Juguetes Falsificados del Mercado Chileno

Introducción

Falsificación: “cualesquiera mercancías, incluido su embalaje, que lleven apuesta sin autorización una marca de fábrica o de comercio idéntica a la marca válidamente registrada para tales mercancías, o que no pueda distinguirse en sus aspectos esenciales de esa marca, y que de ese modo lesione los derechos que al titular de la marca de que se trate otorga la legislación del país de importación” -Artículo 51 del Acuerdo sobre los ADPIC – OMC.

El alza a nivel mundial es de un 3,3% en cuanto a la comercialización de productos falsificados en general, por lo que una de las grandes motivaciones para realizar el presente trabajo fue conocer las causas de esto y saber si una de las variantes a la hora de obtener estos productos era el precio y sus consecuencias.

En la sociedad actual el consumismo masivo, los medios de comunicación y más aún las redes sociales, han aumentado y avivado la producción de productos falsificados, y a los mismos productores de estos se les ha facilitado la entrada a las redes, con esto su distribución hasta el consumidor final dejando en segundo plano la precaución con la peligrosidad de estos productos y las consecuencias que pueden provocar.

Lo anterior se ha visto ampliamente reflejado en los incrementos de productos incautados por las instituciones reguladoras en los últimos períodos, provocando un daño no solo a la salud del consumidor sino también a la economía del país, ya que debido a los bajos precios ofrecidos por estos productores se ve altamente afectada la producción y venta nacional.

¿Precio por sobre inocuidad?

Se realiza una investigación exhaustiva que incluye tanto datos cualitativos como cuantitativos, también se trabaja una encuesta a familias de diferentes sectores económicos (sin discriminación de este factor) para saber, reconocer y tener una estimación de la cantidad de familias que ha comprado un juguete imitado sabiendo o no las complicaciones que el uso de este podría proporcionar al menor que le de uso.

Las preguntas se realizaron a 10 familias de diferentes sectores económicos y fueron las siguientes.

• ¿Ha comprado alguna vez juguetes falsificados?

9 de cada 10 familias respondieron que sí

•  ¿Por qué?

Las 9 respondieron que el factor precio era el principal

• ·¿Conoce las implicancias y efectos negativos que producen estos artículos?

Sólo 3 de las familias que han comprado es consciente de las desventajas y riesgos que pueden correr.

Resultados

En países con leyes más desarrolladas existen leyes y exigencias estrictas que regulan la producción de juguetes para evitar las falsificaciones de estos, y a nivel internacional existen entidades que en conjunto apoyan la restricción de la venta de productos falsificados tales como (Indaga Research, 2014):

• Organización Mundial de Aduanas (WCO)
• Organización Mundial de Propiedad Intelectual (WIPO)
• Cámara Internacional de Comercio (ICC)
• Asociación Internacional de Marcas Registradas (INTA)
• INTERPOL

En Chile este es un tema mucho más complicado ya que las leyes discriminan entre producción y comercialización. Para el caso de la producción, no existe un marco legal específico que la regule, por lo que no hay un control concreto respecto a los estándares de calidad y seguridad, por el contrario, sólo existen normas, las que se despliegan a continuación (CESMEC, 2003):

• NCh 773 Of. 1980 seguridad de los juguetes: Propiedades mecánicas y físicas, requisitos
• NCh 774 Of. 1980 ensayo de mercado
• NCh 1936 Of. 1999 migración de ciertos elementos

Al no ser una “ley oficial” los fabricantes no se encuentran obligados a cumplirlas, por lo que, de acuerdo a esto podemos encontrar una amplia cantidad de fabricantes y/o distribuidores que de todo el lote producido solo certifica una parte de esta (2 de cada 10 juguetes) “preocupados” por la calidad para que no se note que el resto no cumple las normas, siendo la producción total a distribuir una amplia cantidad de juguetes no regulados ni certificados dejando al público expuesto al resto de la producción que no cumple las normas regulatorias.

Por otro lado, para el caso de la comercialización, la Ley N° 17.336 de Propiedad Intelectual es la que regula el derecho de autor y la propiedad intelectual. Ampara a autores chilenos y extranjeros domiciliados en Chile y a aquellos extranjeros no domiciliados en el país se les da la protección reconocida por las convenciones internacionales ratificadas en Chile. Dentro de esta encontramos la Ley 19.039, que resguarda la propiedad industrial en Chile, que se preocupa de los diseños, estructuras, etc. creadas por los fabricantes registrados en la INAPI.

Gracias a estas leyes se penaliza y controla la comercialización y distribución de estos principalmente en la calle, que es el canal más fuerte de comercio ilegal. Sin embargo, la calle no es el único canal. Un ejemplo de esto se puede ver claramente reflejado en un caso ocurrido en diciembre del pasado año, donde agentes de la policía incautaron cerca de 6100 juguetes falsificados de un supermercado Montserrat (supermercado establecido), situación denunciada por representantes de Mattel y Disney, los que se percataron de esta situación. (Cooperativa, 2018)

Descripción de juguetes falsificados

La mayoría de los productos ilícitos son producto de imitaciones, principalmente copias que pueden ser reconocidas sin dificultad por los consumidores y usuarios, no así los productos falsificados que intentan imitar con exactitud el producto original. Estas copias son hechas por empresas que trabajan con grandes volúmenes de producción reduciendo los costos provenientes de los estándares de calidad y seguridad, para así ofrecer precios más competitivos.

Según estudios sobre el consumo de productos falsificados se deben evitar los productos que contengan las siguientes características (Indaga Research, 2014):

• Que el contenido del producto sea visiblemente inferior en calidad o cantidad en comparación con el juguete imitado;
• Que el precio del juguete esté por muy debajo del precio del juguete original;
• Que los envases omitan información acerca del país de origen, fabricante, intervalos de edad recomendada;
• Que los diseños y colores sean faltos de detalle y toscos;
• Que carezcan de la rotulación y de las etiquetas que acompañan a los juguetes originales;
• Que el artículo no se venda en puntos de venta y tiendas autorizadas;
• Que incluyan tornillos y piezas fácilmente desprendibles o pinturas tóxicas;
• Que el envase presente un sellado deficiente o una mala calidad;
• Que las materias primas presenten una baja calidad o deficiencias en sus diseños y terminaciones;
• Que combinen diseños, imágenes, marcas y colores de distintas licencias;
• Que presenten idiomas en la rotulación que sean distintos al castellano, impidiendo la correcta comprensión de la información proporcionada.

 

Volúmenes de juguetes falsificados

Los productos falsificados se han convertido en un gran desafío para las entidades reguladoras, y los juguetes más específicamente son una preocupación continua en las importaciones, ya que el control en el ingreso de estos es difícil, el aumento constante y los principales afectados son niños.

En 2017 fueron incautados 6.156.116 productos falsificados, los cuales estaban avaluados en US$12 millones (cigarrillos no incluidos en las cifras). De esto, un 19% corresponde al fraude en propiedad industrial de juguetes. (Dirección Nacional de Aduanas, 2017)

Luego, en 2018 la cantidad de productos sube a 7.094.900 unidades, avaluados en US$103.450.720 (alza de 80% en comparación al año anterior), con un aumento de un 112% en medicamentos, cosméticos, juguetes y alimentos respecto al 2017. (Dirección Nacional de Aduanas, 2018)

Finalmente, solo en el trimestre de enero – febrero del presente año, se registraron dentro de las importaciones una cantidad de 1.846.192 unidades de productos falsificados avaluados en US$9.960.294, cifra de la que un 15,44% representa a los juguetes afectando principalmente a marcas como: Disney, Pokemon, L.O.L, Mario Bros, Marvel Characters y Cartoon Network. (Dirección Nacional de Aduanas, 2019) Según la Aduana las zonas del país por donde se ha detectado la mayor cantidad de mercancías son Valparaíso y San Antonio, seguidos por la Región Metropolitana, Punta Arenas, Arica, Talcahuano e Iquique.

De estos datos se puede concluir que el aumento de importación ilegal de estos productos sigue en un aumento exponencial y los mecanismos de control por parte de aduana y PDI no han evolucionado lo suficiente (considerando que el aforo físico comprende solamente un 3% de las mercancías si el aspecto de éstas no provoca una mayor duda razonable). Control que además solo se ve incrementado en temporadas de mayor auge como navidad y día del niño.

¿Por qué se prefiere estos productos?

Según la investigación realizada con encuestas, se obtuvo que 9 de cada 10 familias ha comprado juguetes falsificados para consumo o para regalo, y de estas 9, sólo 3 es consciente de los peligros y de que están siendo cómplices con la compra de estos objetos.

Se pudo encontrar también que principalmente las personas prefieren estos productos por el precio del artículo y la accesibilidad. Gran parte de las familias suelen comprar en épocas navideñas grandes cantidades de juguetes y accesorios para niños (ya sea porque son familias grandes, o para llevar una mayor alegría a casa) por lo que una de las principales discriminaciones que hacen al comprar un objeto es el precio, y justamente el producto falsificado es mucho más económico en comparación al original, que además puede ser encontrado en diversos lugares ya sea físicos o vía online.

La mayoría de los niños al momento de utilizar los juguetes solo lo hacen por “cierto tiempo” y luego estos quedan de lado yendo a la basura. A través de las encuestas pudimos comprobar que los padres prefieren comprar estos juguetes que tienen una corta vida útil ya que los niños solo juegan con ellos por un corto período de tiempo, entonces para ellos es preferible comprar algo de bajo precio en vez de algo de alto precio y calidad considerando que al final estos solo terminan botados o guardados en una caja sin utilizar.

Por otro lado, las familias se ven fuertemente impulsadas a consumir estos productos por la mercadotecnia y promoción que realizan los canales de televisión, más específicamente los matinales y notas periodísticas que muestran a los consumidores comprando, pidiendo sus opiniones y comparando precios entre vendedores, que, aunque no hacen un “llamado a comprar” oficial, muestran una clara ventaja en los precios de estos.

Peligros de estos productos

Los juguetes producidos en fábricas consolidadas con marcas propias y registradas (originales) son productos equiparados, que obligatoriamente deben pasar por procesos de controles de calidad y cumplir estándares de seguridad requeridos para su salida al mercado, esto asegura y certifica que el juguete tiene componentes y materiales amigables con la salud y seguridad de los niños que los usarán.

Al contrario de estos, los juguetes falsificados no cumplen ni se rigen con estos estándares de calidad e inocuidad pudiendo contener partes o piezas pequeñas, sustancias tóxicas o materiales peligrosos que, eventualmente, pudiesen producir cortes, infecciones e intoxicaciones (para los niños que se introducen estos productos a la boca) vulnerando la seguridad provocando lesiones graves y, en ocasiones, la muerte del menor.

Por otro lado, las imitaciones no tienen ningún tipo de garantía, devolución ni de responsabilidad civil por daños y perjuicios.

Es por esto la importancia de conocer y manejar las diferencias entre un juguete original de uno falsificado a la hora de adquirirlo ya que acarrean costes económicos y personales de los que los fabricantes fraudulentos no se hacen responsables y no siempre se encuentran en tiendas oficiales en las que puedan hacerse cargo los distribuidores, lo que genera un malestar en el comprador al no existir “servicio al cliente”.

Tratamiento para los juguetes falsificados una vez decomisados

A nivel internacional la OMC a través del Acuerdo sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad Industrial relacionados con el Comercio (Acuerdo sobre los ADPIC, artículo 46) establece que la eliminación de estos productos debe ser obligatoria, no basta solo con retirarlos de los puntos de venta.

En un principio la acción de eliminar constaba con hacer desaparecer estos productos de las áreas comerciales, pero a medida que la preocupación ambiental se fue acrecentando se adoptaron otras opciones para poder prescindir de ellos, y es que la eliminación de estos no solo es una problemática sobre la cantidad de falsificación existente (problemas logísticos sobre almacenamiento), sino también una medioambiental puesto que no se sabe la procedencia de estos y los elementos utilizados para su elaboración, como plásticos o elementos tóxicos, en especial el área de la juguetería. Según la UNDOC (United Nations Office on Drugs and Crime) “los costes ecológicos de la falsificación a menudo se subestiman. Al no estar regulada, la producción de mercancías falsificadas puede plantear problemas medioambientales. La eliminación de manera ilegal de tintes y productos químicos tóxicos, y la contaminación atmosférica no regulada son algunas de las formas en las que la falsificación puede infringir daños al medio ambiente”.

Algunas de las opciones disponibles para poder deshacerse de estos productos son:

• El reciclaje,
• La quema al aire libre,
• El trituramiento,
• El aplastamiento,
• El entierro en vertederos, y
• La donación a entidades benéficas

Estas opciones dependen totalmente del tipo de producto, los requerimientos, mano de obra calificada e instalaciones para poder ejecutar la eliminación del producto, además de las capacidades técnicas y de infraestructura de los entes a cargo de incautación de estos productos. (Indaga Research, 2014)

Discusión/Conclusión

De acuerdo a los datos obtenidos y las cifras de los años 2017, 2018 y comienzos de 2019 se puede vislumbrar claramente el aumento progresivo y brusco de los productos falsificados confiscados, lo que tiene una serie de consecuencias tanto en la producción nacional (porque baja la demanda al tener precios más altos) como en otros factores. Si las personas no consumieran ni compraran tanto de estos productos, la demanda disminuiría y, por ende, la producción también.

Recordemos que según las encuestas todos los compradores tienen preferencia por el precio, el que no sería posible si los costos de producción no fueran tan bajos. Esto genera consecuencias graves, reflejadas en el ahorro en materiales que provocan un serio daño medioambiental y peligrosidad por su baja calidad al consumidor final. Por otro lado, la mano de obra incurrida en la fabricación tiene una procedencia desconocida, de lo que se podría inferir la participación de niños (como en India) o con situaciones deplorables, con vulneración de los derechos humanos y laborales. Finalmente, el comprador colabora indirectamente con el crimen organizado ya que, según la Interpol, el dinero adquirido a través del comercio ilegal de falsificaciones contribuye con crímenes como la trata de personas, distribución de drogas, etc.

En conclusión, la hipótesis planteada se cumple con causa principal en la cultura chilena que prioriza el precio y en la ausencia de conocimientos sobre las implicancias. Por ende, una forma de evitar el alza y erradicar esta práctica sería concientizar y educar a los niños desde el colegio a que no es ético, legal ni positivo comprar juguetes ni productos falsificados en general. Y por otro lado evidenciar las consecuencias anteriormente señaladas y promover la industria certificada y marcas registradas, para generar una conciencia social y las personas consuman con conocimiento y no desde la ignorancia.

Referencias

1. CESMEC. (2003). CESMEC S.A. Obtenido de Centro de estudios, medición y certificación de Calidad: http://www.cesmec.cl/cgi-bin/descarga_documento.cgi/Informativo%20CESMEC%20Nr.%2012.pdf?id=238
2. Cooperativa. (21 de Diciembre de 2018). Cooperativa.cl. Obtenido de https://www.cooperativa.cl/noticias/pais/consumidores/a-dias-de-navidad-incautan-6-000-juguetes-falsificados-en-supermercado/2018-12-21/214126.html
3. Dirección Nacional de Aduanas. (4 de Agosto de 2017). Dirección Nacional de Aduanas. Obtenido de Chile Aduanas Customs: https://www.aduana.cl/aduanas-ha-decomiso-1-264-619-juguetes-durante-el-2017/aduana/2017-08-04/162953.html
4. Dirección Nacional de Aduanas. (12 de Diciembre de 2018). Dirección Nacional de Aduanas. Obtenido de Chile Aduanas Customs: https://www.aduana.cl/aduanas-ha-incautado-7-millones-de-productos-falsos-durante-el-2018/aduana/2018-12-13/161158.html
5. Dirección Nacional de Aduanas. (25 de Abril de 2019). Dirección Nacional de Aduanas. Obtenido de Chile Aduanas Customs: https://www.aduana.cl/juguetes-y-accesorios-falsificados-fueron-los-mas-decomisados-en-el/aduana/2019-04-25/161011.html
6. Indaga Research. (Septiembre de 2014). Asociación General de Consumidores. (A. G. Consumidores, Ed.) Obtenido de ASGECO: http://asgeco.org/consumeoriginal/docs/est