Eutanasia para Personas con Enfermedades Terminales e Incurables
Introducción
En los últimos años se ha aplicado el método por el cual un paciente que padezca de una enfermedad terminal e incurable pueda tener la petición de quitar su vida con el fin de minimizar su sufrimiento, ya que esto solo termina por reducir su condición física, moral y espiritual, esto representa un camino asegurado hacia la muerte para el paciente, el beneficio de este acto es aceptado desde otros puntos de vista siempre y cuando el paciente y los familiares estén de acuerdo de la muerte asistida.
En Grecia la concepción de la vida era diferente , una mala vida no era digna de ser vivida y por tanto el eugenismo, ni la eutanasia complicaban a las personas; durante la Edad Media se produjeron cambios frente la muerte y al acto de morir. . (Aguiar, 2009)
‘Las personas que padecen una enfermedad terminal y sufren mucho dolor deberían tener el derecho de acabar con sus vidas, y aquellos que les ayuden no deberían ser perseguidos por la justicia’ (Hawking, 2006)
Actualmente, hay un número muy bajo de países que han despenalizado este método y entre ellos están Canadá y Colombia (2015), Países Bajos, Luxemburgo, Bélgica (2016), y en ellos permanece plasmado como suicidio u homicidio. (FITA, 2016)
La eutanasia es un conflicto de intereses entre la vida como bien jurídico supremo y el derecho a una muerte tranquila y digna, sin imposiciones, la medicina ha regido por principios morales desde la antigüedad, siendo los mismos quienes han hecho una pauta entre lo correcto y lo incorrecto para el desarrollo de los deberes profesionales. (Rodríguez-Arias, 2008)
Desarrollo
En circunstancias vivir es peor que morir, el dolor y el sufrimiento provocado por una enfermedad terminal puede hacer la vida tan moribunda y difícil de llevar, la muerte puede ser llamado como un “acto humanitario” y se considera racional que el médico ayude al homicidio como una forma de morir con dignidad para el paciente, el sufrimiento puede ir más allá del dolor como resultado de las condiciones en el cual esté padeciendo y estas hacer la vida imposible, irritable e insoportable; la vida pierde toda la felicidad y significado de forma en el cual la muerte es preferible.
Existen legislaciones que autorizan este acto, lo hacen bajo la condición de asegurarse del carácter expreso y serio de la petición por parte del enfermo que ve en la muerte la mejor alternativa para suprimir todas sus opciones, decide cuándo y cómo morir. (MATA, 2018)
La vida es el valor esencial y debe ser protegida por el Estado con todos los medios posibles, pero no se puede dejar de un lado la parte humana al señalar que la muerte debe ser lo menos traumática y dolorosa posible, esa alternativa ofrece la eutanasia, la cual dista de ser un crimen, sus motivos son de misericordia tanto para el que sufre como para aquellos que los rodea.
Aquellos países que practican este acto alrededor del mundo solo son 5 que cuentan con leyes que regulan a nivel estatal; el estado de Victoria en Australia pondrá en marcha la suya a mediados del 2019, en algunos países desarrollados existen iniciativas para impulsar su despenalización. (Aguiar, 2009)
Contraargumentos
La expresión de un deseo de muerte no significa que ese paciente esté deseando realmente acabar con su vida, hay evidencias en el cual las medidas preventivas contra el abuso de la eutanasia son inefectivas y han sido violadas en países donde la práctica ha sido legalizada como en Bélgica y Países Bajos implementando la administración de sustancias letales sin el consentimiento del paciente, ausencia de enfermedad terminal, diagnósticos psiquiatras sin tratamiento y casos sin ser reportados. (Martínez Die, 2002)
Muchos individuos que solicitan la eutanasia no desean morir, lo que anhelan es escapar de su sufrimiento, médicos que colaboran en este tipo de prácticas amenazan la integridad moral de la profesión médica, una mejor alternativa es ayudar al paciente a vivir lo mejor posible en su etapa culminante de la vida.
La presión por la legalización de la eutanasia llega a confundir el problema del sufrimiento con la vida de la persona a través de un lapso de depresión, mental o emocionalmente trastornadas; es un deber político que no puede relegarse a la moral tanto particular. (Hidalgo)
Conclusión
La eutanasia es observada por una minoría de personas como un acto de buena fe, ya que evita que personas enfermas sigan sufriendo, tomando en cuenta que los pacientes con todas sus facultades mentales tengan derecho a dirigir su vida hasta el final, decidiendo lo mejor que le convenga, sin ser forzado.
Una forma de ayudar a los pacientes que padecen de enfermedades graves que causa que estén en una camilla conectada a una máquina o a tratamientos dolorosos sin una expectativa de vida, que hayan pasado por muchos momentos de rehabilitación y ahora solo quieran descansar es implementar la eutanasia o tener una muerte irremediable llena de dolor y sufrimiento.
Es absolutamente falso el “derecho a morir”, ya que en algún punto, la vida se termina de alguna u otra forma, es más, todo ser humano tiene derecho a morir en paz, tranquilamente con dignidad o simplemente cuando le llegue la muerte natural ya no habrá nada que objetar.
Si la eutanasia fuese legal, no agrandaría las muertes, sino que disminuiría el dolor causado por alguna enfermedad, sin embargo para vivir hay la libertad y para morir también debería haberlo, la eutanasia seguirá existiendo con o sin ley.
Bibliografía
- Marín-Olalla, F. (2018). La eutanasia: un derecho del siglo xxi. Madrid, España: Asociación Derecho a Morir Dignamente.
- Nombela, C. (2009). La eutanasia: perspectiva ética, jurídica y médica. Madrid: Editorial Ariel.
- Zurriaráin, R. G. (2018). ASPECTOS SOCIALES DE LA EUTANASIA. España: Publicaciones Española de Bioética y Ética Médica.