La Inspiración De Ernest Hemingway: El Viejo y el Mar

Introducción

“Pero los hombres no están hechos para la derrota -dijo- Se les puede destruir pero no derrotar”.  Esta frase la escribe Ernest Hemingway en su novela literaria El viejo y el mar, la cual escribe en La Habana, Cuba, hogar en el que vivió por muchos años.  La escribe en el año 1951,  inspirándose en Gregorio Fuentes, un pescador mitad canario y mitad cubano, que luego es nombrado capitán del yate El Pilar, el cual pertenece a Hemingway. Gregorio fue el acompañante del escritor estadounidense durante muchísimos años en sus aventuras por el mar del Caribe.

Desarrollo

Es importante resaltar que Gregorio fue la inspiración de Hemingway al escribir sobre el personaje de Santiago en la obra ya mencionada, tal que después se ganaría el premio Pulitzer en el año 1953 y el premio Nobel en el 1954. El breve relato fue primeramente publicado en la revista Life en el año 1952, el día primero de septiembre, un año después de escribirlo.  Este relato ganó mucha fama desde el principio, ya que no toca temas que causan polémica y es un relato en el cual te metes a la historia y llegas a amar a los personajes tal como si los conocieras.

Ya que Hemingway usa una técnica que se llama “Iceberg” que consiste en no dar muchas descripciones de las cosas, solo da poca información para que tú te puedas imaginar lo que quieras y vayas formando como tu propia idea de la historia que hizo Él.  Solo da ‘la punta del iceberg’ a conocer, entonces es más divertido y mucho más personal, ya que cada quién lo disfruta a su propia manera y va sacando conclusiones diferentes a las de los demás lectores. Hemingway quiso formar parte de las fuerzas armadas de su país, pero no lo aceptaron porque su vista estaba poco mala.  

Él, insistiendo en que quería ayudar a su país en la guerra, se fue a Italia como conductor de ambulancias.  Pero, en ese mismo año, se tuvo que regresar a Estados Unidos, ya que sus dos piernas resultaron heridas al salvar a un soldado herido que necesitaba ayuda, y así ganándose la medalla de plata por su valor y valentía al salvarlo. Como podemos ver, Hemingway fue un hombre con un coraje y un carácter muy duro, al que le encantaban los deportes y la caza, además de ser un hombre que sabía lo que quería y no se daba por vencido hasta conseguirlo.

Él siempre hizo lo posible para vivir su vida como quisiera y no dejaba llevarse por nadie ni nada, haciendo lo que se le antojaba. Se dice que cuando Hemingway era pequeño, su madre solía vestirlo como mujer y lo obligaba a actuar como tal, tratándolo como si fuera una muñeca.  Pero su juego solo duró hasta que él cumplió seis años, Hemingway estaba seguro de que eso no era lo que quería para su vida y decidió no volver a hacerle caso a su mamá  y a sentir un odio profundo por ella. Ahí fue donde él se dio cuenta de que un hombre puede ser destruido pero nunca derrotado.

Por eso resalta esto en su historia de El Viejo y el mar, quiere hacerle saber a la gente que no importa lo que hayan sufrido o lo que les haya pasado, jamás podrán ser derrotados.“Nuestra grandeza no está en no caer nunca, sino en levantarse cada vez que nos caemos.” Esta frase la dijo Ralph Waldo Emerson, un escritor, filósofo y poeta estadounidense. Y esta está tratando de decir que los hombres no somos perfectos, y que nos vamos a caer muchas veces a lo largo de nuestra vida, pero que nos podemos levantar cada vez que nos caigamos, y al levantarnos, mejorarnos para ya no volver a cometer el mismo error. 

El tema más mencionado y más importante en toda la obra fue la persistencia y la perseverancia de Santiago, que, a pesar de que le pasó de todo en su aventura por el mar, tanto buenas como malas, él nunca se dio por vencido a pesar de que haya estado tan cerca de la muerte.  Siempre estuvo pensando en positivo y motivado a seguir adelante hasta conseguir lo que finalmente quería.  Jamás dudó de su fortaleza ni de su capacidad de poder vencer tanto al pez espada, como a los tiburones, como a las tormentas de agua. Tampoco buscó excusas para poder regresar a su casa y por fin poder descansar. En una parte del relato, Santiago dice: “Qué porquería de mano es está. Pues acalámbrate si quieres.  

Vuélvete una garra, no te servirá de nada”, queriendo decir que nada ni nadie lo iba a detener, ni su mano acalambrada aunque esté hecha una garra completamente.   El hombre puede con lo que sea si tiene algo o alguien por quien vivir, una motivación que los haga querer seguir tratando y tratando hasta finalmente poder.  La motivación es lo que nos mantiene vivos y con ganas de seguir viviendo, sin ella, no tendríamos razones de porque seguir adelante y a la primera cosa mala que nos pasara, nos mataríamos, ya que nos sentiríamos como si no nos quedara nada.

Conclusión

Santiago tiene una motivación muy fuerte, y Hemingway nos lo hace ver demasiado claro, ya que en la obra, Santiago hace una mención excesiva de como quisiera que el muchacho estuviera ahí con él, para poder hablar con él del béisbol, poder reírse con él y poder abrazarlo. Santiago lo veía como si fuera su propio hijo y lo quería como tal, y al igual, Manolín también amaba a Santiago como si fuera su propio padre.  El amor de Santiago a Manolín era lo que lo mantenía vivo y lo único que le quedaba de importancia, ya que su esposa ya no estaba con él desde hace tiempo.