La Expansión Colonial En Los Pueblos Americanos
En 1476 Colón estableció en Lisboa la elaboración de mapas marinos, convencido de que la tierra era redonda, creía que podía llegar a Asia por el oeste, atravesando el océano atlántico. Pero sus cálculos estaban equivocados porque imaginaba la tierra más pequeña de lo que es y, por eso sus planes no convencieron al rey de Portugal ni a sus consejeros.
Colón después de soportar un largo y penoso viaje por regiones desconocidas del océano Atlántico, descubrió tierra la mañana del 12 de octubre de 1492. Al llegar a la costa estaba convencido de que había encontrado una ruta marítima al continente asiático y de que era posible cumplir con la finalidad de su viaje, conseguir la autorización de los soberanos de China y Japón para iniciar un comercio privado de oro y especias bajo los auspicios de sus protectores, los Reyes Católicos de España. En las últimas décadas del siglo XIX se produjo una nueva gran oleada expansiva de los estados más desarrollados.
El proceso de colonización fue extraordinariamente rápido. Hasta 1870 la mitad de la superficie del planeta no había sido aún explorada por los europeos; entre 1870 y 1914 la exploración, conquista y reparto del mundo fue completa. Los territorios conquistados (con 700 millones de habitantes) se extendían por todo el continente africano, toda Oceanía, el norte, sur y oeste de Asia y partes menores de América. En 1914 el 60% de las tierras y el 65% de la población mundial dependían de Europa. Pero incluso en aquellos territorios donde no hubo una conquista territorial y un dominio político y militar (como América Latina y China), hubo una penetración económica.
Las grandes potencias europeas, principalmente España y Portugal, exploraron y se asentaron en los territorios americanos, desde finales del siglo XV y por todo el siglo XVI, en donde este proceso busco expandir los territorios europeos, ampliando su comercio, economía y evangelización.
Los países industrializados necesitaban ampliar los mercados donde colocar sus productos y obtener materias primas y, también, nuevas oportunidades para realizar inversiones de capital rentables. Al mismo tiempo, como consecuencia del importante aumento de la población que se había registrado en Europa durante el siglo XIX, muchos europeos encontraron en los territorios conquistados lugares donde radicarse en busca de mejores oportunidades y abandonaron sus países de origen. La expansión también estuvo relacionada con la pretensión de los europeos de extender su propia cultura, a la que consideraban superior, y con la creciente difusión de ideas nacionalistas.
Existieron diversas causas que impulsaron la expansión colonial tales como, las causas económicas, creadas a partir de la revolución industrial actúa la necesidad de materias primas, mercados donde vender los excedentes y búsqueda de una mayor rentabilidad del capital; las causas sociales, el crecimiento de población fue otra causa importante de la colonización, los países superpoblados estimulaban a su población a emigrar hacia otras partes de la tierra y por último las causas políticas, el nacionalismo marchó de la mano con el imperialismo.
A partir de las causas se originó las consecuencias, en las metrópolis se dio el aumento de rivalidades internacionales, disputas territoriales, guerras y enfrentamientos; para las colonias hubo una transformación de las poblaciones nativas de manera impositiva, trabajo forzoso para los nativos y exterminación étnica.
El descubrimiento del Nuevo Mundo es sin duda uno de los episodios más destacados de la Historia de la humanidad. Este encuentro entre dos grandes culturas, la americana y la europea, no fue un hecho casual, sino que constituyó la culminación de intereses comerciales y ansias de expansión.
Españoles y portugueses, y posteriormente ingleses y franceses, llevaron al nuevo continente su lengua y su religión. Por su parte, el continente americano ha aportado y aporta variadas expresiones artísticas y culturales (música, cine, literatura) que siguen influyendo hoy en la cultura europea.