Ensayo Sobre la Amistad: Situaciones de Conflicto en la Adolescencia

Introducción

Empezando este ensayo sobre la amistad en la adolescencia cabe mencionar que la adolescencia es la etapa más complicada a la que el puberto tiene que hacer frente, debido a los numerosos cambios que se producen creando conflictos con el entorno.

En la etapa del desarrollo de la adolescencia la persona tiene que hacer frente a múltiples cambios que suponen una situación de conflicto para el adolescente, estos cambios no solo suponen variaciones físicas, sino también en el desarrollo de su personalidad que hará que el adolescente afronte las situaciones de una manera u otra.

En la actualidad, se ha demostrado que la adolescencia comienza cada vez más pronto, por ello se hace la siguiente división:

  • Adolescencia Temprana (11-14 años)

se caracteriza por la separación de la familia, a la vez que la interacción con los iguales del mismo sexo; cambios de humor repentino y atracción por el sexo opuesto.

  • Adolescencia Media (14-17 años)

se distinguen más conflictos con los padres además de ser hipercríticos con ellos y aparición de las conductas de riesgo.

  • Adolescencia Tardía (17-19 años)

se define por la aceptación corporal; las relaciones con los padres se vuelven más cercanas y menos conflictivas; e identidad sexual estructurada.

En el presente ensayo de amistad se expondrán los principales puntos de conflicto en el entorno del adolescente dentro del clima escolar, familiar, en las relaciones con los iguales y por último dentro de la propia pareja que se pueda formar.

En la actualidad se ha visto que la gran mayoría de las relaciones sociales en la vida del adolescente son en contacto con los grupos de iguales, tanto en sexo como en edad, especialmente con los grupos de amigos, la prueba de esto es que se muestra un incremento del tiempo que los adolescentes pasan con sus amigos en comparación con la infancia.

Se intentará tratar todos los ámbitos con la misma intensidad, ya que todos los puntos son igual de importantes para el desarrollo de la adolescencia. Todo ello desde un punto de vista del desarrollo sano y con prevenciones, para que no haya un malestar en cada uno de estos ámbitos.

En cuanto al tema de prevenciones, se intentará tratar no todas en general sino en cada punto de importancia introducir sus respectivas prevenciones.

En casa

El número de adolescentes que se muestran violentos hacia sus familiares aumenta, esto puede deberse al ambiente conflictivo creado por los padres, ya sean discusiones entre ellos, produciendo sentimientos de rabia empeorando el comportamiento. Por otra parte, también puede deberse a la forma correctiva de los padres, como por ejemplo gritos, castigos físicos y bajas manifestaciones de afecto. Todo esto depende de la percepción del adolescente. También se dan en familias desestructuradas, por la falta de jerarquía y límites.

Existen diferentes tipos educativos de crianza, entre ellos están los siguientes mencionados en este ensayo literario de la amistad:

  • El estilo educativo democrático: en el cual hay un equilibrio entre control y afecto.
  • El estilo educativo negligente: hay una ausencia de autoridad y despreocupación hacia el comportamiento y la actitud de sus hijos
  • Estilo autoritario: hay un exceso de autoridad y muy poco afecto.

Estos tres estilos afectan al desarrollo del niño en todos los aspectos psíquicos. Los dos últimos son la primera causa de la violencia filo-parental aumente. Buschgens et al. (2010), se plantearon si el estilo educacional de los padres incrementaría el número de conductas externalizantes en una muestra de preadolescentes. Los resultados mostraron que los adolescentes que tenían menos apoyo emocional, elevados niveles de rechazo y sobreprotección, sus padres y los profesores consideraron que eran más agresivos. Kawabata et al. (2011) los resultados de su estudio mostraron que los niveles de agresividad disminuían a medida que se incrementan un estilo educativo democrático.

Para que se dé un estilo democrático la principal característica que se debe de dar es la comunicación, pero la mayoría de los casos en el entorno familiar no se habla de todo, tal y como muestra el estudio de Águeda Parra Jiménez y Alfredo Oliva Delgado (2002) los adolescentes de ambos géneros con edades comprendidas entre 13-18 años hablan con sus madres sobre amigos, sus gustos, intereses, planes de futuro, normas de la familia, pero los temas menos tratados son los que tienen que ver con la sexualidad, la política y la religión. En cambio, con los padres se habla más de las normas familiares y planes de futuro. Por esta falta de comunicación se pueden dar otro tipo de conflictos a partes de los mencionados anteriormente. Los que más problemas crea son las tareas de la casa, el tiempo de estudio y notas, y la hora de regreso a casa. Las que menos carrera o profesión, policía o religión y conducta sexual. Pero los temas conflictivos que poseen más carga emocional son las drogas, la conducta sexual y la elección de carrera o profesión. Los cuales anteriormente creaban menos problemas.

Por ello en este ensayo literario sobre la amistad se plantean los siguientes fases y técnicas de mediación centrados en el adolescente (Haynes,1981):

  • Establecer una estructura y confianza. el profesional debe de garantizar que haya un negocio entre las partes.
  • Búsqueda de los hechos. el profesional recoge y ordena la información de forma jerárquica.
  • Creación de opciones y alternativas. Identificando así el punto clave de las disputas.
  • Negociación y toma de decisiones, llegando a acuerdos, en los que ambas partes estén de acuerdo.
  • Clarificación y acuerdo final. Se determinan los criterios de evaluación de la conducta.

También cabe destacar los casos en los que la familia se separa y se producen los divorcios, estos pueden tener efectos psicológicos que perjudique al adolescente, por eso muchos padres evitan la separación, pero consiguen el efecto contrario al deseado. Para que no cree una crisis en el adolescente ambos padres deberían de ponerse de acuerdo con la educación de los hijos y que ambos padres les apoyen.

Otro punto de conflicto que me gustaría mencionar  y que aparece en otros ensayos de amistad y la adolescencia seria la muerte de uno de los progenitores o familiar más cercano, es uno de los problemas que más dificultades puede causar puede causar sobre el adolescente como algún tipo de trastorno mental. Un 40% de los adolescentes en duelo necesita apoyo psicológico un año después de la perdida, en estos casos se dan gran importancia a la prevención y a las técnicas psicoterapéutica. Elena Guillen et al. 2013

La parentalidad positiva es una buena forma prevención desde la infancia, comenzando por un apego seguro, para así lograr un respeto y comunicación mutuo. Rodrigo et al., (2010) propone una guía para los padres con unos principios que deben seguir:

  • Vínculos afectivos cálidos: generan fuertes vínculos afectivos con la familia a largo plazo, dando también sentimientos de aceptación y positivos.
  • Entorno estructurado: establece rutinas y límites de comportamiento, evitando que en un futuro esto sea un problema.
  • Estimulación y apoyo: compartir tiempo de calidad con los hijos lleva a que los padres conozcan las capacidades de estos y les puedan apoyar y lograr una alta autoestima y motivación.
  • Reconocimiento: es importante escuchar y valorar a los hijos como sujetos en pleno derecho
  • Capacitación: los padres deben de establecer espacios para escuchar, reflexionar y dar explicaciones, esto hace que se sientan competentes en un futuro.
  • Educación sin violencia: esto elimina toda forma de castigo físico y psicológico que sean denigrantes para el niño, hay que elogiar los buenos comportamientos y explicar porque está mal lo que ha hecho.

 

En el colegio

El tiempo que el adolescente pasa en la escuela se corresponde con un tercio de su tiempo total, pero lo más importante de esta etapa es la socialización que hace el adolescente en este entorno. La aceptación o el rechazo en el colegio se relaciona con un mayor o menor equilibrio emocional, afectando al rendimiento escolar y a su adaptación. Cuando el ámbito familiar no funciona, la escuela pasa a tener un papel principal para el adolescente.

Lo que está claro es que en el entorno escolar no solo deberían enseñarse conocimientos, sino que también habilidades, técnicas o mecanismos que ayuden al adolescente en su ámbito social y que además potencien la realización de su personalidad. Dentro de la escuela hay diferentes factores que intervienen:

  • la escuela en general
  • el propio sistema educativo
  • el profesor/a
  • los alumnos.

Cuando nos referimos al entorno escolar hay muchos ámbitos en los que se tiene que tener cuidado y poner una serie de límites para que el desarrollo de los adolescentes sea en un contexto saludable, además de esto hay ciertas conductas de prevención que hay que tener en cuenta y son muy útiles respecto a este contexto. Hay muchos factores que ayudan a que el adolescente se relacione de un modo saludable con el entorno escolar como por ejemplo la relación con los compañeros, la relación con el profesor, el respeto en el aula, además del trato de igualdad del profesor hacia los alumnos sin hacer distinciones.

También es necesario exponer al adolescente a unas normas y costumbres para que haya un orden, promover la participación y la responsabilidad e informarle de las consecuencias que pueden generarse si lleva a cabo conductas de riesgo.

En cuanto a todas las conductas de riesgo relacionadas con el entorno escolar en la adolescencia podemos observar las siguientes: consumo de tóxicos, conductas sexuales de riesgo, mal uso de internet, entre otras.

Con relación al consumo de tóxicos se ha visto que hay una estrecha relación con la deserción escolar como causa y como efecto. Se ha visto que los adolescentes que consumen alcohol o tabaco tienen menor desempeño académico.

Hay múltiples factores que predicen la iniciación de los adolescentes en el mundo de las drogas, tales como: que los padres tengan bajas expectativas sobre la educación de los hijos, poca disciplina y normas. Se ha visto que es tan mala la ausencia de implicación maternal como la sobreimplicación.

Hay dos claves que pueden ayudar a prevenir el consumo de sustancias: Una es la comunicación familiar, en la cual se genere la suficiente confianza para poder contar los problemas a los padres.

Otra es la cohesión familiar en la cual los adolescentes pueden participar en las decisiones familiares.

En cuanto a las conductas sexuales de riesgo se ha visto que en 2009 al menos el 27.7% de los adolescentes habían empezado su vida sexual y que solo 4 de cada 10 habían utilizado algún anticonceptivo.

Existen algunas habilidades que ayudan al adolescente a permanecer en el colegio y facilitan su acomodación: apoyo de los profesores ante las dificultades al igual que la actitud del estudiante ante las dificultades. Otra habilidad importante es el autoconocimiento, es decir conocer las estrategias de estudio que más favorezcan.

Por otro lado, es necesario tomar medidas para prevenir el estrés o evitar que éste se acumule y tener una motivación interna para el estudio.

Por último, lo que me gustaría mencionar en el presente ensayo sobre la amistad corto, pero no menos importante habría que destacar la capacidad para pedir ayuda cuando no puede afrontar una situación, así como tener claras las metas de futuro o al menos saber lo que no quiere.

Con los amigos

La amistad se considera una relación que se construye a lo largo del tiempo, la cual está basada en la construcción de grupos de pares o amigos quienes son fundamentales para el desarrollo del crecimiento personal y puede llegar a ser perdurable si ambas partes aportan su granito de arena y no descuidan la relación.

Gran parte de la vida social de los adolescentes transcurre con los amigos. Comparten más tiempo con ellos que con su propia familia, ya que si por algo se caracteriza esta etapa de la vida es por la necesidad de pasar mucho tiempo con gente de la misma edad, la cual puede aconsejar y ayudar cuando más se necesita.

Dentro de la amistad existen dos tipos de amigos: por una parte, están los “amistosos” con los cuales se construye una relación buena pero carente de vínculo afectivo tan fuerte como para denominarlo amistad. Por otra parte, están los amigos más íntimos, que son los de verdad, con los que compartes y tienes muchas cosas en común.

En la amistad predomina la confianza, la ayuda mutua y el afecto, pero también está relacionada con la desviación, el riesgo, el dejarse llevar y las malas compañías.

En muchos ensayos cortos sobre la amistad leemos que los amigos pueden influir positiva o negativamente en aspectos académicos, morales y de salud, dependiendo de la autoestima que la persona tenga y de la propia seguridad en sí misma y es pura verdad.

A diferencia de la familia, los amigos son espejos condicionales. Los adolescentes que más amigos tienen son más competentes socialmente, más cooperativos e informan de una autoestima más positiva. Son semejantes en las metas, aspiraciones, dependencia, timidez, así como en actividades de riegos, tales como: el consumo de sustancias, la actividad sexual y el comportamiento antisocial.

Las razones por las que aparecen roces o conflictos entre amigos son variadas:

Una de ellas es la propia inestabilidad emocional en la que viven los adolescentes, otra la cantidad de tiempo que pasan juntos, ya que a veces es necesario tener espacio vital. También puede causar conflicto la seguridad que da la amistad, es decir la facilidad para la crítica directa que se deriva de esta.

Por último, la falta de habilidades sociales constituye un problema que puede y debe mejorarse con la edad y las experiencias vividas.

Muchas veces aparece el bullying o acoso escolar, cuyo significado es violencia entre pares por abuso de poder. Se caracteriza por ser una conducta agresiva, intencionada y que busca perjudicar a la otra persona.

Suele incluir conductas de diversa naturaleza, tales como: insultos o amenazas. Los problemas se repiten y prolongan durante cierto tiempo. La provoca uno o varios alumnos los cuales atacan a una víctima que esta indefensa y no sabe cómo defenderse. Se mantiene por dos razones: ignorancia o pasividad por parte de las personas que rodean tanto a los agresores como a las víctimas y no intervienen ya sea consciente o inconscientemente.

Los principales tipos de bullying son cuatro:

  • El físico: en el cual hay empujones, patadas o incluso agresiones con objetos.
  • La verbal: es la que más predomina y se caracteriza por insultar, menospreciar y resaltar algún defecto físico de la persona.
  • Psicológico: Se pretender aislar al acosado del resto de la gente y a veces hacer partícipes a otros individuos en esta acción.

El agresor suele tener un comportamiento agresivo, apático e impulsivo. Hay dos tipos de agresores:

  • el activo que va de cara y agrede personalmente a la víctima.
  • el indirecto que dirige el comportamiento de un grupo de personas, induciendo a actos de violencia contra inocentes.

Las víctimas se caracterizan por tener gafas, color o piel distinta al resto o dificultades en el habla.

Al igual que ocurre con los agresores se diferencian dos tipos de víctimas: por un lado, está la provocativa la cual es desafiante, con problemas de concentración y con tendencia a la hiperactividad. Por otro lado, está la victima pasiva, son personas inseguras, generalmente tímidas e introvertidas.

Se ha demostrado en una investigación que más del 60% de los alumnos son espectadores, de los cuales un 16,9% no hace nada para ayudar a las víctimas, un 12,97% intenta ayudar, pero los resultados no son los esperados y un 17,61% hace algo y logra resultados positivos.

El acoso escolar desencadena una serie de consecuencias en la victima como pueden ser: fracaso escolar, ansiedad, baja autoestima o en casos más extremos el suicidio. En definitiva, se forma una personalidad insegura y con muchos miedos sociales.

La familia tiene una importancia fundamental en el aprendizaje de las formas de relación interpersonal. Hay varios factores que hay que tener en cuenta para que los adolescentes no se conviertan en agresores o víctimas y surgen en la niñez.

Algunos de esos factores son: El estilo educativo que usan los padres, las relaciones con los hermanos y con los padres, actitud emotiva y permisibilidad de los padres y métodos que usan para castigarlos.

Son varias las funciones de la amistad, en múltiples ensayos de la amistadd o investigaciones sobre los adolescentes podemos leer las principales: contribuye al desarrollo moral en la medida en que se aprende normas y valores, junto a habilidades y competencias sociales. Además, proporciona placer y diversión a partes iguales, favoreciendo el lenguaje y la exploración y satisfaciendo necesidades emocionales de amor y de cercanía.

Se han observados diferencias en la amistad según el sexo. Las chicas buscan relaciones basadas en la intimidad y la confidencia en las cuales se pueda compartir secretos y confidencias, mientras que las amistades entre chicos son menos profundas y surgen con mayor frecuencia en actividades compartidas o para la búsqueda de ayuda cuando se meten en algún problema.

Hay ciertas recomendaciones o pautas para que la amistad entre adolescentes sea lo más sana posible:

  • que los padres no sean ajenos a las relaciones de amistad y conozcan a los amigos de sus hijos.
  • Incentivar el diálogo y la comunicación abierta.
  • Implicar a los adolescentes en grupos de actividades y ocio para ayudarles a que se alejen de grupos que participan en actividades de riesgo.
  • Como última recomendación, hacerles sentir que tienen el apoyo suficiente como para poder contar las cosas sin tener vergüenza alguna.

 

En pareja

El problema de las relaciones de pareja es cada vez más frecuente entre los adolescentes, por eso hay que prestar bastante atención a los ensayos literarios de amistad de los adolescentes, para que investiguen ellos mismos del tema. La violencia suele empezar en las relaciones de manera gradual, es decir que no aparece de manera espontánea. Pero una vez asentada en la relación el pronóstico de la pareja es negativo ya que una vez que empieza suele continuar, incluso agravándose en etapas posteriores.

La violencia en la pareja incluye diferentes tipos (psíquica, física o sexual) y puede ir desde las manifestaciones más leves hasta la más peligrosa que es el asesinato. Se ha visto que en las parejas jóvenes la violencia suele ser más de tipo psicológica y no tanto física. Pero en estas relaciones se ve violencia en base a unas variables que pueden ser de distintos tipos, variables de personalidad anómala como sería la ira, la impulsividad o la irascibilidad, por ejemplo, alteraciones psicopatológicas.

El problema que tienen los adolescentes es que en muchas ocasiones las agresiones, que en general no suelen llegar a magnitudes altas, las reconocen como arrebatos pasajeros. Muchos adolescentes confunden todas estas manifestaciones de conducta agresiva con la palabra amor.

Hay una serie de factores de riesgo relacionados con la prevalencia de las malas relaciones en la adolescencia como, por ejemplo, el bajo nivel socioeconómico, pertenecer a determinadas etnias, etc. (O’Keefe, 2005). Otro de los factores que se ha visto que influye es la exposición previa a violencia, como sería la presencia de violencia en casa por parte de los padres al adolescente, o incluso entre los propios padres.

Las conductas negativas que se pueden manifestar en las relaciones de pareja son: exigir explicaciones por todo y pretender conocer hasta su pensamiento más recóndito, querer saber con todo lujo de detalles dónde va y dónde estuvo, formular prohibiciones o amenazas, posteriormente se podrían ver agresiones verbales, psicológicas y sexuales. Esto se puede ver reflejado por Eaton et al. (2010) que especifican que este tipo de conductas pueden darse por parte de una pareja actual o pasada, en persona o a través de diferentes medios electrónicos.

En los ensayos literarios de la amistad de los adolescentes y otras investigaciones vemos que la tasa de prevalencia de las actitudes violentas en las parejas oscila entre el 9% y el 38%. Debido a esto nace la necesidad de trabajar en la prevención de todas las conductas de riesgo que se puedan dar dentro de la pareja a lo largo de la adolescencia. Las escuelas son consideradas el lugar idóneo en cuanto a la concienciación en las relaciones de pareja saludables. Se entiende como una relación saludable aquella que proporciona afecto, respeto y confianza. Las principales características de esta son:

  • Nos sentimos bien haciendo cosas juntos.
  • Cada uno tiene su espacio, con diferentes aficiones, gustos, amistades, etc.
  • No cambiamos nuestro comportamiento para agradar a la otra persona.
  • Nos gusta nuestra pareja tal y como es y no tratamos de cambiarla.
  • A la hora de discutir intentamos encontrar soluciones satisfactorias para los dos.
  • Confianza y honestidad mutua.
  • La comunicación es una herramienta esencial para expresarnos, y esta comunicación tiene que ser respetuosa en ambos.
  • Las relaciones sexuales tienen que ser por deseo de ambos.
  • Y la última y más importante, es que ambos miembros de la pareja deben reconocer la igualdad de género en la relación.

Se han visto dos programas de prevención que son el Proyecto de Relaciones entre Jóvenes o Youth Relationships Project (Wolfe et al., 1996) y Citas Seguras o Safe Dates (Foshee, Bauman, Ennett, Suchindran, Benefield y Linder, 2005). El primero trata de prevenir la violencia de la pareja en jóvenes que han sufrido maltrato infantil o por su exposición a violencia doméstica, y el segundo está hecho para aplicarlo de manera generalizada en los colegios.

Un tercer programa es la Cuarta R o Fourth R (Wolfe et al., 2009) se trata de un programa de prevención primaria, para la aplicación en el entorno escolar. Su objetivo principal es la prevención de la violencia en la pareja y las conductas de riesgo que derivan en esta conducta. El elemento central, es un programa de 21 temas curriculares relativos a las habilidades que tratan de promover las relaciones saludables, y cuyas unidades principales son la violencia, el comportamiento sexual de alto riesgo, y el uso de sustancias entre los adolescentes. (Crooks et al., 2011). Es decir, que este programa se basa en tres unidades centradas en la violencia, el consumo de sustancies y un comportamiento sexual saludable.

Intervención

Las autoras de este trabajo han decidido realizar una intervención centrándose en los cuatro hábitos trabajados anteriormente, para que el adolescente y las personas que le rodean se sientan lo más cómodas posible durante el desarrollo de esta etapa.

En base a las referencias bibliográficas que se han encontrado, se ha visto que todos los ámbitos sociales son pilares fundamentales para el desarrollo psicológico del joven. si uno de esta falla puede afectar al resto, causando así una desarmonía en el individuo

A continuación, llevaremos a cabo una serie de pautas para el correcto desarrollo en la vida del individuo en los diferentes ámbitos que poco probable encontrará en otros ensayos literarios sobre la amistad:

En casa.

  • Evitar discusiones, peleas u otros actos negativos delante del joven.
  • Incluir al menor en las decisiones familiares que le incumban.
  • Hacer una repartición equitativa de las tareas del hogar.
  • Si hay más de un hijo, no compararles entre ellos.
  • Hablar con los hijos y no a los hijos.
  • Promover la comunicación activa en la familia.
  • No chantajear a los hijos con castigos, ni premios.
  • En caso de divorcio, no desvalorar las decisiones del otro progenitor.
  • Utilizar un estilo educativo democrático.
  • Darles apoyo cuando lo necesiten.
  • Tiempo de calidad con los hijos.
  • Interesarte por el entorno de tu hijo.

 

En el colegio.

  • Los maestros deberían de estar más atentos a los niños con posibles dificultades, ya sean del aprendizaje como sociales.
  • Realizar más charlas educativas, como educación afectivo sexual, consumo de estupefacientes, violencia de género, bullying, etc.
  • Mas formación a los profesores en temas como la depresión, bullying, dislexia, etc.
  • Disponer de gente especializada para tratar problemas específicos de esta etapa, a los que los alumnos puedan pedir ayuda.
  • Fomentar las capacidades y/o habilidades en las que cada alumno destaque
  • Respetar la autoridad en clase.
  • Saber respetar las normas.
  • Prestar ayuda a los compañeros.
  • Colaborar activamente en las actividades del aula.
  • Puntualidad.
  • Considerar y respetar el derecho de sus compañeros a estudiar.

 

Con los amigos.

  • No dejarse llevar por las influencias del grupo de iguales.
  • Apoyarse mutuamente.
  • Respetar las diversas opiniones del grupo.
  • Saber perdonar.
  • Ser agradecido con los iguales.
  • No ser crítico y/o juzgar ciertas actitudes de los amigos.
  • Hacer críticas constructivas.
  • Actividades de riesgo.
  • Rodearse de gente con la que se comparta hobbies y actividades de ocio.
  • Expresar afecto hacia las amistades en el dia a dia y no solo cuando se haya cometido un error.

 

En pareja

  • No controlar, vigilar… a la otra persona.
  • Llevar prácticas sexuales consensuadas por ambos miembros de la pareja.
  • No coaccionar a la otra persona para que cambie de amistades.
  • No llevar a cabo prácticas sexuales de riesgo.
  • No denigrar a la otra persona.
  • No hacer chantaje emocional, psicológico…
  • Respetar los gustos y opiniones del otro.
  • Confianza.
  • Lealtad.

 

Conclusión

A modo general se puede decir que la etapa de la adolescencia es una etapa difícil, tanto para el adolescente como para las personas que se encuentran en su entorno más cercano, que pueden ser sus familiares, amigos, compañeros de clase y pareja.

Es una etapa de muchos cambios, aunque el más difícil sería el de la identidad y el auto concepto. Por esto es la etapa más conflictiva en el proceso del desarrollo del individuo.

Dentro de los diferentes ámbitos hay diferentes factores de riesgo que pueden afectar a la vida saludable del adolescente, y al decir saludable se hace referencia a buenas relaciones familiares, una relación sana con la pareja, buena relación con los iguales, etc.

Cuando se habla de los factores de riesgo se hace referencia a los distintos ámbitos en la vida social del adolescente. En el ámbito familiar, pueden influir en el adolescente las diferentes situaciones de conflicto de sus padres cómo serían las discusiones, gritos, peleas, etc. Aunque también puede darse por la manera de educar de los padres como por ejemplo sería el estilo educativo autoritario, o simplemente por el temperamento de este.

Por otro lado, en el colegio los compañeros del adolescente tienen una gran influencia sobre este, como por ejemplo en tema de consumos, actividades de riesgo y en algunos casos el bullying. Este es uno de los ámbitos que más programas de prevención tiene en cuanto a todas estas conductas de riesgo.

Esto servirá para evitar las conductas de riesgo y además disminuir el nivel de deserción escolar que se ha visto que está muy relacionado con todas estas conductas.

También, se ha visto que la amistad es uno de los pilares más importantes a lo largo de la adolescencia, ya que estos pasan más tiempo con sus amigos que con sus familiares y se convierten en el mayor apoyo. Por eso hacer un ensayo de la amistad en la adolescencia es algo muy bueno para prevenir la influencia negativa. Aunque es uno de los problemas principales entre los amigos, en cuanto a todas las actividades de riesgo que se han visto antes y los conflictos que pueden aparecer entre estos. En este ámbito, otro de los problemas importantes es la falta de habilidades sociales, ya que esto impediría al adolescente establecer relaciones sociales.

En el último de los ámbitos, que son las relaciones de pareja en la adolescencia, el cual es otro de los pilares fuertes para el adolescente. Se ha visto que hay muchas situaciones de riesgo en cuanto a este tema, peleas, gritos, control de teléfono, etc. Los adolescentes confunden muchas de estas prácticas con el sentimiento de amor, lo bueno de este ámbito es que es otro de los que tienen programas de prevención a la misma vez que de intervención.

Con todos estos detalles hemos podido comprobar que la adolescencia es la etapa más difícil de la vida humana, y que con la ayuda de todos los ámbitos se puede apoyar al joven en su día a día para superar con éxito esta fase.

Bibliografía

  1. Estévez López, e. S. T. E. F. A. N. Í. A., murgui Pérez, s. E. R. G. I. O., musitu Ochoa, g. O. N. Z. A. L. O., & moreno ruiz, d. A. V. I. D. (2008). Clima familiar, clima escolar y satisfacción con la vida en adolescentes. Revista mexicana de psicología, 25(1) pág.119-128.
  2. Ruiz, D. M. (2010). Violencia, factores de ajuste psicosocial y clima familiar y escolar en la adolescencia (Doctoral dissertation, Universidad Pablo de Olavide).
  3. Moreira, V., Sánchez, A., & Mirón, L. (2010). El grupo de amigos en la adolescencia. Relación entre afecto, conflicto y conducta desviada. Boletín de Psicología, 100, 7-21.
  4. Rodríguez Molinero, L. (2019). El adolescente y su entorno: familia, amigos, escuela y medios. [Pediatriaintegral.es / publicacion-2017-06/el-adolescente-y-su-entorno-familia-amigos-escuela-y-medios https://www.pediatriaintegral.es/publicacion-2017-06/el-adolescente-y-su-entorno-familia-amigos-escuela-y-medios/
  5. Sánchez Jiménez, Virginia, Ortega Rivera, Fco. Javier, Ortega Ruiz, Rosario, & Viejo Almanzor, Carmen. (2008). Las relaciones sentimentales en la adolescencia: satisfacción, conflictos y violencia. Escritos de Psicología (Internet), 2(1), 97-109. Recuperado en 20 de febrero de 2019
  6. http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1989-38092008000300011&lng=es&tlng=es.
  7. Bernedo Muñoz, I., & Fuentes Rebollo, M., & Fernández Molina, M. (2005). Percepción del grado de conflicto en familias adoptivas y no adoptivas. Psicothema, 17 (3), 370-374.
  8. https://www.redalyc.org/html/727/72717302/
  9. Escudero, Valentín. Varela, Nuria. Romero, Dolores. Muñiz, Cristina (2011). Adolescentes y familias en conflicto: terapia familiar centrada en la alianza terapéutica.
  10. Torres, E. A., & Aguilar, C. V. (2017, May). Estilos de crianza en adolescentes con conductas agresivas. In Conference Proceedings (Vol. 1, No. 1).
  11. la Torre-Cruz, D., García Linares, M., & Casanova Arias, P. F. (2014). Relaciones entre estilos educativos parentales y agresividad en adolescentes.
  12. Jiménez, Á. P., & Delgado, A. O. (2002). Comunicación y conflicto familiar durante la adolescencia. Anales de Psicología/Annals of Psychology, 18(2), 215-231.
  13. García-Longoria Serrano, M. P., & Sánchez Uríos, A. (2004). La mediación familiar como forma de respuesta a los conflictos familiares.
  14. González-Ortega, I., Echeburúa, E., & Corral, P. D. (2008). Variables significativas en las relaciones violentas en parejas jóvenes: una revisión. Psicología conductual, 16(2), 207-225.
  15. Gila-Ordóñez, J. M., & Callejón-Chinchilla, M. D. (2018). Necesidad de trabajar las relaciones de pareja saludable desde contextos socio-educativos. Sophia, 14(1), 31-38.
  16. Hernando-Gómez, Á., Maraver-López, P., & Pazos-Gómez, M. (2016). Experiencias positivas y negativas en relaciones de pareja de jóvenes y adolescentes. Revista de psicología (Santiago),
  17. Wolfe, D. A., Crooks, C. V., & Hughes, R. (2011). La Cuarta R: un programa escolar de prevención de la violencia en las relaciones de pareja en la adolescencia. Psychosocial Intervention, 20(2), 193-200.
  18. Moreira V., Sánchez A. y Mirón L. (noviembre 2010). El grupo de amigos en la adolescencia. Relación entre afecto, conflicto y conducta desviada. Boletín de psicología, (100), 7-21. Recuperado de
  19. Carrasco, C. F. V., Valdivia, I. M. Á., & Vaquera, E. (2017). Amistades co-étnicas e inter-étnicas en la adolescencia: Diferencias en calidad, conflicto y resolución de problemas. Educación xx1, 20(1).
  20. Fuertes A., Martínez J.L. Y Hernández A. (2001). Relaciones de amistad y competencia en las relaciones con los iguales en la adolescencia. Revista de psicología general y aplicada, 54 (3), 531-546.
  21. Bohórquez López, C., & RODRÍGUEZ-CÁRDENAS, D. E. (2014). Percepción de amistad en adolescentes: el papel de las redes sociales. Revista colombiana de psicología, 23(2).
  22. Guillén Guillén, E., Gordillo Montaño, M., Gordillo Gordillo, M., Ruiz Fernández, I., & Gordillo Solanes, T. (2013). Crecer con la pérdida: el duelo en la infancia y adolescencia. International Journal of Developmental and Educational Psychology, 2(1).
  23. Juan Ignacio Paz Rodríguez. (2010). Relaciones y parejas saludables: cómo disfrutar del sexo y del amor. Recuperado de: http://www.formajoven.org/AdminFJ/doc_recursos/2012210135756201.pdf
  24. Capano, Á., & Ubach, A. (2013). Estilos parentales, parentalidad positiva y formación de padres. Ciencias psicológicas, 7(1), 83-95.
10 October 2022
close
Tu email

Haciendo clic en “Enviar”, estás de acuerdo con nuestros Términos de Servicio y  Estatutos de Privacidad. Te enviaremos ocasionalmente emails relacionados con tu cuenta.

close thanks-icon
¡Gracias!

Su muestra de ensayo ha sido enviada.

Ordenar ahora

Utilizamos cookies para brindarte la mejor experiencia posible. Al continuar, asumiremos que estás de acuerdo con nuestra política de cookies.