El Discurso del Manifiesto Partido Comunista
Introducción
Tema de investigación: La siguiente investigación intentará examinar y describir cómo y por qué la propuesta del Partido Comunista del Perú-Sendero Luminoso se convierte en una opción de integración para mujeres jóvenes a diferencia de otros partidos políticos. En 1980, el PCP-SL inició la lucha armada con el propósito primordial de tomar el poder. Con tal objetivo empleó diversas estrategias. Una de las más importantes fue la construcción de un discurso de integración de la mujer con la finalidad de plantearlo como una pieza clave para propiciar el cambio en las estructuras sociales.
La importancia de este tema radica en la necesidad de fomentar la reflexión y la memoria sobre la etapa de violencia que ocurrió en el Perú entre los años 1980 y 2000, así como de profundizar en temas escasamente discutidos hasta el momento. Para determinar qué llevó a que la ideología del PCP-SL llamará a un gran número de mujeres y si realmente formó un cambio significativo en cuanto a las estructuras de género, es fundamental investigar a través de diferentes fuentes: textos bibliográficos, documentos del PCP-SL y testimonios de la CVR.
Desarrollo
Preguntas de investigación: ¿Cómo se reestructuran los estereotipos del varón y de la mujer dentro de esta agrupación? ¿Cuál es el uso específico que se le ha dado a la propaganda en la construcción del PCP-SL? ¿De qué forma el PCP-SL representa los estereotipos de género en sus militantes mediante sus afiches y su producción cultural? ¿Qué tipo de elementos en el plan subversivo del PCP-SL podrían haber sido comprendidos como emancipatorios para las mujeres? ¿Cuál fue el rol del Movimiento Femenino Popular como un elemento clave para generar un cambio en las estructuras sociales?
Los estudios académicos que plantean la participación de la mujer en el PCP-SL empiezan a desarrollarse a principios de la década de 1990. Un fundamento que ha servido para explicar la afiliación de las mujeres al Partido Comunista del Perú-Sendero Luminoso es que los otros partidos políticos de la época no admitieron que las mujeres se unieran a ellos. Por un lado, diferentes factores contribuyeron a que el PCP-SL se situara como un partido que prometía a las mujeres los mismos roles que a los hombres, llegando a crear en efecto un espacio de representación política para ellas.
El PCP-SL no solo construyó un discurso de integración de la mujer con el objetivo de plantearlo como una pieza clave para propiciar el cambio en las estructuras sociales, sino que en la práctica les ofreció espacios de reconocimiento que otros partidos políticos les negaba. Por otro lado, aun cuando el partido no tenía una política de género comprometida con un genuino cambio en las estructuras de género, permitió la instauración de nuevos roles femeninos y un cambio notable en la vida de muchas de ellas.
Un escenario excepcional en la participación política de la mujer durante las décadas del 1970 y 1980 en Perú, constituyó el ingreso de las mujeres a roles diligénciales en esta organización. Se ha estimado que más del 50% de su Comité Central ha estado integrado por mujeres. A diferencia de ello, entre los principales frentes y partidos políticos legales existentes en 1980, los tres porcentajes más altos alcanzados por mujeres en puestos de dirección han sido 12.5%, 9.5% y 7.7% en la Unión Nacional de Izquierda, el Partido Aprista Peruano y Acción Popular, respectivamente.
De acuerdo con esto, el acceso al PCP-SL puede ser visto como la obtención de un espacio de reconocimiento, pero que refleja, también, la ausencia de espacios de representación política en el país. El análisis efectuado por Chávez de Paz, Juventud y Terrorismo: características de los condenados por terrorismo y otros delitos, muestra que el 56.7% de las mujeres sentenciadas entre 1983 y 1986 tenían educación superior frente a un 31.4% de los hombres en esa misma situación, y que no había diferencia entre hombres y mujeres en lo que respecta al promedio de edad: 26 años.
Ambos datos evidencian la coincidencia de diversos factores socioculturales en la participación de la mujer en el PCP-SL. Desde esta perspectiva, resulta esencial investigar la incorporación de la mujer en el PCP-SL no solo desde su compromiso político sino también desde los cambios que marcan sus relaciones sociales de género.
Olivier Grojean plantea que las situaciones de conflictos violentos son generalmente propicios a la reestructuración de las relaciones sociales, y principalmente a la renegociación de los roles masculinos y femeninos. Es posible deducir que dichas acciones revolucionarias de igual forma implicarán, implícita o explícitamente, la alteración de las relaciones tradicionales de género y permitirán la participación activa de las mujeres, dentro y fuera de las filas de la guerrilla.
La violencia que se inicia con las acciones subversivas del PCP-SL se genera en un contexto nacional y local en el cual la presencia femenina en el espacio público había cambiado cuantitativa y cualitativamente. Desde los años 1960 se intensifica la participación femenina en la educación, el trabajo y en menor medida en la política. En el ámbito público las mujeres se hacen presentes a través del movimiento feminista, los partidos políticos y los movimientos populares de mujeres.
A partir de ese mismo año, Augusta La Torre, segunda dirigente del PCP-SL funda el Movimiento Femenino Popular. Este marca el principio de un tipo de feminismo proletario inspirado en Marx, Engels, Mao y Mariátegui. El Movimiento Femenino Popular logró reunir a miles de mujeres en todos los niveles de la organización maoísta, para preparar la Guerra Popular desde un marco de violencia revolucionaria que se quiso librar contra la violencia organizada del Estado. En este contexto, fue, por tanto, inseparable la lucha por la emancipación de las mujeres de la lucha de clases desde el movimiento proletario.
Conclusión
Isabel Coral nos presenta una visión de las mujeres antes del conflicto armado, sosteniendo que estas sufrían una invisibilización producto de la fuerza de relaciones patriarcales expresada en la exclusión y subvaloración de las experiencias, expectativas, e intereses de las mujeres como de su autodesvalorización. Menciona que los primeros núcleos de mujeres senderistas procedían de estudiantes o profesionales de los sectores medios de los 1,451 alumnos matriculados en la universidad de Huamanga en 1968, un tercio eran mujeres.
El discurso mediático convocó a las mujeres a ser parte de un sistema que sí las incluía, donde sí serían importantes; pues la revolución se gestó en el campo donde las mujeres eran más pobres y excluidas y estaban directamente afectadas por las desigualdades que en el Perú en esos momentos se agudizaban. Por eso, el discurso fue atractivo, porque las llamó a proteger el futuro de ellas y sus hijos, y porque fueron invitadas a ser parte de una organización donde la igualdad de género sería una realidad.
Bibliografía
- Barrig, M. (1993). Liderazgo femenino y violencia en el Perú de los 90. Debates En Sociología, 0(18), 89–112.
- Blondet, C., & Montero, C. (1994). La situación de la mujer en el Perú, 1980-1994. 11–243.
- Chávez de Paz, D. (1989). Juventud y terrorismo : características sociales de los condenados por terrorismo y otros delitos.
- Grojean, O. (2013). “Théorie et construction des rapports de genre dans la guérilla kurde de Turquie.” 21–35.
- Coral, I. (1999) “Las mujeres en la guerra: impacto y respuestas”.
- Andreas, C. “Women at War”, Washington: North American Congress on Latin America (NACLA), Report on The Americas. Peru´s Shining Path, Vol. 24, n°4, diciembre- enero, 1990. 20-27.
- González, J., & Maldonado, R. (n.d.). FARC Y EL PCP-SENDERO LUMINOSO, LOS CASOS DE COLOMBIA Y PERÚ.
- Henríque, N. (2006). Cuestiones de género y poder en el conflicto armado en el Perú. In Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONCYTEC).
- Guiné, A. (2016). Encrucijada de guerra en mujeres peruanas: Augusta La Torre y el Movimiento Femenino Popular.
- López, F. (2017). El discurso sobre la emancipación de la mujer durante el conflicto armado interno en el Perú: memorias de las mujeres del PCP-Sendero Luminoso. Revista Del Instituto Riva-Agüero, 2(1), 121–157.