Importancia De Los Villanos En El Cine
Introducción
Los villanos por lo general son la encarnación del mal y por esto mismo suelen ser representados de tal manera que nos sentimos incómodos, inseguros, o incluso atemorizados al verlos. Es por ello que en el cine el vestuario y la apariencia tiene una vital importancia, ya que refuerza en gran medida las aptitudes de cada villano. Por ejemplo, la expresión de Alex, en La Naranja Mecánica.
Nos mira con la cabeza inclinada ligeramente hacia abajo y con una sonrisa perversa que en su conjunto es sinónimo de malicia. Además, cuenta con un sombrero que le cubre parcialmente el rostro, de modo que no somos capaces de identificarlo en su totalidad. Este es otro recurso muy relacionado con los villanos. No se revelan, permanecen en la sombra, en lo desconocido, no los conocemos y eso nos confunde.
Desarrollo
El miedo a lo desconocido sale a relucir en estas ocasiones en las que no aparece el villano hasta un punto muy adentrado en la película. Este sería el caso del género policiaco, por ejemplo. En “se7en” un filme de David Fincher. Un par de detectives comienzan a investigar una serie de asesinatos que resultan guardar una extraña relación… no es hasta el tercer asesinato que dan con el delincuente, momento en el que se revela al mismo.
Antes de ese acontecimiento podríamos haber pensado en cualquier persona, sin embargo, tras la revelación de su apariencia nos damos cuenta de que el asesino reúne todas las características dignas de un psicópata que venía de torturar a 7 personas asignando a cada uno un pecado capital gula, pereza, ira, lujuria, avaricia, envidia y soberbia. En general los villanos son representados con colores oscuros, vestimentas que los ocultan, máscaras, elementos como cicatrices, y lo más importante una manera de ser espeluznante que nos transmite esos sentimientos que tan poco nos gustan.
Tipos de villanos
Dependiendo del género cinematográfico en el que nos fijemos, podemos encontrar diferencias entre los villanos. De esta manera, el cine de animación, la ciencia ficción, o el cine de terror nos muestran todas las facetas que puede adoptar nuestro personaje.
Cine de animación
Comenzando por el cine de animación se muestra claramente un villano así como la relación que guarda con el héroe. En cuanto al físico este género no es para nada una excepción, rasgos muy marcados, pelo negro, voces graves, colores oscuros y fríos… Algunos ejemplos son Cruella de Vil, pesadilla de muchos, con su cabello bicolor, Jafar, un hombre alto vestido de rojo y negro con su bastón con forma de serpiente o Hades dios del inframundo adornado con vestiduras negras y rasgadas.
Cine de terror
En el cine de terror solemos encontrar villanos con máscaras, la cara pintada, sombreros, cicatrices y hasta marionetas. En estos casos los villanos son representados de tal manera que transmitan un miedo real al espectador. Es habitual la representación de escenas que resultan familiares al espectador de modo que este se vea en mayor medida envuelta en la trama.
Ejemplos en este caso son: Hannibal Lecter en El silencio de los corderos, Norman Bates en Psicosis en cuyo caso se revela su rostro al completo, Freddy Krueger en Pesadilla en Elm Street, asesino completamente desfigurado con cuchillas en los dedos a modo de arma, o Alien: El octavo pasajero que, aun siendo un villano no humano, servirá como transición al siguiente punto. Los vilanos no antropológicos, los villanos que no son humanos.
Los villanos no personificados
En ocasiones no existe un villano físico, un personaje al que podamos ver… estos son por ejemplo los acontecimientos que sin ser causados por nadie en especial parecen estar en contra del protagonista. Este es el caso de los desastres naturales, las enfermedades, o eso que podemos llamar “mala suerte”. Este es el caso de películas como “la teoría del todo” en la que el popular físico teórico Stephen Hawking es diagnosticado con ELA, que poco a poco va reduciendo su vida colmando al protagonista de desesperación.
Otro caso puede ser “Interstellar”. En este largometraje al finalizar su expedición por el espacio y tras superar varios problemas graves, es hora de finalizar la misión, pero a causa de las complicaciones del viaje, un agujero negro “Gargantúa” los absorberá si no liberan suficiente peso. Es por ello que el protagonista decide desacoplar el compartimento en el que él mismo se encuentra y así permitir completar su cometido a la última superviviente de la Endurance. De esta manera podemos ver al universo o al propio Gargantúa como el villano que impide proseguir su camino a nuestro héroe.
Como se comentaba al principio, el villano desempeña un papel importante. En muchas ocasiones dejando al margen la mayor o menor relevancia del villano, este despierta un atractivo en el espectador que a veces supera al que despiertan cada uno de los protagonistas. Es por ello por lo que a tantos les vuelve locos Darth Vader en “Star Wars”, o el Joker en “El Caballero Oscuro” por ejemplo.
Conclusión
Este atractivo no siempre ocurre, y además siempre existen villanos que gustan más y otros que gustan menos, pero por lo general, todo amante del cine de ficción tiene un villano con el que se siente identificado… Pero, ¿por qué nos atraen tanto los villanos? Pues bien, existen una serie de cualidades que pueden reunir y están relacionadas en gran medida con ese magnetismo.
En primer lugar se puede hablar del carisma. En definitiva, es la manera que tiene de comportarse cada villano, es más, carisma se define como “magnetismo personal”, por ello, no es de extrañar que los villanos más charlatanes en el buen sentido, y cautivadores, sean los que tienen un número de fanáticos mayor.