Colombia, La Paz Marca La Diferencia
Colombia ha sido un país marcado significativamente por la violencia, derivada principalmente del conflicto armado. El Centro Nacional de Memoria Histórica informó que durante 60 años “la guerra en Colombia ha dejado 262.197 muertos” (2018), donde más del 80% hacia parte de la población civil, a pesar de estas grandes pérdidas generadas por el conflicto armado, se sigue presentando conductas violentas en la sociedad colombiana. El propósito de este texto es comprender el papel de los individuos en la construcción de paz en Colombia, particularmente como futuro profesional y ciudadano de este país, el papel que juego en la construcción de paz es ser un generador de cambio, marcando la diferencia y luchando por el bien común.
Según lo discutido en clase de Constructores de paz, la población colombiana se ha convertido en una sociedad apática e insensible, en la cual es común no actuar ante el sufrimiento ajeno. Para emplear mi papel como constructor de paz, considero primordial comenzar por generar un cambio en mí, haciendo un autoconocimiento de mis actitudes, mis principios y valores, con el propósito de generar una auto-transformación, enriqueciendo mi comportamiento empático ante determinadas circunstancias.
A partir del texto de Enrique Chaux, se sabe que existe una estrecha relación entre la violencia política y la violencia común, donde esta primera enriquece a la segunda, esto es evidenciado a partir de la impunidad permitida por el sistema judicial colombiano, que lleva al uso de la “justicia privada” para resolución de conflictos. Por esta razón como ciudadano constructor de paz debo generar conciencia en la población para exigir al Estado fortalecimiento del sistema judicial, para no tener que recurrir a la justicia propia y de esta manera reducir la violencia común.
Según lo estudiado, se sabe que existen dos clases de agresión: la agresión reactiva y la agresión instrumental, Chaux define a esta primera como “respuesta ante una ofensa real o percibida” (2003), donde se asocia a este tipo de reacción la falta de control de las emociones, por otro lado, describe la agresión proactiva (instrumental) como “un instrumento para conseguir un objetivo, sea éste recursos, dominación, estatus social o algo más” (Chaux, 2003), donde se evidencia la falta de empatía y comprensión hacia el agredido. En el caso del conflicto armado en Colombia, se pueden aplicar ambas definiciones antes expuestas, ya que los grupos armados aplican agresión instrumental para obtener un beneficio, como la guerrilla para obtener reconocimiento político y en el caso del ejército para mantener el orden y control; también se aplica agresión reactiva por parte de los paramilitares como respuesta de los ataques generados por la guerrilla a la población. De lo mencionado anteriormente y de lo discutido en clase, se debería tener en cuenta que, al controlar las conductas agresivas en la sociedad, se podrían solucionar conflictos de manera pacífica. Como constructor de paz debo luchar por intentar mantener un ambiente pacifico, donde no se presente ningún tipo de violencia. Por otra parte, es de vital importancia hacer ver a los ciudadanos que se necesitan políticas que ayuden a disminuir la violencia política y común.
Se sabe que la violencia es aprendida y adoptada por el tipo de ambiente en el que se habita e interacciona, Chaux especifica que los niños y adolescentes que viven en ambientes violentos tenderán a ser personas agresivas en el futuro. Para poder marcar la diferencia en este aspecto, considero importante apoyar a las instituciones que buscan el bien de los jóvenes e incentivar a las familias para que generen ambientes ricos en valores y en principios éticos.
Para ser un constructor de paz debo comenzar por la auto-transformación, haciendo búsqueda de la empatía, actitud que hace falta en la sociedad colombiana. Como constructor de paz debo luchar por la creación y mantenimiento de ambientes de paz, donde no se presente ningún tipo de violencia. Además, es necesario generar conciencia de que todos los colombianos tenemos la responsabilidad social de buscar la paz, de esta manera se le puede exigir al Estado políticas que ayuden de manera efectiva a la disminución de la violencia de cualquier tipo.
Bibliografía
- Centro Nacional de Memoria Historica (2018). 262.197 muertos dejó el conflicto armado. Recuperado de http://www.centrodememoriahistorica.gov.co/noticias/noticias-cmh/262-197-muertos-dejo-el-conflicto-armado
- Chaus, E. ( junio de 2003). Agresión reactiva, agresión instrumental y el ciclo de la violencia. Revista de Estudios Sociales, (15), 47-58.