Techos Verdes, una Alternativa a la Contaminación

Introducción

En la actualidad las necesidades de la población hacen que se vea obligada a movilizarse a las zonas más céntricas de las grandes ciudades, trayendo como consecuencia que exista más concentración de edificaciones y tránsito vehicular, haciendo que cada día las ciudades presenten niveles de contaminación cada vez más altos, lo que afecta la salud de las personas. Según estudios de la organización mundial de la salud (OMS), la salud de las personas depende del medio ambiental que los rodea (Estrada, Gallo, & Nunes, 2016, p. 81). Los techos verdes son una alternativa que se lleva a cabo en las ciudades en donde la presencia de árboles es escasa debido a la falta de espacio. El propósito de los techos verdes es colocar plantas en las terrazas o techos de los edificios y con esto poder aprovechar el agua de lluvia, contrarrestar la ola de calor de las ciudades y ayudar a la salud de las personas. Esto es importante llevar a cabo, ya que el nivel de contaminación cada día aumenta y con este nuevo método podemos contrarrestar un poco estos efectos del cambio climático.

Desarrollo

Los techos verdes son un sistema que permite la extensión de vegetación en forma de capas sobre superficies que están al aire libre, con la garantía de que estas superficies no tengan daños colaterales y no sufran las edificaciones (Ibanes, 2008, p. 24). Estos techos son utilizados de una manera diferente a la que normalmente se conoce, sus diseños se construyen con técnicas muy sencillas y sin necesidad de mucho capital, por lo que los convierte en una opción rentable. En sí, estos techos ajardinados son construcciones ecológicas y a la vez económicas que traen grandes beneficios para la población. Las plantas producen oxígeno y absorben CO₂ ayudando a que el aire se mantenga en constante purificación. Las capas de vegetación ayudan a que los rayos de sol no caigan directo sobre las edificaciones y esto ayuda a que las temperaturas del día sean más frescas y así poder utilizar en menor cantidad los aires acondicionados. Al estar ubicados en las terrazas de los techos hace que cuando llueva las plantas aprovechen la cantidad de lluvia y así se evita que las alcantarillas se llenen y provoquen inundaciones. El mal clima en las grandes ciudades podría mejorarse mediante el aumento de superficies verdes, principalmente enjardinando edificios y reduciendo las superficies pavimentadas (Minke, 2005, p. 16).

Las cubiertas verdes van más allá de solo ser una fachada o que se van como parte de una decoración, por el contario estos jardines en los edificios son una fusión entre la economía, la ecología y la sociedad. Estos procedimientos son poco convencionales, sin embargo, en algunos países esta técnica se va implementando, haciendo que sea obligatorio la colocación de al menos una terraza verde por cada cinco edificaciones. Este método cambia el concepto de un edificio común que se conoce en la actualidad, haciendo que dé un giro total al momento en el que estos edificios estén diseñados con el fin de introducir elementos naturales en el entorno urbano. Para hacerse una idea, 1 m² de cubierta vegetal puede absorber la misma cantidad de CO₂ que emitiría un vehículo normal en un recorrido de 80 km, Según la United States Environmental Protection Agency (EPA), 1 m² de cubierta vegetal ayuda a absorber 0,2 kg al año de partículas en suspensión en el aire (polvo de aerosoles y partículas de smog) (Brove, 2016, p. 67). Estas cubiertas verdes son viables debido a su estructura y la durabilidad de su cobertura, además que los materiales con los que son fabricadas están preparados para enfrentar las altas radiaciones, tienen un sistema de impermeabilización que ayuda a preservar su durabilidad y soportan cualquier cambio brusco de temperatura.

Tener en cuenta la implementación de estos techos como una alternativa prioritaria o de mayor preferencia es de suma importancia debido a que sus beneficios superan a las dificultades que se podrían encontrar en el proceso de su acogida. El objetivo general es generar beneficios ambientales, pero sin olvidar el aprovechamiento de los demás recursos naturales para un mayor beneficio. Este procedimiento es conocido como un sistema sostenible de drenaje urbano, el cual tiene como objetivo principal disminuir los impactos urbanos enfocados en la calidad y cantidad de la escorrentía y la calidad del ambiente (Correa, 2013, p. 14). Algunas edificaciones se han visto en la necesidad de utilizar materiales que ayuden a contrarrestar la ola de calor, por esto se trata de construir con materiales impermeables o alterar el intercambio de energía, agua y flujos de aire, pero esto genera una alteración atmosférica. La popularidad de los espacios verdes también se refleja en los valores inmobiliarios y como esto nos beneficia, hoy existen muchas experiencias documentadas, especialmente en Europa, donde las cubiertas verdes proporcionan un valor agregado, aumentando el precio comercial de los edificios, en la mayoría de uso residencial (Zielisnky , Gracia, & Vega, 2012, p. 96).

Conclusión

En conclusión, los techos verdes son una alternativa muy eficiente, ya que ayudan a controlar los niveles de contaminación, pero al mismo tiempo aprovecha los recursos naturales para la vegetación. Los techos verdes combaten la ola de calor, pero a la par van a evitar que existan inundaciones o huracanes de polvo. Esta es una técnica viable para cualquier ciudad, tomando en cuenta que los costos no son altos, así que son rentables. Aparte de crear un beneficio para los usuarios, también se crea conciencia ecológica en la sociedad, haciendo que, para los futuros años, esta técnica no sea una opción en los edificios, sino que por el contrario forme parte de los lineamentos al construirlos.

Bibliografía

• Brove, J. (2016). Los nuevos pulmones de la ciudad . CERCHA, 67.
• Correa, D. (2013). VALORACIÓN DEL COSTO-BENEFICIO DE LA IMPLEMENTACIÓN DE TECHOS. Colombia: Universidad de los Andes, 14.
• Estrada, A., Gallo, M., & Nunes, E. (2016). Contaminacion Ambiental. Revista Científica de la Universidad de Cienfuegos, 81.
• Ibanes, R. (2008). Techos vivos Extensivos. Una práctica sostenible por descubrir e investigar en Colombia, 24.
• Minke, G. (2005). Techos Verdes. Alemania: Fin del Siglo.
• Zielisnky , S., Gracia, C., & Vega, P. (2012). Techos Verdes. Revista Gestión y Ambiente, 96.