Las Evaluaciones Como Parte Integral De La Enseñanza
En la elaboración de los planes de aula se debe tener en cuenta el PEI, el contexto escolar y las características de los estudiantes. Estos planes junto con los planes de área son herramientas centrales dentro del proceso de diseño curricular, porque a través de ellos se establecen las metas de aprendizaje y las estrategias de enseñanza, aprendizaje y evaluación.
El Ministerio de Educación Nacional ha apoyado la aplicación de evaluaciones externas nacionales como las pruebas SABER, el Examen de Estado para Ingreso a la Educación Superior y a nivel internacional la participación en evaluaciones externas, como son PISA, TIMSS, SERCE, e ICCS. El MEN define la evaluación como: una de las actividades que hacen parte y se desarrollan dentro del proceso formativo que se adelanta en la institución escolar, con la cual no solamente aprenden los estudiantes, sino que especialmente, lo hacen los maestros, porque a partir de ella es que deben visualizar, organizar y planificar su trabajo de enseñanza. (MEN, 2009, pág. 23)
En ese orden de ideas las evaluaciones son acciones complementarias en el proceso formativo para que estudiantes, docentes, establecimientos educativos, secretarías de educación, Estado y sociedad en general “cuenten con información permanente, confiable y técnica sobre la calidad educativa y el desempeño concreto de los estudiantes, en diferentes componentes de las competencias básicas”. Lo anterior con el propósito no solo de conocer los resultados sino como un proceso formativo y constructivo para reorientar procesos pedagógicos en el aula e “impactar de forma concreta, puntual, efectiva y eficaz a los actores del sistema y a la calidad educativa del país.” (MEN, 2010).
En la actualización de los planes de aula es necesario que el docente involucre una serie de etapas, momentos y de acciones con el fin de determinar la calidad del proceso de enseñanza y el alcance de los aprendizajes esperados en los estudiantes. En este proceso de planeación, implementación y seguimiento, las evaluaciones externas cumplen un rol fundamental para el fortalecimiento curricular ya que permite al docente reconocer las fortalezas y debilidades del proceso de enseñanza, aprendizaje y evaluación y planear acciones de mejora haciendo seguimiento al aprendizaje a través del uso pedagógico de los resultados, adoptando procesos pedagógicos más efectivos para la adquisición y desarrollo de competencias de los estudiantes.
En este orden de ideas, las evaluaciones externas deben ser entendidas como una parte integral de la enseñanza y una oportunidad para conocer no solo que tanto saben los estudiantes, sino que también la pertinencia y eficacia de la acción docente, los procesos de enseñanza y de aprendizaje, las técnicas de evaluación en el aula, el currículo, los recursos didácticos y otros aspectos pedagógicos.