inundaciones, la sequía o la desertificación. Estas tres últimas provocan el arruinamiento de cosechas y el abandono de hogares de personas de todo el mundo. Se debe destacar Somalia por el gran número de personas que tuvieron que desplazarse forzosamente, alrededor de 7.000 personas, por la sequía.

Según el Centro de Monitoreo de Desplazamientos Internos, en 2017 se registraron 17,2 millones de nuevos desplazamientos relacionados con desastres naturales.

Las ciudades en desarrollo son las que se ven más afectadas ya que debido a dichos desplazamientos forzosos deben de albergar al 84% de los refugiados de todo el mundo.

¿Cómo evitar el cambio climático? 

Después de todo lo explicado y ver todas las causas y consecuencias del cambio climático, es obvio que no se puede evitar, pero lo que sí se puede hacer, es reducir sus efectos y adaptarse a sus consecuencias, es decir, combatir contra él de diferentes maneras, para conseguir frenarlo poco a poco. Las acciones que se emprenden con el objetivo de frenarlo se denominan: medidas de mitigación y de adaptación.

Las medidas de mitigación se centran en las causas del cambio climático, es decir, en la prevención. Ésta consiste en acciones para reducir y limitar las emisiones de gases efecto invernadero con el consiguiente objetivo de que la temperatura global del mundo deje de aumentar. Consisten en una mayor inversión en energías renovables, promover la eficiencia energética, etc.

Por otro lado, las medidas de adaptación están enfocadas para actuar sobre los impactos del cambio climático que ya se han producido, como, por ejemplo, mejorar infraestructuras e instalaciones más seguras, el tratamiento y depuración del agua, la reforestación y restauración paisajística, el cultivo flexible y variado, etc. Además de estas medidas, en el día a día hay muchas cosas con las que podemos mejorar y reducir el cambio climático en nuestro planeta como por ejemplo, el reciclaje, ducharse en vez de bañarse, usar el transporte público o, aún mejor, utilizar la bicicleta de manera que también te mantienes en forma, comprar bombillas de bajo consumo, desenchufar el cargador o cualquier electrodoméstico cuando no se está utilizando, y como estas, muchas más que no cuestan nada y cuyo impacto puede ser esencial para la supervivencia del planeta.

Conclusión

No se puede negar lo evidente, y es que el clima está cambiando. El aumento de la concentración de CO2 atmosférico refleja actualmente sus consecuencias; el aumento de la temperatura global media, el deshielo en los polos y glaciares, el aumento del nivel del mar y las adaptaciones que las especies animales deben realizar ante los cambios en los ecosistemas. La realidad es que no existe un remedio inmediato a este problema, y las consecuencias que éste tiene no se pueden evitar. Sin embargo, si se pueden reducir estos efectos para que no se produzcan cambios excesivamente bruscos en el futuro.