La Fé en la Obra 'San Manuel Bueno Martir' de Unamuno
Ensayo de San Manuel Bueno Martir, una narrativa de Miguel de Unamuno, fue basada en la época de la Generación del ’98. Durante este tiempo España pasó por una derrota tras las Guerra hispanoamericana, y los autores intentaron de renovar el amor por la patria y por su tradición espiritual y artística. Con estilo sobrio y directo, y de manera simplista y repetitiva, Unamuno pone la religión frente a la razón, y logra pasar por una crisis existencial muy parecida a la de el.
Unamuno nos cuenta sobre San Manuel Bueno Martir, un sacerdote que demostró ser la vida que sostenía al pueblo en el que vivía y a todos sus residentes a través la religión. Sin embargo, se da a conocer que Don Manuel no tiene fe propia, por eso miente para que el pueblo esté satisfecho de vivir. Por esta razón, les está dando una fe que ni él tiene porque sabe que si no lo hace, nadie más lo hará. De esta manera, Don Manuel es santo por sus creencias religiosas y no por sus actos hacia el pueblo. Aquí se hace claro que la regla es el beneficio y bienestar de la gente, aunque su felicidad sea al costo de la verdad.
Por ejemplo, Lázaro, el hermano de Angela, es un gran símbolo de las ideas progresistas. Al llegar del nuevo mundo, quiere la misma vida para su familia, pero Don Manuel “resucita” su fe en la religión, igual como Jesús revivió a Lázaro de la muerte. Incluso, Unamuno también hace referencia a las historias bíblicas con Ángela, quien crea el desconocimiento de la historia, ya que no tiene ni idea que un hombre tan santo como lo es Don Manuel no crea en Dios. Angela es la narradora y nos cuenta la historia con sus palabras. De esta manera, cumple su tarea de mensajera. Además, Blasillo, un residente del pueblo, también representa algo más allá.
Sigue a las creencias y enseñanzas de Don Manuel sin otra razón que porque todos lo hacen la fe ciega. De esta manera, Unamuno representa a todo un pueblo a través de un solo personaje, pintándolos como un retraso mental al seguir ideas sin saber por qué. Finalmente, está el personaje de Don Manuel, quien representa de gran manera a Cristo. Para empezar, el protagonista fue nombrado después de Emanuel, uno de los muchos nombres de Cristo. Aunque le fe de Cristo era de verdad mientras que la de Don Manuel no era en el mismo aspecto, ambas figuras trajeron esperanza y virtud a los que seguían sus palabras.
En conclusión, la historia de San Manuel Bueno, Mártir es una alusión a la crisis religiosa de Unamuno, y siendo así el personaje de Don Manuel es, en mayor parte, una representación directa del autor. Unamuno, así como Don Manuel, es el gran destructor de la fe, porque no quiere decirle a la gente lo que cree en realidad. Explica que la verdad es algo terrible y mortal ya que la gente no puede vivir con ella y él en ese sentido quiere traerle sentido a la vida, no quitarle la vida al pueblo. La temática que aborda la novela es la fe.
