Dueñas de Nuestro Propio Cuerpo: Derechos de Aborto en Chile
“Desde que tenemos la primera menstruación vivimos temiendo un embarazo no deseado. Cuando somos niñas crecemos con ese temor a la violación de ese tipo extraño que nos puede agarrar en una calle oscura. Después, cuando disfrutamos del sexo consensuado, el temor persiste porque sabemos que el preservativo se puede romper y salirse y quedar adentro. Le pasa a una amiga, a una amiga de una amiga, y un día nos pasa a nosotras. Es un miedo que un varón no puede llegar a imaginar. Lo que está en juego son nuestras vidas, las de las mujeres. No se trata de un Boca-River. El aborto ya existe. Son 450 mil mujeres que acuden a esta práctica cada año”. (Periodista Mariana Carbajal, integrante del colectivo Ni Una Menos).
El aborto es algo que ha estado en la tarima estos últimos tiempos, y en Chile aún más cuando varias personas (Mujeres y hombres) buscan un aborto libre y seguro.
Esta palabra “aborto” se define como la interrupción del embarazo y este puede producirse de forma espontánea o inducida, sea cual sea el caso este se concluye con la expulsión del feto a través del canal vaginal.
El aborto espontaneo puede producirse por diferentes causas o complicaciones de la madre o el feto, pero sin ser intencionado. Y el aborto inducido es producido por la propia voluntad de la mujer donde se puede generar dos formas para que esto se lleve a término: Aborto médico y quirúrgico.
Despues de todo este proceso y si se lleva a cabo un aborto tanto espontaneo como inducido se pide que se generen una serie de exámenes para ver si aún queda tejido fetal en el útero, además de ayuda psicológica para todo el proceso que conlleve la Mujer para que logre recuperarse.
En Chile existe una ley núm. 21.030 que despenaliza el aborto, pero bajo tres causales que fueron promulgadas por Michelle Bachelet el año 2017. El artículo 119 dice lo siguiente: “Mediando la voluntad de la mujer, se autoriza la interrupción de su embarazo por un médico cirujano”, todo esto bajo las tres causales ya mencionadas. Estas se basan en tres importantes riesgos para salud médica y mental de la Mujer.
- Primera causal: Si la mujer se encuentra en riesgo vital, de modo que la interrupción del embarazo evite un peligro para su vida. Se debe contar con un diagnóstico médico.
- Segunda causal: El embrión o feto padezca alguna patología congénita adquirida o genética, incompatible con la vida extrauterina independiente. Debe contar con dos diagnósticos médicos y de especialistas, y además ser por escrito y de forma previa.
- Tercera causal: Por violación, siempre y cuando no hayan transcurrido más de doce semanas de gestación. Y si es una niña menor de 14 años, la interrupción puede realizarse siempre y cuando no hayan transcurrido más de catorce semanas de gestación. Deberá estar a cargo un equipo de salud que está conformado para estos efectos, confirmando los hechos ocurridos e informando por escrito a la mujer o a los tutores legales y al jefe del recinto hospitalario y/o clínica particular donde se solicite la interrupción del embarazo.
Esta ley además de sus tres causales, promueve el trato digno hacia la Mujer en términos médicos, y también hacia los médicos tratantes y resto de personal a que si se abstienen a no realizar estas funciones, de manera escrita deberán informar al hospital para que de esta forma la usuaria pueda ser tratada y derivada a otro centro hospitalario.
Además esta ley no obliga a que la mujer pueda realizarse esta interrupción, cada mujer decide si se acoge a estas tres causales o no. Dentro de todo el mundo del aborto, en chile han salido varios casos que han sido de negligencia sobre la mujer embarazada que busca que la ley que despenaliza el aborto se use en su embarazo, como es el caso de Fernanda Sandoval quien tenía 15 semanas cuando empezó con síntomas de perdidas (con sangrado) a lo que cual se dirigió a el recinto hospitalario público de Quilpué, donde a través de varios exámenes la dejaron hospitalizada por una infección y eso es lo que habia provocado el sangrado.
Ella relata que le dieron antibióticos y reposo absoluto, pero la situación empeoro cuando se le rompió la membrana y ya no tenía líquido amniótico en su vientre. Al saber lo que estaba ocurriendo, ella era consciente de esta ley por lo que le dijo al doctor que si podía interrumpir su embarazo por la segunda causal donde el embrión o feto tenga alguna patología congénita adquirida o genética que no permitiría que sobreviviera, al pedir esto a su médico le dijo que “no, que era objetor de conciencia” y que en estos casos podría sobrevivir él bebe y que no aplicaba la ley, por ende solo le podía ofrecer un calmante.
El hospital respondió que nunca hubo una información sobre este caso y nada escrito por el médico, a lo que igualmente apoya a su equipo de médicos por que el feto aún tenía vida y por ende deberían darle los analgésicos correspondientes.
Despues de todo la matrona dio la orden de que a Fernanda se le interrumpiera el embarazo porque ya no habia motivos de seguir con ello, es por eso que le aplico la primera inyección y le tocaba una a las 48 horas, donde no se encontraba su matrona y pidió a otra doctora que le inyectara la segunda dosis y la medico respondió “no, que ella era objetor de conciencia y debería esperar el segundo turno”.
De esta forma Fernanda tuvo un dramático aborto donde ella conto que lo tuvo en la sala de maternidad con otra embarazada al lado y su pareja, además que se durante esos gritos en los cuales ella pedía ayuda por el dolor que sentía ningún personal se acercó y no fue hasta que ella expulso el feto cuando recién llegaron los médicos y de manera brusca solo le dijeron al padre de la criatura “donde se lo dejamos”.
El recinto hospitalario se niega a todas las acusaciones que hizo Fernanda, diciendo que en ese momento si habia médicos en la sala de al lado atendiendo un parto, pero habían otros trabajadores del área de salud.
Sin embargo aquí se puede percatar que no toda la gente está a favor del aborto y por ende lo que se busca con esta ley es que se haga justo en tres casos de los cuales son importantes para proteger la salud médica y mental de la Mujer, que en esta situación lo que menos se pudo hacer fue respetar la ley que en este caso estaría a favor de Fernanda.
Respecto del aborto, existen muchas opiniones donde en este año 2019 somos más las personas que estamos a favor de un aborto libre y seguro. Por algunos casos como el de Fernanda donde siendo que hay una ley que podía ser utilizada de forma correcta no se rigió como se debería haber sido, y todo el proceso que ella debería haber tenido de una forma más segura, fue doloroso y hubo negligencia.
Somos las Mujeres las que sufrimos durante el embarazo, y no le podemos imponer que tenga una vida en su vientre si con las condiciones del mundo en general no está para tenerlo, si no se siente segura o si no le podrá dar todo lo que él bebe merece, estas y más son todas las incógnitas que las mujeres nos hacemos cada día sobre el embarazo, pero a pesar de todo el aborto es un proceso doloroso para cualquiera, es un ser que podrá vivir en este mundo y respirar tu aire, conocerá lo poco que le queda al mundo de vida, pero despues uno piensa y ¿Si puede quizás crecer en otra vida mejor?.
Yo personalmente estoy a favor del aborto libre, sin tres causales donde no se rigen como deberían por falta de criterios de los médicos que no ven el dolor de un ser humano que ya está vivo y prefieren la vida de alguien que no ha nacido. Porque una ley me puede decir cuando yo puedo decidir o no tener un aborto. Existen tantos casos de niños abandonados que son causa del estado donde no dejan que uno pueda optar por su propia decisión como mujer, ya que nosotros traemos esos niños al mundo. Debería existir una ayuda para todas esas mujeres que quedan embarazadas por motivos que no se salen en la ley y que por eso no pueden abortar.
Simplemente no nos deberían quitar un derecho que para las Mujeres es decisión de cada una que vive en el mundo. Hay una serie de dichos que salen si se aprobara el aborto libre y seguro, algunos de ellos son “Todas van a querer tener relaciones y abortar”, “una ley fácil para las mujeres fáciles”, “a las prostitutas les vendrá bien esta ley”, entre muchas más y esto con el fin de que la gente piense que nosotras no podemos imponer de nuestro cuerpo, cuando nosotros somos dueñas.
En fin, el aborto libre aquí en chile se conoce como aborto clandestino, a no ser que por motivos de la madre o del feto ya mencionado sea por tres causales y este se despenalice. Esto debería ser diferente deberíamos cambiar, el aborto libre debería existir aquí en chile y en todo el mundo, y que todas las mujeres sean dueñas de su propio cuerpo y decisión sobre ellas.