Campos de Acción del Estado desde el Punto de Vista de un Régimen Comunista
Desde la perspectiva de nuestro régimen capitalista en el que hemos podido vivir podemos talvez inferir desde nuestra óptica que es lo único que existe, pero hay otras maneras con que en algunos estados miran sus campos de acción, es decir es aplicable el refrán de que “todo depende del cristal con que se mire”. Este ejercicio escrito pretende ubicarnos brevemente en el lugar de otros pensamientos políticos e identificar con que visión observan y aplican los diferentes campos de acción un régimen del tipo comunista.
Cuando hablamos del pensamiento comunista debemos orientarnos, a el por qué surge esta visión política. El comunismo se erige como una crítica referente al sistema capitalista, que como se sabe promueve la acumulación de capital como forma de producción de bienes y patrimonio, basado en la propiedad privada de los modos de producir y la utilización del mercado como proceso distribución de los recursos.
De acuerdo al comunismo, el capitalismo es el responsable de la desigualdad e injusticia social. Esto provoca que se genere una gran brecha entre las clases sociales. De esta forma, propone la propiedad conjunta de los recursos productivos de modo tal que no exista una división entre ricos y pobres. (Roldan, 2020).
El campo económico es visto y aplicado por este pensamiento desde el enfoque de que la propiedad privada insta a la lucha de clases entre la clase obrera y los propietarios de los medios de producción, lo anterior se decanta en altercados intestinos y progresivos, que pueden llegar a abocarse a ser zanjadas por intermedio de revoluciones de la clase obrera. Así las cosas, la clase obrera debe propender, según el pensamiento comunista, a apropiarse de los recursos y proclamar la propiedad cooperativa. Para el estado los bienes y servicios son producidos de acuerdo a un mecanismo de planificación centralizada en donde no existirá la competencia ni el libre mercado. Sin embargo, las críticas al desenvolvimiento del comunismo en este campo de acción van referidas a la ineficiencia que al momento ha sido demostrada de manera que el planeamiento central y el coartar el emprendimiento empresarial los lleva a ser poco productivos, conllevando a que algunos recursos limitados sean subutilizados o perdidos. Así mismo la carencia de incentivos individuales coadyuva a que las personas no den su mejor esfuerzo teniendo como resultado la baja productividad y en consecuencia el estancamiento de la economía con el subsecuente sufrimiento para la población.
Por otra parte, el campo social, según la óptica comunista, al ya no existir antagonismos y contradicciones de orden económico la sociedad puede desarrollarse planificadamente y de manera acelerada. Según estas políticas, se busca exaltar el trabajo mancomunado humano, liberándolo de la sobreexplotación, exaltando los retos alcanzados por la ciencia y el intelecto y poniendo al servicio de la sociedad todos los logros materiales y espirituales, fomentando un clima apto para la optimización de la función creadora de la masa. El comunismo abocado más hacia el socialismo como tal aduce: “poder aplicar sin limitaciones y de manera efectiva los frutos de la investigación, desarrollo e innovación, cuyo florecimiento no comulga por ninguna razón con los posibles intereses egoístas de los explotadores”. (Fedoseiev, 1968). No obstante, cabe anotar que esto puede ser bastante utópico, dado que la iniciativa individual no es igual en todas las personas, lo que nos lleva a que talvez no exista tal sinergia social, si no más bien un obstáculo para ponerlos de acuerdo un grupo productivo.
Desde la óptica del campo militar, el comunismo lo aborda como algo nuevo, exento de tradiciones, lo que les permite innovar en técnicas y tecnologías como alguna vez lo intento la URSS. El énfasis de la interpretación militar desde el enfoque comunista es orientar todos los procesos de I+D+i hacia la potencialización de las fuerzas armadas, a fin de generar una fuerza disuasiva, altamente móvil, con buenas capacidades logísticas, de hombres y de fuego, pero bajo el concepto de que “el ejército y la policía permanentes habrían de desaparecer y ser sustituidos por el pueblo en armas, organizados para cumplir un servicio social de plazo extraordinariamente corto” (Duran-Cousin, 2002). Un ejemplo claro de la puesta en marcha de este campo de acción fue la manera como intervino la URSS en la Segunda Guerra Mundial y más recientemente en las operaciones de invasión a Afganistán Tormenta 777 y a muy pequeña escala en 1975 en Angola (antigua Luanda) por el Ejercito cubano con la operación Carlota en contra del Ejercito de Zaire hoy República del Congo.
La política, como campo de acción del estado comunista es quizá su principal pilar. Pilar que está basado también en lo social. El principal objetivo es manejar el poder del Estado para la instauración de una revolución social que, a través de tres fases, implante una organización económica y social basada en el control colectivo de la producción. Es de anotar la existencia de un solo partido: el de gobierno. Cabe anotar que estos tipos de regímenes son tendientes a manejar el campo político de manera dictatorial sin el recurso de la población de optar por otras propuestas o partidos, conllevando esto al descontento y decepción poblacional y la poca credibilidad de esos regímenes.
Para concluir, es precioso anotar que a pesar que los estados comunistas hagan los mejores esfuerzos para la aplicación de sus teorías en los campos de acción de sus estados, la historia ha demostrado que dicha aplicación ha mostrado más desventajas que ventajas, toda vez que la abolición de las clases sociales y la satisfacción de necesidades quedan en manos de la población sin tal vez un norte que permita su evolución, por otro lado, la concepción de estado como ente tiende a ser extinta al asumir los ciudadanos las funciones situación que propende a la paquidermia administrativa y por último la inexistencia de un mercado donde se compita y se pueda regular valores hace que nunca se alcance calidad a buen precio ni tampoco un bienestar optimo a la población .
Referencias
- Duran-Cousin, E. (2002). Comunismo, principio y fin de un sueño. Quito: ABYA-YALA.
- Fedoseiev, P. (1968, Enero 30). El progreso de la sociedad y el individuo. En P. Fedoseiev, Dialectica de la epoca contemporanea. (pág. 224). Montevideo: Ediciones Pueblos Unidos. Obtenido de http://www.filosofia.org/urss/fed/dec224.htm
- Roldan, P. N. (2020, Enero 28). Economipedia. Obtenido de https://economipedia.com/definiciones/comunismo.html
