La Importancia De Sigmund Freud En El Siglo XXI
Es casi imposible negar la importancia de Freud durante su contemporaneidad e incluso en pleno siglo XXI sus aportaciones siguen siendo relevantes, o al menos se tienen en cuenta al momento de realizar alguna actividad relacionada con los campos que alguna vez fueron explorados por él, pero no se pueden pasar por alto ciertos aspectos de la obra de Freud, tales como el contexto en que fue escrita, a quién iba dirigida e incluso es pertinente pensar en ¿Qué problemas pensaba resolver?
Para poder hacer un análisis del trabajo de Freud se debe responder a una pregunta cuyo valor sigue siendo elevado a pesar de haber abandonado dicho evento, sin embargo el contexto del autor exige preguntarnos ¿Qué es la modernidad? Por ende, el trabajo será dividido en dos grandes apartados, uno dedicado a responder la pregunta en relación a la modernidad y en el segundo apartado me dedicare a analizar la obra de Freud dentro de una sociedad que se encontraba muy fresca de la transición hacia la modernidad.
¿Qué es la modernidad?
En el comienzo de esta nueva era no solo se dieron revoluciones sociales, también tuvo lugar la llamada Revolución Industrial, que le dio un nuevo enfoque a la manera de hacer los trabajos pesados que mantenían aceitada a la máquina que eran las grandes potencias europeas. Con el descubrimiento del vapor y la creación de máquinas hechas de acero comenzó a nacer, en la clase obrera, un descontento debido a que una sola maquina podía hacer el trabajo de más de un par de hombres. La demanda de productividad estaba aumentando, la paga estaba disminuyendo y la mano de obra era necesitada sólo para mantener toda la maquinaria funcionando, a este paso, las grandes industrias incrementaban el número de trabajadores con el que contaban y la producción creció de manera extraordinaria.
Se dieron conquistas de nuevos territorios por parte de las grandes potencias europeas, hubo insurrecciones, levantamientos y revoluciones en algunos imperios antiguos para derrocar los regímenes feudales e intentar buscar un nuevo orden para dirigir al país. Los antiguos sistemas feudales que se solían implementar (y que se mantuvieron en algunos países incluso empezada la era moderna) mantenían a la gente en una pobreza de nivel extremo. Esta fue una de las causas por las cuales se crearon asambleas de obreros y campesinos para oponerse a la estructura que seguían los estados.
La llama que inició estos movimientos fue la Revolución Francesa, la primera gran revolución que buscó cambiar las inaccesibles instituciones del estado francés para que la clase burguesa (que estaba alejada de la clase noble) y la clase obrera pudieran tener esa oportunidad de tomar la decisión que fuera mejor para el estado.
Es a partir de este momento donde empieza la nueva era, donde la humanidad está en busca de un nuevo sistema de gobierno y donde empieza el largo y doloroso proceso para conformar el nuevo estado moderno a través de los movimientos sociales conformados por obreros y campesinos.
A causa de la Revolución Francesa, muchas otras se desataron con el mismo propósito, derrocar al antiguo régimen y conformar un nuevo estado, un estado moderno.
Una de las revoluciones más importantes que se dieron por consecuencia de la Revolución en Francia, fue la revolución en el pensamiento alemán, quizás, el punto más importante de la revolución alemana es Hegel ya que la praxis revolucionaria empieza a brotar en su filosofía del Estado, denominándolo como una máquina que roba la humanidad del hombre y lo convierte en un simple engranaje para el bienestar del Estado.
En una primera instancia puede parecer que hablar de la modernidad implica remontarse a temporalidades total y completamente ajenas a Freud, pero son estas cuestiones las que afligen a la sociedad de los principios del siglo XX, intentando adaptarse a la intensidad de las Revoluciones Industriales y a las Revoluciones Sociales, además de la creación de nuevos Estados-Nación, por consiguiente, se puede suponer que todos estos factores socioculturales jugaron un papel primordial en cómo el individuo percibe su alrededor y cómo afecta a su yo.
Es aquí cuando la acción contra el Estado comienza a tomar forma. Los pensadores hegelianos de izquierda comienzan ese rompimiento que los llevará del idealismo al materialismo. Comienzan a surgir pensadores más radicales como Bakunin, Proudhon y Marx, esta camada de pensadores materialistas son los que hacen la ruptura definitiva con Dios y dan una nueva perspectiva sobre el Estado y el hombre. Aunque cada uno de estos nuevos pensadores tiene una idea diferente para conformar una nueva sociedad, todas benefician al hombre de la clase proletaria y lo incitan a la lucha revolucionaria, no para destruir el Estado opresor que los está dominando, sino para construir uno más fuerte pero que pueda beneficiar a la clase baja de la sociedad.
Proudhon menciona que la petición del proletariado francés es muy simple y que de esta petición nace la verdadera insurrección. ‘Trabajo para alcanzar el pan cotidiano […] he ahí la base inquebrantable dada a la república, he ahí la verdadera revolución’.
Una parte muy importante del pensamiento proudhoniano revolucionario es la contrarrevolución. ‘El régimen anterior que la revolución trata de abolir y que en su afán para conservarse se hace contrarrevolucionario’. Esto es lo que reclama Proudhon en la frase anteriormente citada. Cuando la revolución de febrero triunfa, las esperanzas del proletariado se ven destruidas por los que una vez apoyaron su causa, el Estado que surgió después de la revolución fue uno aún más poderoso, mas totalitario y por consiguiente, contrarrevolucionario ya que los intereses de los primeros revolucionarios no son los mismos comparados con los nuevos intereses y las nuevas ideas de los nuevos revolucionarios.
Los principios revolucionarios siempre tienen segundas intenciones, más allá de redimir al proletariado y la clase obrera, los revolucionarios buscan establecer su Estado, un Estado con principios revolucionarios, un Estado que pueda darle al proletariado todo lo que necesita pero una vez que se llega al poder, este no se comparte, corrompe todos aquellos principios por los que se lucharon en un comienzo y al final, todos aquellos hombres que fueron utilizados como carne de cañón permanecen en las mismas condiciones y vuelven a ser la raíz de una nueva revolución para combatir a ese nuevo Estado que se volvió contrarrevolucionario. A esto se debe la idea de Proudhon y Bakunin sobre establecer el anarquismo como sistema para regir a la sociedad, si se destruye el Estado por completo, el proletariado no volverá a estar en condiciones de miseria y no se verá la necesidad de acudir a un nuevo movimiento revolucionario y llevar a cabo el mismo proceso repetitivo, el ejercicio dialéctico que son la revolución y la contrarrevolución.
Ahora, hablando del pensamiento comunista de Marx, se puede decir que tiene un cierto número de similitudes con el pensamiento anarquista de Proudhon y la similitud más grande es que ambas corrientes sugieren como único medio de liberación la lucha revolucionaria y comparten la idea de derribar el Estado vigente que los oprime como clase obrera y proletaria, pero a diferencia del anarquismo, que busca vencer al Estado para que este no vuelva a renacer, el comunismo propone implementar un sistema que si tenga un tipo de gobierno, un gobierno proletario.
El proletariado es la base de una sociedad regida por el capital, esta clase social brinda su fuerza de trabajo como única mercancía, pero esta clase de negociación se vio afectada debido al gran impacto de la Revolución Industrial, el número de obreros y proletarios se vio disminuido en las fábricas debido a la nueva maquinaria que podía realizar el trabajo pesado para el cual se necesitaba más de un hombre. Con este industrialismo, el hombre se convierte en parte de la máquina, tal como lo mencionó Hegel en su filosofía del Estado.
El sistema de Marx presenta una gran influencia de la filosofía de Hegel, ya que su pensamiento revolucionario es un constante ejercicio dialéctico en el cual combaten incansablemente la clase burguesa y la clase proletaria de manera directa, Marx menciona que este enfrentamiento se da incluso antes de la era moderna. ‘La historia de todas las sociedades que han existido hasta nuestros días es la historia de las luchas de clases’ (Marx, 1968).
La sociedad humana ha tenido que atravesar una serie de etapas para llegar al llamado capitalismo, desde las sociedades primitivas, el esclavismo y finalmente el feudalismo se llega a la nueva sociedad moderna, ‘la moderna sociedad burguesa […] ha salido de entre las ruinas de la sociedad feudal’.
La moderna sociedad burguesa surge debido a que el sistema feudal ya no podía satisfacer las necesidades de la nueva sociedad naciente, es aquí cuando los medios de producción cambian, cuando la Revolución Industrial se vuelve tan importante y cuando la división de la clase burguesa y proletaria se hace más clara, pero, a diferencia del feudalismo, la sociedad burguesa brinda cierto tipo de beneficios a las masas proletarias e incluso la clase proletaria seria manipulada en beneficio de la clase burguesa. ‘La burguesía no ha forjado solamente las armas que deben darle la muerte; ha producido también los hombres que empuñarán esas armas: los obreros modernos’.
Los objetivos principales de la lucha revolucionaria de Marx fueron convertir al proletariado en una clase social y establecer un régimen comunista que fuera controlado por el proletariado. Este pensamiento tuvo mucha influencia en varios pensadores y revolucionarios posteriores a Marx, ya vimos el caso de Lenin y la revolución en Rusia y todo su movimiento estaba fuertemente basado en el pensamiento comunista de Marx, además, el texto del partido comunista funcionó para motivar a más países a la insurrección.
La obra de Freud
Queda claro que la transición de la humanidad de la Edad Media a la Edad Moderna fue uno de los cambios más complejos y dolorosos que se debieron llevar a cabo, y para poder resaltar la importancia de dicho evento es necesario entenderlo como un proceso y dentro del mismo es donde surge la obra de Freud intentando dar respuestas a una sociedad acongojada por los cambios tan brutales que se presentaron en el ámbito social y cultural, tanto es así que los trabajos de Freud comenzaron a tener cierto impacto en las ciencias suaves y las ciencias duras (Azofeifa, 2009). Si bien es cierto que en pleno siglo XXI las teorías del psicoanálisis planteadas por Freud se podrían considerar como descontinuadas, sin embargo, las bases que dejo el autor son esenciales para la creación de nuevas teorías que pueden funcionar con el individuo del nuevo siglo, dar un enfoque diferente a alguna aproximación que Freud consideraba efectiva para el contemporáneo del siglo XX y su innegable carga sociocultural producto de la modernidad.
La efectividad del trabajo de Freud surge de las ideas que utiliza como base de su teoría psicoanalítica, y es que en una primera instancia parece que se trata de una idea que surge de un pensamiento lógico: “no existe hecho humano que no sea afectado por la doctrina psicoanalítica” (Azofeifa, 2009). Como ejemplo, teniendo en cuenta lo convulso del siglo XX se puede asumir que sucesos como la Primera Guerra Mundial, la caída de grandes imperios europeos, el inicio de las revoluciones sociales como la mexicana y la rusa, tuvieron una influencia enorme en la manera en la que el individuo se relaciona con su entorno.
Como es de esperarse, los grandes conflictos del siglo XX representan parte aguas significantes para aquellos que los viven. Normalmente se suelen apreciar estos hechos desde una perspectiva político-económica sin tomar en cuenta el impacto que estos pueden llegar a tener en un nivel sociocultural e incluso en un nivel individual, quizá una de las razones principales para esta tendencia a ignorar al individuo durante estos acontecimientos es que se suele exagerar la importancia que tienen en las vidas de individuos en especial. Es decir, del mismo modo que millones de personas se vieron involucradas en dichos conflictos, otros cuantos fueron ajenos, dicho de otra manera, la vida para los ajenos no se detenía, las necesidades básicas seguían presentes, aún se debía buscar un trabajo, tener algo que comer, seguir generando ingresos, entre otras actividades que no se pueden ver mermadas, incluso en los tiempos más duros.
Como consecuencia, los problemas mentales y emocionales se tuvieron que afrontar de una nueva forma, utilizando técnicas que anteriormente se hubieran considerado impensables ya que consistían en dar un enfoque totalmente diferente, tomando en cuenta cosas como los sueños, los actos fallidos y los olvidos (Azofeifa, 2009), elementos que en la actualidad se podrían considerar como básicos para poder tener un mejor entendimiento del individuo, además, con el curso del tiempo se han comenzado a tomar en cuenta cuestiones como la religión, la moral, entre otros, que ayudan a entender a la persona de una manera más profunda.
Los elementos anteriormente mencionados comenzaron a jugar un rol más importante dentro de lo que ayuda a definir al individuo. Dichas cuestiones socioculturales le dan al hombre un sentido previamente impensado, es decir, antes era imposible pensar que una inclinación religiosa fuera parte de lo que define a una persona y, por ende, la religión implica ciertos juicios morales que se forjan dentro de la psique de la persona.
A pesar de que la ciencia de la psicología se enfoca en el estudio del ser individual se podría asumir que la teoría del psicoanálisis también puede funcionar en un reducido grupo de personas por lo que se ha establecido anteriormente, se trata de intentar analizar a la persona luego de un acontecimiento que no solo marca al individuo, sino que tiene un impacto igual de fuerte en varias personas que compartieron la experiencia pero la vivieron de una manera diferente, es decir, no toda la sociedad del siglo XX percibió las Guerras Mundiales de la misma manera.
Conclusiones
Los aportes de Freud a la psicología han sido de los más importantes y los más grandes en la historia de la misma, quizá no ayuda a establecerla de una manera contundente dentro de las ciencias por las nuevas técnicas que proponía, sin embargo, sus enfoques cambiaron la manera en la que funcionaba la psicología y la manera en la que esta se acercaba a los individuos.
Por otra parte, las nuevas aproximaciones que propuso Freud pueden funcionar para entender a una sociedad duramente afectada por la modernidad y los cambios socioculturales, es decir, puede ser útil para darnos un contexto más o menos claro de lo que fue la sociedad durante los grandes conflictos del siglo XX que marcaron la historia de la humanidad, por ende, sus técnicas no han sido olvidadas a pesar de que ya han pasado varias décadas.