Cambio Climático y la Crisis Ecológica
Hoy hablaré sobre el cambio climático unos de los temas más importantes en nuestra sociedad actual y en nuestra sociedad futura; aunque aún existan muchos defensores de que este no es culpa del ser humano o que directamente no existe. Estos dicen que la misma naturaleza es la que causa este problema, pero no tienen la razón, porque cuando leemos sobre el tema, nos damos cuenta de que lo más sensato es que somos nosotros los que causamos este cambio en la temperatura global. Principalmente de esto hablan los científicos de la IPCC (Grupo Intergubernamental de expertos sobre el Cambio Climático), grupo el cual trata de tener una vista objetiva sobre este, ya que estos trabajan de forma voluntaria, para que de esa manera, su opinión no sea influenciada por otras mentes y realidades a las que les convendría que esos informes brinden información errónea, sobre todo por temas económicos; porque el tener grandes opiniones científicas en contra, hace que los contaminadores se vean acorralados para que detengan su trabajo, lo que causa muchas pérdidas de dinero en ellos. Básicamente la IPCC no se deja influenciar, y es por eso que puede hablar de cómo es nuestra culpa el cambio climático, diciendo que este es una alteración del clima atribuida directa o indirectamente a la actividad humana que altera la composición de la atmósfera mundial y que se suma a la variabilidad natural del clima observada durante períodos de tiempo comparables. Simplemente con esta definición, uno puede saber que el cambio climático es mayoritariamente nuestra culpa, aunque algunas personas siguen diciendo lo contrario, principalmente grupos a los cuales les conviene negarlo por temas personales, ya sean económicos como las grandes empresas y potencias, o simplemente negarlo por miedo a todo lo que puede llegar a ocurrir si esta realidad se llega a cumplir. Los negadores del cambio climático se defienden dando a conocer datos erróneos y tomándolos como sus verdades; como por ejemplo, diciendo que si hay ciertos lugares en el mundo con olas de frío, eso significa que el calentamiento global no existe, frase de Donald Trump, que está totalmente equivocada, puesto que las olas de frío solo son un apoyo ante las negativas del cambio climático, porque a la hora de analizar este, se hace un promedio de todas las temperaturas a lo largo de todos los años, lo que da como resultado que la temperatura terrestre está en ascenso. Básicamente significa que estas heladas que pueden llegar a darse, son totalmente insignificantes ante el cambio climático y no cambian en nada el camino de la vida terrestre.
El cambio climático es de las cosas más importantes de nuestra vida, aunque aún no la notemos a diario. Es importante a día de hoy porque lo va a ser en el día de mañana y es aún más importante porque estamos a tiempo de detenerlo, de detener un cambio que puede llegar a renovar, de mala manera, nuestra vida para tener nuevos hábitos diarios, en los que nos tendremos que cuidar más. Eso si llegamos a vivir en su totalidad al cambio, pero aun así, si no lo vivimos, tenemos que tomar conciencia de que otras personas lo van a vivir, que a causa de nuestras acciones estamos limitando a una sociedad futura y que esto podría reducir nuestros avances durante años, teniendo una guerra contra nosotros mismos en la que nuestros sucesores tendrán que batallar contra lo que nosotros hicimos, una guerra de la que no nos enteraremos pero será probablemente la más significante en la historia de la humanidad, porque esta causará mayores propagaciones de enfermedades, grandes cambios en nuestros ecosistemas y los recursos terrestres van a estar casi acabados. Básicamente, tenemos y debemos concientizarnos sobre este cambio, para así, tratar de detener algo inevitable dentro de unos años, o por lo menos lo será en un futuro, porque actualmente podemos evitarlo y debemos intentar todo lo posible para lograrlo. Según la ONU (Organización de las Naciones Unidas), el tiempo que tenemos para revertir el daño que le hemos causado a nuestro planeta es muy corto, más específicamente de unos 10 años. Esta misma organización habla de cómo los gases del efecto invernadero son importantes, ya que estos permiten la vida en la Tierra impidiendo que parte del calor solar se propague con dirección al espacio. Pero después de tantos años de industrialización, agricultura de grandes escalas y deforestación, estos gases ubicados en nuestra atmósfera se han incrementado increíblemente en nuestra contra, un incremento tan grande, que no existe comparación ni en tres millones de años.
La Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación) tiene una opinión sobre esto en la que habla de que nuestra humanidad está en deuda, de que año tras año consumimos más recursos de los que la naturaleza nos puede brindar y que esté consumo excesivo afecta directamente al cambio climático, mismo consumo extremo que es causado por nuestra cultura consumista, la cual no para de avanzar porque pareciera ser que todo lo nuevo para nosotros es mejor, nos hemos inculcado tanto en nuestra vida la demanda en conjunto con la oferta que se lo seguimos enseñando a las siguientes generaciones; lo que sumado a nuestros excesos de población, crea un súper consumismo que es probablemente imposible de detener, porque de un día a otro, nuestra sociedad no va a dejar este sistema y tampoco parece fácil hacerlo en un plazo de 10 años. La Unesco trata este tema con ayuda de un filósofo, llamado Bernard Feltz, que habla sobre cómo ha sido el comportamiento humano con la naturaleza. Según él, el cambio climático es uno de los grandes desafíos de nuestro tiempo y afecta a nuestra vida cotidiana, a causa de las olas intensas de calor, cambios en la biodiversidad que afectan procesos esenciales y causan extinciones, fenómenos meteorológicos extremos, incendios, deshielo, etc. También afecta al orden geopolítico mundial, causando problemas en la salud pública a causa del aire contaminado, olas de frío y calor, que causan la aparición de nuevos mosquitos que traen enfermedades, también causa problemas en nuestra energía, haciendo que nuestro consumo eléctrico se dispare y problemas en los sectores agrarios que tanto determinan al comportamiento de nuestra sociedad porque de ellos depende nuestra alimentación.
El cambio climático es una de las dimensiones de la crisis ecológica por la que pasa nuestro planeta y este es consecuencia directa del relacionamiento entre el humano y la naturaleza; relacionamiento que puede ser dividido en cuatro enfoques principales según Feltz. El primero es el de Descartes (filósofo entre los siglos XVI y XVII), el cual considera que la naturaleza es un conjunto de objetos puestos a la disposición de las personas. Diciendo que la naturaleza y su vida en ella, no es más que materia inerte organizada en una manera compleja y que sólo el ser humano tiene un alma sustancial, la cual es distinta al cuerpo, por lo que, según él, el humano es la única especie respetable. Básicamente, él creía que los recursos vivos o inertes de la naturaleza, estaban hechos para ser usados a nuestro gusto, justificando todo esto como que nosotros somos la única especie respetable y diciendo que los recursos son infinitos; lo que hizo que se despilfarraran muchos recursos durante años y que recién ahora, nos estemos preocupando por nuestra situación. Otra perspectiva es la de la ecología científica, la cual aportó y aporta un punto de vista muy diferente al mundo. En 1937, el botánico británico Arthur George Tansley, propuso en concepto de ecosistema, el cual revolucionó la relación entre la ciencia y la naturaleza. Este concepto suministra información sobre todas las interacciones de las distintas especies vivientes entre sí, y de todas estas con el entorno físico. Gracias a este nuevo contexto brindado por el concepto de ecosistema, el hombre se puedo redescubrir como parte de la naturaleza. Además, este concepto habla de cómo un ecosistema es un medio ambiente finito, con poblaciones que siempre han sido limitadas. Por lo tanto, con este concepto queda totalmente atrás la ideología de Descartes sobre la naturaleza. Aun así, algunos pensadores creen que este concepto no es suficiente. Por ejemplo, los partidarios de la ecología profunda, que creen que el núcleo del problema en el enfoque de la ciencia, es que somos una sociedad muy antropocéntrica. Estos defienden una ideología de la totalidad, la cual integra al ser humano con todo lo vivo en su conjunto, sin conceder alguna categoría. Básicamente, el respeto por el animal debe ser igual al respeto por lo humano. Por último, el cuarto enfoque sobre el tema, trata de mantener cierta distancia sobre el radicalismo de la ecología profunda, aunque mantenimiento a su vez, la crítica contra la ecología científica. Según estos, la naturaleza y el ser humano coexisten y se relacionan en un espacio vivo más respetado, o sea que un animal puede ser respetado sin estar en la misma categoría que el ser humano.
Luego de reflexionar sobre la información recopilada, creo que he formado una opinión sobre el tema en la que no sé hasta qué punto el humano apoyará la lucha por la Tierra; es normal pensar que está mal lo que estoy diciendo, pero la cultura nos inculcó este sistema, y ahora no me imagino uno sin él, no me imagino ese mundo de transición desde el consumismo extremo hasta el consumismo moderado. No me lo imagino porque, en mi opinión, en todo ese ciclo de cambios van a ocurrir muchos desempleos (de lugares que se tengan que cerrar por sus daños ecológicos), hambre, muerte, básicamente una crisis que sería devastadora como las que ya se han visto en este mundo y, aun así, puede ser que no logremos salvarnos. O sea que hay un doble punto de vista, uno que se defiende porque no es bueno que las vidas del presente tengan que dejar todo atrás por el futuro y el otro punto de vista, que se defiende actuando desde lo moral, porque es lo más correcto, es dejar todo nuestro estilo de vida actual atrás, para que muchísimas más vidas puedas sobrevivir. Digo que el segundo punto de vista es más moralmente correcto, porque en el primero, hablo desde el comportamiento de un ser humano egoísta al cual solo le importa su vida, mientras que, en el segundo, se respetan y tratan de salvar las vidas de millones de especies contando la humana, en nuestro planeta tierra. Las cosas principales que debería de dejar de hacer ese ser egoísta, no son difíciles de hacer, pero si son difíciles de hacer masivamente, porque tras de ellas es necesaria una concientización, primero a nivel educacional y luego a nivel familiar; ya que este es un tema del que no se habla, lo que genera esa negación a su existencia sin saber lo que es realmente. Estas acciones que debe realizar el humano para poder cambiar nuestro camino son: usar más el transporte público (disminuye la cantidad de autos), ahorrar toda la energía que puedas, consumir menos carne (estas industrias son las que le hacen más daño al planeta), usar de mejor manera el agua y educar sobre el tema; porque de esa manera crearemos una cadena de concientización que podría llegar a salvarnos.
No me quedan dudas de que es nuestra culpa que el cambio climático esté ocurriendo, porque no es casualidad que, desde nuestra industrialización, los niveles de gases invernaderos han subido en una cantidad impresionante. Ahora es nuestro turno de actuar y tenemos que elegir de qué lado estamos, en el que somos egoístas y condenamos a todas las generaciones futuras, o en el que pensamos en ellas y luchamos para conseguir un mundo mejor.