El Trastorno De La Depresión En El Sistema Educativo
En el siguiente trabajo monográfico he abordado un tema que cada vez está tomando un mayor protagonismo en el panorama social y educativo actual. Sin embargo, no es porque en el pasado no existiera, pero si era más desconocido; se achacaba a otros asuntos, o directamente era ignorado. Estoy hablando de la depresión en niños que se encuentran en la etapa escolar. La depresión es una enfermedad que también afecta a los adultos y que puede acarrear terribles consecuencias. Debido a mi interés por saber cómo afecta a los niños y niñas, cómo se puede detectar y cómo se puede abordar su tratamiento; he realizado una búsqueda de información y una reflexión sobre este asunto.
¿Qué es la depresión?
En primer lugar, desde un plano general, la depresión es una enfermedad mental muy habitual en todo el mundo, y se estima que alrededor de 300 millones de personas la sufren. Esta enfermedad es diferente de las modificaciones habituales del estado de ánimo y de las respuestas emocionales de carácter breve a los problemas que tienen lugar durante la vida cotidiana. Es posible que llegue a convertirse en un problema de salud serio, particularmente cuando es de larga duración y de una intensidad moderada a grave. En muchos casos puede llegar a causar un gran sufrimiento y afectar a las actividades familiares, escolares y laborales. Cuando la enfermedad se complica mucho, en el peor de los casos puede desembocar en el suicidio. Cada año tienen lugar cerca de 800.000 suicidios, y el suicidio es la segunda causa de muerte entre personas con edades comprendidas de los 15 a los 29 años.
La depresión afecta también a los niños/as. Su falta de madurez los convierte en personas más vulnerables a esta enfermedad, y no siempre son capaces de describir lo que sienten, y de exteriorizar por lo que están pasando. Actualmente cada vez más se notifican casos de niños diagnosticados con trastornos depresivos. La depresión infantil ha existido siempre, según queda recogido en algunos textos de médicos y pediatras clínicos en contacto directo con niños depresivos, aunque no se asumiera como entidad clínica hasta la década de los años setenta en Estados Unidos. Y en Europa; sería en Estocolmo cuando en 1971 durante el IV Congreso de la Unión de Paidopsiquiatras Europeos en donde se llega a la resolución de que la depresión también afecta a niños y adolescentes. De esta manera pasa de ser una simple palabra en un escrito, como melancolía, o la narración de algún caso de suicidio llevado a cabo por algún menor, a constituir uno de los temas de mayor interés en la Psiquiatría y Psicología infantil. Prueba de ello es la amplia bibliografía que existe en cuanto a su diagnóstico, evaluación, tratamiento, programas de intervención, análisis epidemiológicos… etc.
En el año 1974 aparece el Comité Internacional para la Prevención y Tratamiento de la Depresión. Tiene lugar la celebración del primer simposium de este comité en España en 1983, siendo una de las comunicaciones “Repercusiones de la depresión sobre la enseñanza” de R. Pons Bartran. En esta comunicación se hace referencia a la depresión de los padres y su repercusión en los niños/as durante la etapa escolar, y la relación entre depresión y exámenes.