Embarazo de Alto Riesgo en Adolescentes
La adolescencia es considerada como una etapa de transición de la niñez a la adultez. El inicio de la misma se ha vinculado de manera aproximada a los cambios fisicos que tienen lugar en la pubertad, a pesar de que es grandemente influida por una gran diversidad de factores como el tiempo, lugar, ambiente, condiciones culturales, sexo, genero entre muchas otros, que se convierten en dimensiones del fenómeno imposibles de ignorar a la hora de abordar los derechos sexuales y reproductivos.
En lo que a Dominicana se refiere, las transformaciones producidas en los últimos tiempos conmina a repensar la dinámica y el comportamiento del embarazo en la adolescencia, origen de muchas inquietudes en cuanto a programas sociales en general y los relacionados con la Salud Pública, tal y como se aprecia en el estudio de Pérez, Miric, & Tahira (2011) la prevención del embarazo en adolescentes debe ser el principal instrumento para tratar esta problemática en el país, y desde los diversos actores de la sociedad civil deben estar muy alertas para su implementación, tomando siempre en cuenta los factores de tipo cultural y social involucrados con esta problemática en nuestro país.
En este sentido, se debe tener presente que en República Dominicana la problemática del embrazo en la adolescencia es de larga data y de gran relevancia. El país ocupa el quinto lugar con la tasa más alta de embarazos entre las féminas de 15 a19 años de edad en la región(Centro de Estudios Sociales y Demográficos, 2014). Basta con la mera observación para encontrar a jóvenes embarazadas en los núcleos familiares y calles, a veces en los centros educativos, centros comerciales y muchos otros lugares.
En la comunidad médica esta problemática ha sido siempre centro de discusiones e inquietudes, fundamentalmente por los grandes peligros que acarrea tanto para la madre, como para su producto.
En los últimos años, esta preocupación ha ido incrementándose al hacerse evidente que entre una cuarta y quinta parte de los nacimientos en los centros obstétricos de más relevancia del país sucede antes de la segunda década de vida, evidenciándose un potencial aumento.
Según el Estado Mundial de la Infancia 2007, (UNICEF, 2006) las niñas menores de 15 años están expuestas a cinco veces mayores probabilidades de fallecer durante el embarazo que las féminas de más de 20 años. Si una madres tiene menos de 18 años las posibilidades de que su producto muera durante el primer año de vida es de un 60%; inclusive cuando sobreviva hay una mayor probabilidad de que padezca de peso bajo al nacer, de malnutrición o de retraso en el desarrollo físico y cognitivo.
La República Dominicana ha sido estimado como el quinto país de América Latina con mayores índices de embarazos en esta etapa de la vida, alrededor del 25 y 30% en jóvenes de entre 15 y 19 años, un hecho calificado por muchos expertos de alarmante.
Las provincias que registran las mayores tasas de embarazos son Azua con un porcentaje de 36.9% y Pedernales con un 35.1%(Oficina Nacional de Estadística, 2011)
La situación imperante de jóvenes embarazadas dio lugar a que los directivos del Hospital Regional Juan Pablo Pina de la provincia de San Cristóbal a habilitar una unidad de Cuidados a menores embarazadas. Este centro de Salud asiste aproximadamente cada mes a1,671 adolescentes en estado, con edades que oscilan entre los 10 y 14 años y a
La espiral de niñas embarazadas obligó incluso a los responsables del Juan Pablo Pina, a crear una Unidad de Cuidados de Menores Embarazadas. El hospital regional, Juan Pablo Pina (San Cristóbal), asiste de media mensualmente a 1.671 adolescentes embarazadas de entre 10 y 14 años y a 1, 711 de entre 15 y 19 años, siendo estos partos, aproximadamente un 20% del total de embarazos que se asisten en el centro.
Los servicios ofrecidos en el mencionado hospital integra un equipo multidisciplinario compuesto de psicólogos, sexólogos, ginecólogos y personal médico general, que se ocupan de dar seguimiento a las adolescentes en estado.
El fenómeno del embarazo en la adolescencia es un fenómeno multicausal, sin embargo pueden señalarse algunas como: poca información, falta de educación sobre las opciones anticonceptivas, así como el hecho de que la mayor parte de las relaciones sexuales en los adolescentes no son planeadas, sino que son de carácter casual, falta de comunicación efectiva en el entorno familiar, por lo que la información que disponen los adolescente sobre las relaciones sexuales y sus implicaciones provienen de pláticas entre los amigos.
Esta es la razón de que primen mitos como que el coito interrumpido evita el embarazo, además de que no conocen el mínimo grado de efectividad de métodos como el ritmo, e incluso la manera de practicarlo.
Siguiendo con los factores causales, es necesario mencionar entre los muchos factores que conllevan a la puesta en práctica cada vez prematura de la sexualidad en los y las adolescentes y por consiguiente a los embarazos precoces, están los cambios socioeconómicos, nuevos estilos de vida e insuficiente educación sexual. (UNICEF, 2007)
Por último en muchos de loso países del Caribe y América Latina no cuentan con políticas públicas de salud sexual y reproductiva, a la vez que no se aprecian los derechos sexuales y reproductivos de los adolescentes. En lo que se refiere a la población de jóvenes están expuestos a la presión de grupo, curiosidad, abuso sexual, sexo a cambio de recompensas monetarias y falta de acompañamiento efectivo por parte de los padres.
