Tratado de Versalles: el Principio de la Segunda Guerra Mundial
El Tratado de Versalles fue un “acuerdo” entre la Triple Entente y Alemania para concluir la sangrienta Gran Guerra, sin saber que después de 20 años la Segunda Guerra Mundial estallaría, llevándose más vidas de las maneras más inhumanas posibles. En esta investigación histórica lo que se busca es ver de qué manera el Tratado de Versalles influyó en el estallido de la Segunda Guerra Mundial, revisando la manera en la cual se llevó a cabo el tratado, lo que exigían los miembros de la Triple Entente y como perjudicó en Alemania para qué estallará una Segunda Guerra Mundial.
¿Cómo se llevó a cabo el Tratado de Versalles?
A finales del año 1918, El káiser alemán Guillermo II comenzaría a buscar una manera de llegar a una paz con los miembros de la Triple entente, esto debido a la falta de recursos por la crisis social y económica que acontecía en el país casi al final de la Gran Guerra. A pesar de esto, Alemania nunca fue invitado a las reuniones para discutir las condiciones para llevar a cabo el tratado, quedando especialmente esté en manos de los tres grandes: Gran Bretaña, Estados Unidos y Francia; siendo esta última la más radical en sus pedidos y sanciones contra Alemania y sus aliados debido al miedo que sentía de volver a ser atacada o dicho por las propias palabras del primer ministro galo Georges Clemenceau “América está lejos, protegida por los océanos. Ni siquiera Napoleón pudo tocar a Inglaterra. Los dos estáis protegidos. Pero nosotros no lo estamos” (Ràfols, 2014). Cuando se le invito a Alemania a la firma del tratado de Versalles, el ministro de exteriores alemán, Ulrich von Brockdorff-Rantzau, se encontró con un documento que aseguraba una paz que iba a perjudicar y humillar a Alemania. El ministro de exteriores recalcó la falacia de que Alemania fuera la única responsable de la guerra diciendo “Nos pedís que confesemos que somos la única parte culpable de la guerra. Esta confesión en mi boca sería una mentira” (Ràfols, 2014). A pesar de sus reclamos, que nunca fueron escuchados, se le obligo a firmar el tratado amenazando con que las tropas avanzarían hacia Berlín en 24 horas, por lo que Alemania firmó el Tratado de Versalles, dando como concluida la Primera Guerra Mundial.
Debido esto se puede evidenciar que Alemania se vio obligada a firmar el Tratado, a pesar de que estaba en desacuerdo con que no le hayan invitado para debatir acerca de los puntos del tratado las y las duras sanciones que en esta se encontraban.
¿Qué exigían los miembros de la Triple Entente en el Tratado de Versalles?
Las exigencias de los países de la Triple Entente hacia Alemania eran simplemente atroces para esta última. Primero en el ámbito económico, Alemania debía pagar una indemnización de 6,600 millones de libras esterlinas, alegando que Alemania y sus aliados son responsables de las pérdidas y perjuicios de los demás países en la guerra, esto se menciona en el artículo 231 del Tratado de Versalles. También se obligó a Alemania de dar a disponer de sus recursos naturales para pagar la elevadísima indemnización, o como menciona en el tratado “Desde la fecha en que entre en vigor el presente Tratado, todos los depósitos de carbón situados en la cuenca del Sarre, como se define en el artículo 48 de dicho Tratado, pasan a ser completa y absoluta propiedad del Estado Francés” (Archivo nacional de Honduras).
Por otro lado, con respecto al sector político y geográfico, Alemania tuvo que reconocer la independencia de Polonia, perdiendo más de 50000 kilómetros cuadrados. Además, el Tratado de Brest-Litovsk quedaba anulado perdiendo unos 65000 kilómetros cuadrados y un aproximado de 7 millones de habitantes y se le obligó a devolver Alsacia y Lorena a Francia, la provincia de Poznan y Pomeriana e Prusia oriental queda separada. En total Alemania perdió un 13% de su territorio. También termina perdiendo sus colonias en África, en China y en el Pacífico. En lo que viene siendo exclusivamente en la política, se obligó a los países perdedores a instaurar un gobierno democrático en su territorio. Con esto grandes imperios como Alemania y el Austro-húngaro quedarían disueltos o se volverían estados democráticos. Además de que Alemania asumiría toda la culpa de la guerra, como el único causante de esta.
Y por último también se obligó a Alemania a reducir sus tropas a tan solo 100000 hombres, divididos en un máximo de 7 divisiones de infantería y tres de caballería. Las escuelas militares se vieron reducidas a tres: una para cada arma. Y fue abolido el reclutamiento forzoso. Todo esto debido al deseo de Francia de una Alemania debilitada.
Con todo esto se evidencia que los países vencedores querían humillar y debilitar a Alemania, hasta tal punto que no fueran capaces de volver a cometer un ataque hacia otro país o siquiera defenderse de uno.
Una Alemania humillada por un Tratado injusto
“Heerlos, wehrlos, ehrlos”. Desarmados, indefensos y humillados es como se sentían los alemanes tras la firma del tratado. En sí Alemania ya durante la guerra estaba pasando momentos difíciles debido a una creciente revolución que debían retener a toda costa, la gran caída demográfica por las muertes en el frente y la crisis económica que vivían. Todo esto sumado al Tratado de Versalles llevaron a un rencor por parte de los alemanes hacia los países triunfadores de la Gran Guerra, que luego Hitler explotaría ese sentimiento para ascender al poder años más tarde. De hecho, el mismo nuevo Cansiller de Alemania Philipp Scheideman calificó el tratado como “el plan asesino”. De hecho, el Tratado de Versalles creó una situación de acritud y odio. El pueblo alemán entendió el tratado como la venganza de los vencedores.
También si el Tratado de Versalles no hubiera sido tan drástico con Alemania, es posible que se hubiera podido de recuperar de la crisis económica de los años 30 y con eso Hitler no hubiera subido al poder. Y de hecho en su libro “Mi causa” Hitler denostó contra el Tratado de Versalles.
Conclusión
En conclusión, el Tratado de Versalles si influyó mucho en el estallido de la Segunda Guerra Mundial en 1939 debido a que si no fuera por las condiciones tan draconianas implementadas en el Tratado, Alemania se hubiera recuperado, aunque lentamente, de la Gran Guerra y los sentimientos de odio y venganza se hubieran desvanecido con el tiempo, y con esto Hitler no hubiera podido aprovecharlo para llegar al poder. Sin embargo, también hay otros factores como la crisis económica de los años 30 que junto con el Tratado de Versalles hicieron que la guerra estallará otra vez en 1939.