La Pedagogía Y Su Desarrollo A Través De La Historia

En cuanto a John Dewey (20 de octubre de 1859 – 1 de junio de 1952), debemos saber que fue un filósofo y pedagogo estadounidense nacido en Burlington, Vermont. Se graduó en Artes en su universidad local y luego se doctoró en Filosofía en la universidad Johns Hopkins en 1884. Tras eso se dedicó a estudiar los diferentes sistemas educativos alrededor del mundo. En 1896 instituyó la Escuela Dewey, en donde empezó a desarrollar su pedagogía, basado en la producción de reflexiones sobre la vida social que a su vez permiten el desarrollo de ciudadanos plenos y activos de una comunidad. Fue llamado el padre de la educación renovada y también fue uno de los co-fundadores de la corriente pragmática (pragmatismo), en donde se busca la verdad a través de la práctica y de lo observable.

Dewey propone un activismo en cuanto a la educación. Su escuela nueva se centraba especialmente en la actividad y la práctica, dejando de lado los libros de texto y el aprendizaje de memoria. Dewey afirmaba que los alumnos no son seres pasivos a los que el maestro puede moldear fácilmente, por el contrario, se trata de seres que desde un inicio ya son intensamente activos y por esto, la misión de los maestros es tomar esta actividad ya presente y orientarla hacia el camino adecuado. No es suficiente con seguir al pie de la letra el contenido de los libros escolares, o mantener a los alumnos sentados. La educación debería ir más allá, hasta la formación de la vida social. Dewey proponía transformar todos estos contenidos para la acción y la vida, ofreciéndoles así una experiencia vital y personal de conocimiento a los niños.

Dewey buscaba que en el futuro, los estudiantes pudieran desempeñarse como ciudadanos activos de la sociedad y de la democracia, que para Dewey iba mucho más de votar cada cierto tiempo dejando que el gobierno se encargara del resto. Afirmaba que era necesario participar activamente, preocuparse y expresarse, interviniendo en los problemas y dejando de lado la pasividad para comprometerse con la realidad.

Entre sus obras más importantes se encuentran tres: “Mi credo pedagógico” (1867), “Escuela y sociedad” (1899) y “Democracia y educación” (1916). En el primero Dewey expone sus principios pedagógicos. Una obra corta, pero de gran influencia en aquel tiempo, pues consideraba a los procesos psicológicos y sociales del niño como la base de iniciación de la educación. El segundo se compone de algunas conferencias del pedagogo en donde narra la experiencia que adquirió durante sus años en la Escuela Dewey y el tercero que se trata de uno de los libros más completos sobre su propuesta educativa. Tras finalizar este recorrido histórico podemos afirmar que la pedagogía pasó por distintos momentos, que estuvo en constante cambio y adquiriendo nuevo sentidos con el paso de los años. También podemos observar que la mayoría de estos pedagogos no tenían estudios relacionados con la educación, pero aún así fueron capaces de proponer pedagogías de gran profundidad e importancia para nuestra sociedad. Resolviendo así que un pedagogo no es aquel que estudia específicamente para serlo, pero aquel que cuenta con la experiencia y la pasión necesarias.

Uno de los mayores cambios que podemos encontrar durante este camino se dio durante la edad media, período en el cual encontramos una escuela cerrada, vigilada y castigada. Fueron los pedagogos de la modernidad los que lucharon por una escuela diferente, abierta y con más libertad. Propusieron una pedagogía de la naturaleza, basada en el aprendizaje a través del entorno que nos rodea. A partir de aquí, los pedagogos de la contemporaneidad, se enfocaron a su vez en la formación del hombre social, preocupándose por la relación de los estudiantes con respecto a la sociedad y la comunidad a la que pertenecían, dándole especial importancia a las relaciones sociales pero además tomando en cuenta otras áreas como la psicología, biología, pedagogía y la filosofía. Ahora, en nuestros tiempos, se empieza a forjar una pedagogía ligada a la tecnología, pues con la llegada de esta son muchas cosas las que han cambiado, y así mismo, la pedagogía se irá modificando para adaptarse.

También, como un último punto, es factible decir luego de haber examinado cada una de las propuestas anteriores que la pedagogía ideal es aquella que instruye a los niños y jóvenes por medio del entorno, forjando sus habilidades, preocupándose por sus intereses, otorgándoles libertad, enseñándoles el amor por la naturaleza y fortaleciendo a su vez su desarrollo social con el fin de lograr un buen desempeño en la sociedad, además de múltiples otras características esenciales que podemos extraer de cada uno de los aportes dados por estos grandes personajes. Lastimosamente, actualmente en Colombia nuestro sistema educativo sigue estancado en la época del medioevo, manteniendo escuelas cerradas y totalmente vigiladas, sobre pobladas, lejos de la naturaleza, enfocadas solamente en una metodología monótona que no toma en cuenta los intereses de los estudiantes ni su forma de ver el mundo. Es una situación bastante triste, aun más sabiendo que los únicos que pueden contar con un sistema más avanzado y pertinente con respecto al desarrollo que se ha dado en Europa son las personas de más altos recursos. Esperemos que con el paso del tiempo esta situación logre mejorar, ofreciéndoles mejores oportunidades de aprendizaje a las nuevas generaciones y abriéndoles las puertas a un nuevo mundo de conocimiento que aún no conocen, pero que es necesario para el avance de esta, nuestra sociedad, tan deteriorada e ignorante.